IU critica la "sumisión" del Gobierno a la Iglesia católica en un Estado aconfesional

Izquierda Unida (IU) ha criticado hoy la "sumisión" de las instituciones del Gobierno a la jerarquía de la Iglesia católica y el "flagrante incumplimiento" del precepto constitucional que establece que España es un Estado aconfesional.

Gaspar Llamazares, portavoz de IU en el Congreso, se ha declarado en contra "del mantenimiento de los privilegios a la jerarquía católica en un Estado aconfesional" como España. Llamazares considera que la "sumisión" que han mostrado las instituciones durante la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud, va en detrimento de otras garantías que marca la Constitución para los ciudadanos que no son católicos. El portavoz, que cree que todo el mundo tiene derecho a profesar libremente su religión, asegura que en las dos últimas legislaturas se han acentuado los privilegios de la Iglesia católica, sobre todo los económicos.

El coordinador federal de la formación, Cayo Lara, también ha criticado el sometimiento de las autoridades a Benedicto VXI. A través de su cuenta en la red social Twitter, Lara ha declarado: "Rajoy, Bono, el rey, el príncipe, besan el anillo del Papa. Zapatero se queda en una inclinación. La sumisión a la Iglesia. Que pena", (sic). El líder de IU ha recordado una frase de Julio Anguita, que el exalcalde de Córdoba e histórico dirigente de IU le dijo al obispo de Córdoba: "Vd. no es mi Obispo pero yo si soy su Alcalde". Esta idea, asegura, define su opinión acerca de cómo debe ser la relación Iglesia-Estado.

Llamazares también ha arremetido contra el Gobierno y Partido Socialista por haberte "plegado" a la Iglesia, y contra el Ministerio de Interior y la Delegación de Gobierno en Madrid por la "encerrona" a los participantes en la manifestación laica del pasado miércoles 17, que derivó en unos incidentes que cree que se podrían haber evitado.

El portavoz parlamentario también ha lamentado "el uso partidista y electoralista" que, según él, ha hecho el PP de la visita del Papa. Cree que los populares "tratan de presentar, sin éxito, a la sociedad, a todos aquellos que criticaban las jornadas como unos herejes y unos infieles radicales y peligrosos". Esto contrasta, según su opinión, con los "valores de entendimiento, solidaridad y amistad de los que dice hacer gala [el PP] en cumpliendo con los mandatos de la Iglesia".