Canal Cayetana
Muy épico lo de cambiar el sistema desde dentro, pero cuando no te quieren en casa y no pueden echarte, o tragas o te ignoran hasta que te vas tú sola
Sucede en ciertas rupturas cuando no son de mutuo acuerdo. Una parte le dice a la otra que ya no la quiere y la otra reacciona como puede. Entonces, se cometen errores. Se arrastra uno, se hace pequeñito, le suplica al otro. O se crece, se revuelve y le clava las garras hasta los codos. Se mandan wasaps lastimeros. Se le trolea en redes. Se cuelgan fotos restregándole lo que se está perdiendo. Se hace un poco el ridículo, la verdad. Pedir casito, llaman ahora al despecho de toda la vida, y se supone que se cura con el tiempo.
Al PP le ha salido una trol en sus propias filas. Cayetana Álvarez de Toledo anda buscando casito en el canal de YouTube que ha abierto para contarnos qué hace desde que Pablo Casado le dijo que ya no la quiere de portavoz parlamentaria. CATilinarias, lo ha llamado, jugando con sus iniciales y los discursos de Cicerón, se ve que no halla referentes más recientes a su altura. En el primer vídeo, Los 44, Cayetana deplora que su sucesora no la incluya entre los diputados que pueden ir a los plenos por las normas anticoronavirus que aprobó ella misma. Su cara al ver que no figura entre “los 44 más importantes” de su grupo es un poema, pero va a seguir de diputada porque cree que la política puede ser “adulta, digna y de calidad” y no como la hacen sus colegas. Y mientras, Casado encantado, claro. Así le preguntan menos por Rajoy, Cospedal y Fernández Díaz, esos ectoplasmas que pululaban por su partido cuando él era un don nadie. Ay, Cayetana, cómo la entiendo. Qué corto el amor y qué largo el olvido. Muy épico lo de cambiar el sistema desde dentro, pero cuando no te quieren en casa y no pueden echarte, o tragas o te ignoran hasta que te vas tú sola. Siempre puede ser youtuber. Solo comentarle que la cosa está difícil en esa jungla donde lo peta Ibai Llanos, un mastuerzo de 25 años que destripa vídeos chorra despatarrado en chándal en el sofá de su casa. Todo es ponerse.
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