La policía detiene por corrupción a varias personas vinculadas al Gobierno checo

Una operación anticorrupción, relacionada según la prensa local con la venta ilegal de bonos del Estado, ha golpeado de lleno al Gobierno checo con la detención de varios funcionarios próximos al primer ministro, Petr Necas. La policía entró el miércoles por la noche en la sede del Gobierno, en el centro histórico de Praga, así como en el ministerio de Defensa y en varios organismos públicos, como el departamento de Gestión Forestal. Entre los detenidos está la jefa de Gabinete del primer ministro, Jana Nagyová. Según la prensa local, el director de la Oficina del Gobierno, Lubomir Poul, también está involucrado.

Más de 400 policías han participado en esta acción, a una escala nunca vista en el país centroeuropeo. "Es un golpe masivo. Llevábamos mucho tiempo trabajando en este caso", ha afirmado Pavel Hantak, portavoz de la brigada de lucha contra el crimen organizado. La investigación también ha llevado a registrar el ayuntamiento de Praga y varias residencias privadas fuera de la capital.

En rueda de prensa, Necas ha afirmado que no piensa dimitir: "Creo personalmente que ni yo ni ninguno de mis colaboradores hemos hecho nada deshonesto y, en consecuencia, no veo necesario ni dimitir ni convocar elecciones anticipadas". El primer ministro ha defendido especialmente el trabajo de Nagyová, su colaboradora más cercana: "Mi confianza en ella no ha disminuido un ápice".

Sin embargo, la operación sacude la credibilidad del Gobierno de coalición conservador, que había hecho de la lucha contra la corrupción uno de los pilares de su administración. El mes pasado, Necas aprobó un proyecto de ley que da más poderes a la fiscalía a la hora de investigar delitos de corrupción.

El presidente de la República, Milos Zeman, ha convocado a Necas, al jefe de la policía nacional y al líder del principal partido de la oposición a una reunión de urgencia el viernes. Zeman está en Bratislava (Eslovaquia), participando en la 18ª Cumbre de Presidentes Centroeuropeos. Los socialdemócratas, primera fuerza en el Parlamento, ya han pedido la dimisión del Ejecutivo de coalición, que solo suma 99 de los 200 escaños de la Cámara baja.