El asalto de los bolsonaristas al Congreso, en imágenes

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, inspecciona los daños en el Palacio de Planalto después del asalto llevado a cabo los partidarios del expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, en Brasilia.Eraldo Peres (AP)

Lula da Silva Asalto al Congreso en Brasil

El presidente, Lula da Silva, frente al Congreso de Brasil tras el asalto. El gobernador publicó en su cuenta de Twitter esta fotografía junto a la siguiente declaración: "Justo esta noche estuve en el Palacio del Planalto y en el STF. Los golpistas que promovieron la destrucción de bienes públicos en Brasilia están siendo identificados y serán sancionados. Mañana retomamos labores en el Palacio del Planalto. Democracia siempre. Buenas noches".RICARDO STUCKERT (REUTERS)

Las fuerzas de seguridad retiran las barricadas fuera del Palacio Planalto después del asalto.MAURO PIMENTEL (AFP)

Oficiales forenses de la policía federal buscan evidencias en el palacio Planalto después de que partidarios del expresidente brasileño Jair Bolsonaro invadieran el edificio.CARL DE SOUZA (AFP)

Dos agentes de la Policía Judicial hablan junto a las ventanas rotas de la Corte Suprema después de la invasión. CARL DE SOUZA (AFP)

Partidarios detenidos del expresidente brasileño Jair Bolsonaro suben a un autobús para ser llevados a una comisaría tras los enfentamientos. AMANDA PEROBELLI (REUTERS)

Las fuerzas de seguridad avanzaron hasta retomar el control de los edificios. ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Todos los detenidos han sido trasladados a las instalaciones de la policía de Brasilia, donde se les ha identificado y tomado declaración. ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Partidarios del expresidente brasileño Jair Bolsonaro atacan un vehículo de la Policía Militar durante los enfrentamientos frente al Palacio Presidencial.SERGIO LIMA (AFP)

Al menos 260 personas han sido detenidas por participar en el asalto al Congreso, el Palacio de Planalto y el Tribunal Supremo en Brasilia, según la última cifra ofrecida por la Policía Civil. UESLEI MARCELINO (REUTERS)

Un policía local confronta a la multitud durante la operación para retomar el control de la situación. TON MOLINA (AFP)

Un partidario del expresidente de extrema derecha de Brasil, Jair Bolsonaro, protege a una mujer arrodillada durante las protestas.STRINGER (REUTERS)

Algunos de los bolsonaristas han regresado esta noche al campamento frente al Congreso. UESLEI MARCELINO (REUTERS)

Partidarios del expresidente brasileño Jair Bolsonaro se enfrentan a las fuerzas de seguridad frente al Congreso Nacional de Brasil en Brasilia.ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Un partidario del ex presidente de extrema derecha de Brasil, Jair Bolsonaro, muestra un rosario durante las protestas, en Brasilia. STRINGER (REUTERS)

Los manifestantes en el interior del Palacio Planalto.ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Un helicóptero de la policía sobrevuela encima de los manifestantes. STRINGER (REUTERS)

Tras conocerse el asalto a las instituciones democráticas en Brasil por parte de los seguidores de Bolsonaro, Lula anunció la intervención federal de Brasilia y responsabilizó a su predecesor por los acontecimientos.ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Los seguidores de Jair Bolsonaro vandalizaron las principales áreas del Palacio Planalto. ADRIANO MACHADO (REUTERS)

La primera reacción del expresidente Bolsonaro ha llegado más de dos horas después de que la policía pusiera fin al asalto mediante varios tuits: "Las manifestaciones pacíficas, conforme a la ley, son parte de la democracia. Sin embargo, las depredaciones e invasiones de edificios públicos como las ocurridas hoy, así como las practicadas por la izquierda en 2013 y 2017, escapan a la regla", ha afirmado el ultraderechista. En la imagen, los manifestantes en el interior del Palacio Planalto. ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Hasta las 21.00 de este domingo, el Hospital de Brasilia había recibido 46 heridos en el intento de asalto al Congreso y el Palacio de Planalto. De este total, 40 tenían heridas menores y seis estaban graves. Dos personas necesitaron ser operadas de inmediato.ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Los detenidos enfrentan una pena de entre cuatro y 12 años de cárcel, porque se les ha aplicado el artículo del Código Penal que castiga a quien "intente derrocar un Gobierno legítimamente electo".UESLEI MARCELINO (REUTERS)

Los extremistas, en su mayoría con camisetas amarillas y verdes y banderas de Brasil, se niegan a aceptar la victoria de Lula en las elecciones de octubre.ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Manifestantes partidarios de Bolsonaro, en la explanada donde se encuentra el Congreso, vistos a través de una ventana rota. ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Varios manifestantes se enfrentan con la policía frente al edificio del palacio de Planalto, en Brasilia.Eraldo Peres (AP)

Cientos de manifestantes avanzan por la rampa del edificio del Congreso, en Brasilia. ANDRE BORGES (EFE)

Vista general del Congreso Nacional, el Supremo Tribunal Federal y el palacio del Planalto, sede de la Presidencia de la República.ANDRE BORGES (EFE)

La policía dispara una nube de gas lacrimógeno para intentar detener a los bolsonaristas en su ingreso en las sedes de los tres poderes. ADRIANO MACHADO (REUTERS)

El asalto de Brasilia supone un grave desafío para el nuevo presidente, el izquierdista Lula da Silva.Eraldo Peres (AP)

El presidente Lula tenía previsto visitar esta tarde Araraquara, una ciudad del interior del Estado de São Paulo afectada por las intensas lluvias de los últimos días. Eraldo Peres (AP)

El derrotado Bolsonaro está en Estados Unidos, en Orlando, Florida, a donde viajó dos días antes de la toma de posesión de Lula para evitar darle el solemne relevo y colocarle la banda presidencial.Eraldo Peres (AP)

Desde lo alto del edificio del Congreso, los manifestantes exigían la intervención militar, una consigna repetida desde octubre, cuando Bolsonaro perdió las elecciones en una ajustada segunda vuelta. Eraldo Peres (AP)

Los bolsonaristas entraban y salían a lo largo del complejo de los Tres Poderes en Brasilia. ADRIANO MACHADO (REUTERS)

El asalto de Brasilia recuerda al perpetrado en el Capitolio de Estados Unidos hace dos años, con la diferencia de que el Congreso brasileño no está en sesión, retomará sus actividades en febrero.Eraldo Peres (AP)

Uno de los manifestantes da una patada a una puerta en el palacio de Planalto, sede de la Presidencia. ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Dos manifestantes vandalizan el interior del palacio de Planalto.ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Después de haber irrumpido en el Congreso Nacional, los asaltantes continuaron hacia el palacio de Planalto, sede del Ejecutivo, y la Corte Suprema.ANDRE BORGES (EFE)

Todos los edificios se encontraban este domingo sin trabajadores, por lo que los manifestantes radicales solo han atacado los inmuebles. ANDRE BORGES (EFE)

El grupo, que defiende tesis golpistas, superó una barrera policial y subió la rampa que da acceso al techo de los edificios de la Cámara de los Diputados y del Senado. ANDRE BORGES (EFE)

Las fuerzas de seguridad intentaban contener a la multitud en la calle. ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Partidarios de Jair Bolsonaro durante la protesta frente al Congreso Nacional

El área donde se concentran las sedes de los tres poderes había sido acordonada por las autoridades, pero los manifestantes lograron superar esas barreras e ingresaron en los tres edificios.ADRIANO MACHADO (REUTERS)

Varios manifestantes se cubren desde el interior de la nube de gas lanzada por la policía. ADRIANO MACHADO (REUTERS)