Al menos dos muertos en un ataque talibán al Ministerio afgano de Defensa

El Ministerio afgano de Defensa ha sido escenario esta mañana de un ataque terrorista que se ha saldado, por el momento, con la muerte de dos personas, una de ellas un presunto kamikaze que, vestido de soldado, ha logrado acceder al edificio. Según ha informado un portavoz del Ministerio, un soldado ha abierto fuego en el interior del edifico, matando a dos empleados e hiriendo a otros siete, mientras un terrorista suicida intentaba llegar a la oficina del ministro, en la segunda planta. No lo ha conseguido y ha sido abatido. Según estas declaraciones, se trataría de un ataque combinado, que ha sido reivindicado por los talibanes, que aseguran que su objetivo era el ministro francés de Defensa, Gérard Longuet, que llegó ayer a Kabul, pero que no se encontraba en el edificio.

Las circunstancias del ataque siguen siendo confusas, ya que el portavoz oficial, Zaher Azimy, no ha especificado si el soldado que ha disparado participaba en el ataque o intentaba detener al terrorista. Tampoco se sabe quién ha abatido al suicida que portaba un cinturón de explosivos que no ha llegado a detonar. El portavoz tampoco ha especificado si en el balance de fallecidos se incluía al terrorista.

Fuentes de seguridad sin identificar han explicado a la agencia France Presse que se ha tratado de un ataque de varios individuos disfrazados de soldados. "Varios asaltantes han entrado en el edificio del Ministerio de Defensa, entre ellos uno que podía ser un kamikaze", ha detallado esta fuente. Según sus cifras, "tres insurgentes han muerto, las fuerzas de seguridad afganas están ahora registrando el edificio".

Aunque se trata, según la BBC, del atentado que más cerca ha estado de llegar a la oficina del ministro afgano de Defensa, el general Abdul Rahim Wardak, éste ha resultado ileso. El ministro francés debía reunirse con él a lo largo del día, además de con otras personalidades.

Los talibanes, en cualquier caso, han reivindicado el ataque y han dicho que el ministro francés de Defensa, Gérard Longuet, que aterrizó ayer por la mañana en Kabul, era el objetivo. Sin embargo, desde París, el Gobierno francés lo desmiente: "No hay nada que permita decir" que Longuet fuese el objetivo.