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El Partido Republicano ataca en tromba el nombramiento de Tim Walz como candidato demócrata a la vicepresidencia

La campaña de Trump ha tratado de evitar el error de hace dos semanas, cuando la candidatura de Harris la encontró a contrapié

J.D. Vance, este martes en Filadelfia (Pensilvania).
J.D. Vance, este martes en Filadelfia (Pensilvania).Umit Bektas (REUTERS)
Macarena Vidal Liy

El anuncio del presidente estadounidense, Joe Biden, de renunciar a presentarse a la reelección encontró al Partido Republicano desprevenido, sin una respuesta preparada. Esta vez, para el anuncio del candidato demócrata a la vicepresidencia, la campaña de Donald Trump no estaba dispuesta a volver a quedarse en blanco. En cuanto se filtró que el gobernador de Minnesota, Tim Walz, sería el compañero de fórmula de Kamala Harris, el expresidente y todo su equipo se lanzaron a la yugular del hombre que se ha hecho famoso por tildarlos de “raros”.

El Comité Nacional Republicano lanzó de inmediato un vídeo en el que califica a Walz de “el raruno mayor” y le acusa de abrazar una “ideología radical” que “pone en peligro a los niños” y “perjudica a las mujeres”. Trump envió a sus seguidores, por mensaje de texto y correo electrónico, un comentario en el que aseguraba que el gobernador será “el peor vicepresidente en la historia”. “Peor que la peligrosamente izquierdosa y corrupta Kamala Harris, es así de desastroso”.

Esas primeras reacciones apuntan a cuál será la estrategia republicana para intentar crear una imagen negativa de sus rivales entre los votantes, algo que en las dos primeras semanas de candidatura de Harris no habían logrado definir. El partido de Trump tratará de encuadrar a la pareja contrincante como una fórmula excesivamente izquierdista, dispuesta a todo con tal de imponer un programa peligroso para las familias y la economía del país.

Su candidato a vicepresidente, J.D. Vance, compareció este martes en Filadelfia (Pensilvania) para ofrecer una rueda de prensa y una sesión de preguntas y respuestas con votantes en un pabellón polideportivo, horas antes de que la pareja demócrata se presentase por primera vez en un mitin ante 10.000 personas en esa misma ciudad.

“El historial de Walz es una broma”, aseguraba Vance, senador por Ohio, ante un escenario plagado de banderas estadounidenses en el que se leía el lema “Kamala Caos”. “Él [Walz] es uno de los mayores radicales de extrema izquierda en todo Estados Unidos… su selección apunta a que Harris se ha visto forzada a arrodillarse ante la izquierda, el ala de Hamás (la milicia radical palestina al frente de Gaza)”.

Vance planea llevar a cabo una gira por los principales Estados bisagra, casi exactamente a los mismos sitios y al mismo tiempo que los que han anunciado Harris y Walz para su ruta de presentación en siete Estados a lo largo de cinco días: Pensilvania, Wisconsin, Míchigan, Carolina del Norte, Georgia, Nevada y Arizona. Según ha asegurado, en cada parada ofrecerá una rueda de prensa, para marcar el contraste entre la oferta de su fórmula y lo que considera un mutismo sospechoso de la vicepresidenta desde que tomó el relevo en la candidatura presidencial demócrata hace 16 días. “Desde entonces no ha hablado con la prensa en ningún momento”, ha sostenido el número dos de Donald Trump.

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Las críticas de los republicanos contrastan con la satisfacción unánime expresada, al menos en público, entre los demócratas, después de días en los que afloraron divisiones internas sobre los posibles favoritos. El presidente Biden telefoneó a Walz a primeras horas de la mañana de este martes para felicitarle. El otro finalista en la selección, el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, declaraba sus ganas de “viajar por todo el Estado en los próximos 90 días para unir a los residentes de Pensilvania tras mis amigos Kamala Harris y Tim Walz y derrotar a Donald Trump”.

“Kamala Harris ha elegido a un compañero perfecto” y “ha dejado claro qué es lo que defiende. El gobernador Walz no solo cuenta con la experiencia que hace falta para ser vicepresidente, también tiene los valores y la integridad necesarios para hacernos sentir orgullosos”, ha apuntado por su parte el expresidente demócrata Barack Obama.

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Sobre la firma

Macarena Vidal Liy
Es corresponsal de EL PAÍS en Washington. Previamente, trabajó en la corresponsalía del periódico en Asia, en la delegación de EFE en Pekín, cubriendo la Casa Blanca y en el Reino Unido. Siguió como enviada especial conflictos en Bosnia-Herzegovina y Oriente Medio. Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid.
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