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Paseo del terror

Lluís Bassets

Desorientarnos y debilitarnos hasta convertirnos en peleles a disposición de quien quiera utilizarnos. Eso es el terror. Una violencia inusitada e incomprensible, que nos deja tirados y sin capacidad para entender el por qué de tanto de dolor y de tanta muerte.

Las víctimas, primero. Claro está. El sin sentido de esas vidas segadas, el dolor inmenso por esos mundos de potencial infinito que ya no serán. Nosotros, después, con nuestra dificultad para vivir así, con una amenaza absurda que afecta a los estadios de fútbol, a las revistas satíricas, a los bares nocturnos, a las salas de música, a las discotecas de ambiente LGBT, a los resorts turísticos, a los aeropuertos y ahora a los paseos marítimos donde las muchedumbre acude a gozar de la fiesta y se encuentra luego engullida por un infierno que le abre sus puertas de par en par.

Es una guerra, se nos dice, y es contra occidente. No hay duda alguna de ambas cosas si nos creemos a pie juntillas la propaganda del autoproclamado Estado Islámico y sus amigos, sus propagandísticas o sus condescendientes simpatizantes. Pero no va a ser una guerra, ni puede serlo, ni queremos que lo sea, si se trata de militarizar nuestras sociedades, perder nuestras libertades y convertirnos en rehenes permanentes del terror, custodiados a distancia por el miedo y la desorientación.

Y tampoco la reconoceremos como una guerra contra occidente si en ese occidente que dicen combatir los asesinos no se incluyen las víctimas de religión musulmana que producen sus atentados –que son la mayoría— y los países que la sufren: Irak, Egipto, Túnez, Turquía, Bangladesh o Arabia Saudí incluso donde han atentado recientemente.

Quedan los argumentos: las guerras, ‘nuestras’ guerras. ¿Siria? ¿Irak? ¿Libia? La embriaguez ideológica que provoca el terror busca explicaciones fundamentadas para las acciones de los asesinos de masas, como si sus mentes actuaran por razones políticas y morales atendibles. Pueden servir las guerras del presente como las del pasado, tal como Gilles Kepel ha documentado con su idea de esa ‘resaca retrocolonial’ que bulle en la cabeza de los franceses de origen argelino o tunecino reclutados por el yihadismo universal a través de un cóctel de marginación social, desencanto político y radicalización islámica (Terreur dans l’hexagone, Gallimard, 2015).

La guerra de Bush y Blair sirve a estos asesinos como sirve la guerra de Argelia, la opresión colonial o, puestos a seguir con el efecto retroactivo, como hace el Estado islámico en sus panfletos, las remotas cruzadas. Cruzados eran, según el lenguaje criminal del yihadismo, quienes murieron aplastados por el camión del asesino yihadista en el Paseo de los Ingleses de Niza convertido en el paseo del terror.

No es una guerra, y no es contra occidente, pero hay que combatir a esta plaga criminal con todos los medios legítimos del Estado de derecho, que son sobre todo policiales y de inteligencia. No hay que creer a esos criminales contra la humanidad cuando pretenden convencernos que son soldados del islam combatiente en guerra contra occidente, pero sí hay que hacer caso de los objetivos que escogen para entender quién es realmente su enemigo: la fiesta popular, el paseo marítimo de una capital del turismo global, la noche del 14 de julio aniversario de la toma de la Bastilla. Quieren terminar con nuestra libertad, con la igualdad y sobre todo con la fraternidad.

Comentarios

De la boca del ex catalán Valls: Francia debe aprender a vivir con el terrorismo. El jefe de inteligencia de Francia dice: Francia está al borde de guerra civil. Derrotados y, como siempre, antes de dar batalla. ¿Dónde está Charles Martell cuando Francia lo necesita más que nunca?
"Pero no va a ser una guerra, ni puede serlo, ni queremos que lo sea, si se trata de militarizar nuestras sociedades, perder nuestras libertades y convertirnos en rehenes permanentes del terror, custodiados a distancia por el miedo y la desorientación." Síndrome de Avestruz. Sr. Bassets, la guerra solo termina de dos maneras: cuando el enemigo se rinde, o cuando el enemigo muere. Rehusar la guerra (No a la guerra digo yo, y yo soy Zapatero) no la gana, sino le garantiza la derrota. Parece que esa derrota es lo que los socialistas buscan. El buenismo es actitud perdedora. Musulmanes del mundo: uniros que Europa se rinde. Invadir ya, las 72 rubias os esperan. Hay mil iglesias que destruir, mil mezquitas que construir. ¿Es eso lo que nos receta, Sr. Bassets?
¡¡SÍ ES UNA GUERRA!! Lo dijo hasta el Papa progre peronista!! Y no alcanza con espías y policias!! Hay que desplegar Ejércitos allí donde haga falta!! Hoy Siria e Irak. La ''NO intervención'' de la Señora Casla es Suicida y Funcional a la Yihad. No podemos quedarnos en Europa atajando los penalties!! sólo con espias y policías!! Eso es suicida!!Y mientras en Bruselas no se pueda detener un terrorista entre la 1 y las 5 A.M. para no molestar su sueño, seguiremos muriendo bajo estos dementes.ALGO muy malo hizo Francia antes: negoció y protegió a ETA; y no sufrió atentados. Luego negoció con Al Qaeda, y no sufrió atentados. Con ISIS no hubo ''negocio'', y ahora tiene Todos los atentados!! Francia toma ahora su propia medicina.
1º)Las Cruzadas fueron una guerra ¿¿Porqué decir que ésta no lo es??2º)BUSH lo tenía clarísimo!! Definió con claridad los ''Estados Fallidos'' y el ''Eje del Mal''. Puso manos a la obra y liberó Afganistán e Irak!! Si Obama hubiera persistido en el esfuerzo, los ayatolas hubieran sucumbido frente al pueblo, los estudiantes y los ''Reformistas'' movilizados en las calles de Irán. Y hoy el mundo sería otro!! Pero No!! Obama tiró todo por la borda, trajo ''los muchachos a casa'' ... y ya tenemos su Herencia: Califato en Irak y Siria, y Terror en Africa, París, Niza, Orlando y San Bernardino. Todo un ''genio'' el ''pacifista'' bananero Husein Obama, vamos!! Un digno émulo de Chamberlain!!
Está claro que es una guerra, tal vez no contra Occidente, pero si contra una parte de Occidente, y también está claro que la está ganando el terrorismo islamista, con 84 nuevas bajas en Niza.El terrorismo islamista ha vuelto a golpear la UE, esta vez le ha tocado a Francia, en una de sus ciudades más turísticas, Niza. Como en los partes de guerra, lo único importante es el número de bajas: 84 muertos y numerosos heridos graves. Un ciudadano de nacionalidad francesa, origen tunecino y religión musulmana, armado y conduciendo un camión, que previamente había alquilado, ha atacado a ciudadanos civiles, no combatientes, desarmados, que intentaban disfrutar de una noche de fiesta viendo fuegos artificiales, atropellándoles. El atentado terrorista tiene numerosas características comunes a otros anteriores, cito algunas: Uno, ha sido indiscriminado. Dos, no ha sido reivindicado de forma clara. Tres, el autor es un ciudadano de religión musulmana. Cuatro, hay imágenes de video de los hechos, imágenes que las televisiones occidentales no han dudado en retransmitir una y otra vez para así contribuir, no sé si de forma intencionada o no, a incrementar los efectos que deseaban provocar los terroristas. Cinco, es evidente que el terrorismo islamista ha querido otra vez generar terror atacando los sectores más desprotegidos de la sociedad francesa, objetivos débiles y vulnerables, para así intentar lograr, como en ocasiones anteriores unas reivindicaciones, objetivos, que existen pero que las autoridades francesas no difunden a la opinión pública.Las características del atentado islamista que la pasada noche ha tenido lugar en Niza, han sido similares a las de otros que se han producido en países occidentales en los últimos años. Y también similares han sido las declaraciones que han hecho hasta ahora dirigentes políticos, expertos y periodistas. Algunos sin escrupulosos, como en ocasiones anteriores, se han atrevido a decir que la causa de este tipo de hechos es la falta de integración de sectores de la población musulmana, en este caso francesa. La explicación a lo ocurrido en Niza, solo es una: El terrorismo islamista quiere generar terror para lograr unas reivindicaciones que las autoridades no difunden a la opinión pública. En contra de lo que defienden algunos líderes políticos occidentales, el terrorismo islamista no ataca valores, ataca personas, civiles débiles y vulnerables, para generar terror e intentar chantajear a sectores de las elites dirigentes del país que atacan, en este caso Francia. En los últimos años Francia es, con diferencia, el país occidental que más ataques del terrorismo islamista ha sufrido, si nos preguntamos ¿Qué está pasando en Francia? ¿Cómo puede ser que esté pasando esto en una de las principales potencias del mundo? A mi entender, la explicación es sencilla, Francia sufre un periodo de decadencia similar al sufrido durante la IIGM, gobernando el Frente Popular, cuando fue invadida por la Alemania nazi sin apenas oponer resistencia. Es evidente, a los hechos me remito, que el Gobierno francés no está combatiendo al terrorismo islamista como debiera, con efectividad. Es por tanto, también evidente, que el terrorismo islamista está ganando la guerra, no solo al Gobierno francés, sino a Occidente, atacando, asesinado a los sectores más vulnerables de la población de algún país Occidental, cuando, donde y como desea, en este caso en Francia, atropellando a ciudadanos que disfrutaban de una fiesta nocturna al aire libre.En Occidente hay terrorismo islamista principalmente por una razón, parafraseando al canciller de Alemania, Ángela Merkel, porque el intento de crear una sociedad multicultural ha fracasado, no solo en Alemania, sino también en otros países occidentales, en concreto en Francia. El terrorismo islamista está ganando la guerra, y está ganando la guerra también principalmente por una razón: Las sociedades occidentales son hoy, en el siglo XXI, sociedades no solo muy multiculturales sino con elites muy mezcladas, superando fronteras nacionales, redes de elites supranacionales, de las cuales hay sectores que se enriquecen de sus vínculos con elites del Mundo musulmán que dan su apoyo al terrorismo islamista, y ello de forma clara favorece que se produzcan atentados e impide que se produzcan proporcionales reacciones y se adopten medidas efectivas para combatirlo.Si analizamos el caso concreto de Francia, constatamos que se cumple lo anterior: Los vínculos existentes entre las elites, y de estas con elites del Mundo musulmán, que apoyan el terrorismo islamista, ha impedido que el Gobierno francés haya adoptado ninguna medida efectiva para combatir el terrorismo islamista. Tal vez, tenga razón el presidente de Francia, F. Hollande, y la guerra contra el terror va a ser larga, no lo sé, de lo que si estoy seguro es de que si no cambia pronto de políticas, en concreto de seguridad, defensa e inmigración, su estancia en el Eliseo va a ser corta, pues el pueblo francés le abrirá la puerta para que lo abandone en las próximas elecciones a la Presidencia de la República Francesa.
HAY 1.600 millones de musulmanes en el mundo. No todos son terroristas, pero si sólo el 0,001% se apunta a la Yihad serían 1,6 millones de Terroristas activos. Mas los cientos de Millones de ''indiferentes'', que también les sirven. ¿Pararemos esto sólo con espias y policias? Ridículo! Donald Trump lo ha visto, y quiere frenar su entrada a EE.UU. ''por un tiempo''. No está loco!UNOS salvajes de la Edad Media se han enterado hace 60 años que bajo tierra tenian un Oro Negro que ni sospechaban. Sólo podían extraerlo Cias. Occidentales con la tecnologia suficiente. Y ellos, a hacer Caja! ¿Y que es lo primero que hicieron con esos MIllones de Petrodólares? Lo recuerdo muy Bien!! Ocupar los mejores hoteles de Londres y París, defecar en las alfombras, limpiarse el culo con las cortinas, pagar la Cuenta, y cambiar de Hotel para repetir la hazaña!! Algunos tenemos memoria!!HOY ya no lo hacen, pero algunos ''tapados'' hacen algo peor, financiar la Yhad!! Y no es la monarquia saudita, como quiere vendernos la señora delirante de la ''No Intervención''.LA SOLUCIÓN: 1)Acabar con el Califato .... EN ORIGEN!!2)Pena de Muerte al Terrorismo.3)Acabar con los Ayatolas terroristas, que siguen traficando para hacerse con insumos para los Misiles y la Bomba Nuclear, tal como acaba de denunciar el espionaje alemán!!4)Acabar con Hezbollá, Hamas, Yihad Islamica, los Martires de Al Aqsa que responden al Presidente palestino Mahmud Abbas, IRA, ETA y Toda la basura criminal que aun pervive. Pena de Muerte a los terroristas. Y Cadena Perpetua a los Colaboradores.5)No se puede vencer a las alimañas con panfletos de ''No a la Guerra'' y ''Papeles para todos''. Los Resultados estan a la vista!!!!!!!!!!
La violencia por la violencia es un desequilibrio psicológico que padecen miles y miles de personas. El problema se complica cuando esa clase de "locura" se disfraza con ideas políticas y religiosas como justiticantes de esos actos. Tal ha sido y es la historia de guerras, saqueos, matanzas, etc., etc. Realmente, es un fenómeno que viene de milenios atrás de cuando surgió el Ser Humano, el llamado Homo Sapien transformado en Inhumano. Está claro que matar para comer no es lo mismo que matar por el placer de matar.

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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