Un muerto en el atentado de una terrorista suicida en Majashkala

La mujer, cuya desaparición, según la agencia Interfax, había sido denunciada por sus padres el 13 de mayo, se autoinmoló a menos de 100 metros de la sede del ministerio del Interior local. Para ello, se sirvió de granadas llenas de explosivos, perdigones y trozos de metal con una potencia equivalente a 500 gramos de trilita. La policía esperaba poder confirmar la identidad de la autora en las imágenes registradas por las cámaras de vigilancia o bien mediante el DNI de la terrorista. Cinco de los heridos están graves y uno de ellos (un policía) se encuentra en estado crítico. Cuatro de las víctimas iban a ser trasladadas a Moscú para ser operadas.

 En Majashkalá, el atentado del sábado culminaba una semana de pesadilla iniciada el 20 de mayo con dos atentados en cadena, que se cobraron cuatro muertos (dos miembros de la policía judicial y dos agentes del ministerio del Interior) e hirieron a cuarenta personas. En aquel caso los terroristas utilizaron un mando a distancia para hacer volar un coche con una carga explosiva colocada en su parte inferior. Quince minutos más tarde, cuando los agentes habían acudido al lugar del primer atentado, hicieron volar por los aires otro vehículo vecino. En ambos casos, el explosivo se encontraba mezclado con tornillos y recortes metálicos.

La mujer se sirvió de granadas llenas de explosivos, perdigones y trozos de metal, con una potencia equivalente a 500 gramos de trilita

 Los atentados y también las operaciones antiterroristas protagonizadas por los órganos del orden público parecen haberse intensificado en el Cáucaso ruso cuando falta menos de un año para que se celebren las Olimpiadas de Invierno de Sochi en febrero de 2014. Garantizar la seguridad de los Juegos es uno de los grandes objetivos de las autoridades rusas, lo que implica “limpiar” de potenciales amenazas, incluido el islamismo radical, un territorio que va desde el Caspio hasta el Mar Negro.

Según la agencia Interfax Madina Aliyeva (de soltera Salajánova) habia estado casada primero con Alí Aliyev, que fue “liquidado” en el verano de 2009, y luego con Kurbán Dzhapáyev, que fue muerto en una operación policial en Kaspiysk en el verano de 2010. Según el Comité Nacional Antiterrorista, Aliyeva se habría reunido con activistas en la clandestinidad en el extranjero. En el atentado del sábado resultó herido un cámara de la televisión de Daguestán que pasaba casualmente por el lugar de los hechos.