_
_
_
_
_

Simone Tebet: el aplomo femenino que da la sorpresa en las elecciones de Brasil

Considerada la candidata del agronegocio, la senadora que queda en tercer puesto ganó visibilidad por su preparación en los debates televisados

La candidata presidencial del Movimiento Democrático, Simone Tebet, saluda durante un mitin de campaña en Río de Janeiro, el 22 de septiembre de 2022.Foto: BRUNA PRADO (AP) | Vídeo: EPV
Naiara Galarraga Gortázar

La candidata Simone Tebet, de 52 años, es la sorpresa de estas elecciones brasileñas que han liderado desde el inicio de la campaña dos hombres blancos con canas. Con el 99% de los votos escrutados, la senadora —que destacó en los debates televisados pese a que su experiencia política es notablemente menor que la de sus adversarios— quedó en el tercer puesto, con más del 4%. Eso en Brasil equivale a 4,8 millones de votos. Tebet era el único rostro novedoso en el pelotón de cabeza de estos comicios y quedaba, con más del 95% escrutado, por delante de un político superviviente de mil batallas como Ciro Gomes, exministro de Lula da Silva.

Sus tres adversarios llevan más de tres décadas en la vida pública. Ella, perteneciente al Movimiento Democrático Brasileño (MDB) se estrenó como senadora hace dos legislaturas y antes ocupó un alto cargo en el Gobierno de Mato Grosso, tierra del potente sector agropecuario.

Nacida en Tres Lagoas (Mato Grosso), el aplomo y la preparación que ha mostrado en los debates televisados con tres veteranos como Lula, Bolsonaro y Gomes, la colocó en el radar de muchos brasileños que quieren la salida del ultraderechista Bolsonaro pero rechazan darle a Lula el voto en blanco que pide para un tercer mandato.

Tebet es considerada la candidata del agronegocio y ella misma lo reconoció así en el último debate. Pero eso no le impidió mostrarse notablemente preocupada por la cuestión ambiental. En ese cara a cara recordó que en su tierra se notan ya los efectos del cambio climático porque llueve menos. Tebet es la última apuesta de quienes han intentado durante los últimos dos años forjar la llamada tercera vía, un candidato alternativo a Bolsonaro y a la izquierda representada por Lula.

La mayoría de sus compatriotas reparó por primera vez en Tebet durante las sesiones televisadas de la comisión de investigación sobre la gestión de la pandemia. Allí mostró ya las tablas que luego la han encumbrado en los debates, como cuando le dijo la semana pasada al presidente Bolsonaro a la cara que le faltaba coraje para ocuparse de los asuntos importantes en vez de intentar desviar la atención para atacar al Partido e los Trabajadores (PT).

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Su firmeza en los debates la han beneficiado en las urnas. Tebet es además una rareza política en un país donde los hombres dominan con comodidad la política y los cargos que se derivan de ella. Brasil tuvo solo una presidenta mujer, la izquierdista Dilma Rousseff, que terminó de la peor manera, víctima de un juicio político en 2016. Aún no se ha recuperado de aquella experiencia tan traumática. Y su paso por el palacio de Planalto sirvió de poco para cambiar uno de las grandes deudas de la democracia más grande de América Latina: solo el 15% de los cargos públicos está ocupado por mujeres.

Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS América y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la región.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Sobre la firma

Naiara Galarraga Gortázar
Es corresponsal de EL PAÍS en Brasil. Antes fue subjefa de la sección de Internacional, corresponsal de Migraciones, y enviada especial. Trabajó en las redacciones de Madrid, Bilbao y México. En un intervalo de su carrera en el diario, fue corresponsal en Jerusalén para Cuatro/CNN+. Es licenciada y máster en Periodismo (EL PAÍS/UAM).

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_