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Dime quien te odia

El ejemplo es de ayer y voy a dar éste sólo, porque creo que basta. ‘Episodios de cristofobia’ se titula el artículo que publica Juan Manuel de Prada en el diario madrileño Abc, en el que denuncia la nueva “vorágine cristofóbica”, de la que es un ejemplo la Ley de la Memoria Histórica, utilizada por los “cristófobos de hogaño”. De atender al desgarrado lenguaje utilizado, se diría que en las calles y plazas españolas se destruyen las imágenes de Cristo y las cruces y que los cristianos son perseguidos y obligados a practicar en la clandestinidad de las catacumbas. Para extender el ejemplo basta con apelar a las derivaciones de las fobias ideológicas en nuestra actualidad: islamofobia, judeofobia, catalanofobia, hispanofobia, eurofobia, americanofobia, rusofobia, sinofobia…

No estamos ya ante la clásica elección del enemigo, sino que queremos elegir el tipo de odio del que queremos ser objeto. Se trata de la construcción del adversario, y según unos parámetros de absoluta polarización. No nos basta un enemigo que nos impugne parcialmente. Queremos que desee nuestra destrucción total. Sentirnos confortados por la idea de que merecemos un odio absoluto por parte del mal en su grado máximo. Quizás no seamos buenos del todo, pero al someternos al aliento pestilente de un odio total sobre nosotros conseguimos adquirir algo de las víctimas e incluso de los mártires.

Toda ideología que se precie quiere un Hitler sólo para su uso simbólico exclusivo. Hay un genocidio, un exterminio, osaremos decir incluso un holocausto, que se prepara contra mí y los míos. Situarse en su ángulo de tiro se convierte así en una forma de santidad y en un excelente reclamo propagandístico.

Comentarios

Completamente de acuerdo con el artículo Sr. Bassets. En este artículo se ha superado. Puede sin embargo tener muchas lecturas e interpretaciones.
Estimado Lluís, estimad@s tod@s, así de urgencia y bote pronto ... me parece glorioso el post. Volveré con más calma más tarde, porque tiene muchas lecturas y, creo que, una sóla interpretación de autor, aunque se le quieran o traten de encontrar muchos pies al gato. Hermosa reflexión.
¿Si el cristianismo en su totalidad, exceptuando a los pocos Cristos que en el mundo han sido, lleva milenios protagonizando en sus centros educativos, religiosos y demás,la culpabilización victimista para justificar incluso su inquisición, el nazismo y sus colaterales, entre ellos el franquismo, como aberraciones por ello justificables, por qué no se ciñe usted a él y hablamos con fundamento y propiedad de lo que nos está hoy generalizando impropiamente usted, y vergonzantemente metiendo?
Interesante reflexión. Triste sociedad en la que se debe hablar de uno... aunque sea bien (así lo dijo Wilde).http://enclaveinternacional.wordpress.com/
en este caso creo que, además, hay una contradicción. no creo que exista mejor escenario para un cristiano que el de "ser perseguido", o quizá sea suficiente "sentirse perseguido". en un escenario así podría entonces mostrarse lo buen cristiano que se es. si una de las claves del mensaje de cristo es "poner la otra mejilla", o sea, no resistirse, ¿a qué viene esa actitud del cristiano de prada? para los que no creemos resulta sorprendente la renuncia continua de la jerarquía católica y los periodistas al mensaje de cristo. ¿es coherente con el mensaje cristiano manifestarse en las calles, enfrentarse a los gobernantes...? no fue precisamente así como los primeros cristianos sobrevivieron a la persecución romana, con las humillaciones públicas y los leones del coliseo.mira que son malos cristianos, aunque quizá sí sean buenos católicos...
Es que no quedan más que rescoldos de ideologías, Lluís. Esa desorientación, y la homogeneización progresiva del mundo que vivimos, deja a las personas al pairo, sin norte. Volvemos, en parte, a la identificación con el clan, en un mundo que difumina sus fronteras. Por favor, no hagamos verdadera (per saecula saeculorum) la frase de Hobbes: "Homo Homini lupus". ¿Es acaso una realidad que queremos? Es demasiado fácil crearse una identidad externa a través del "enemigo". Pero es que cuesta mucho más construirla uno mismo con sus propios materiales. En el fondo,se trata de la autoestima de los pueblos.
Excelente reflexión Lluís, y yo no la aplicaría sólo a las grandes ideologías, si no también al campo de lo personal: los grandes o pequeños enemigos "que construimos" diariamente en nuestras vidas cotidianas.
Sr. Bassets no es la primera vez que no estoy de acuerdo con Ud., no entiendo mucho su planteo. Pero creo, humildemente, que simplifica el tema. Quiere decir Ud. que en el fondo, no debemos creer en que para que exista el primer mundo, es falso que exista el tercer mundo, con hambre, pobreza, que algunos nos agarramos a eso y a ideales y creencias solamente porque queremos tener un enemigo, alguien a quien odiar. Sencillamente me parece simplista y peligroso. Los ideales y las grandes gentes que han dejado la vida por esos ideales existen, si no a este mundo tendríamos que ponerle la palabra FIN.
estoy totalmente de acuerdo con lo que escribes, me parece un excelente articulo..saludos
Sociobiología pura. El sistema límbico (80% de nuestros actos), funciona para la huida, sumisión o enfrentamiento. Para esto último se comienza con la victimización "me atacan", y a continuación "ahora verás". También aplica para buscar presa: soy una víctima del sistema, por lo que: “economía agresiva”, o “ésta no se ríe de mí”, o “nos oprimen ésos: vamos con la goma2”. ¿Un mundo sin victimización? Me cuesta pensarlo; aparte de que hay muchas víctimas reales, con el creciente descerebramiento de las masas el sistema límbico debe andar ya por el 90%.
Efectivy Wonder, como diría un cheli. Me recuerda una anécdota de hace poco y extraida de una conversación con un kiko (yo me hago llamar kika pero soy atea), un joven amable, trabajador, padre de 4 hijos y cercano a mi trabajo. Despúés de comentar nuestras creencias y descreencias y de decirme (decirnos pues eramos cuatro los contertulios)que se estaban perdiendo los valores y que ello nos abocaba a un fin bastante siniestro, sin hacerme la víctima ni darle la oportunidad a él tan sólo le dije: "Tu y yo somos mas parecidos de lo que tu puedes suponer. A ti te gusta hacer el bien a los demás, a mi también, intentamos ser agradables con la gente que nos rodea, queremos a nuestros hijos, buscamos la felicidad, somos atentos y respetuosos. ¿Qué nos diferencia?, nada, en nada somos distintos y nuestros objetivos son los mismos, porque tenemos que ser tu o yo víctima del otro." Seguimos hablando de historia y filosofía que es una pasión común, la mía quizás mas elaborada por ser mayor que él y tener una formación mas decantada, pero en el fondo somos mas iguales que diferentes ¿Porqué se empeñan algunos en resaltar esas diferencias creadas en vez de reseñar lo que nos une. Una humanidad y mundo común?. Bien por tu artículo. Felicidades y que sean muchos mas.
excepto .... Es la condición de víctima de una ideología adversa y destructiva, rayana en el crimen y el genocidio ... tipo McCain que no odia pero dice lo que le hicieron... tipo Palin que odia y es soloproque quiere que sean como piensa ella... ok! excepto cuando se trbaaj por los Derechos humanos... que no te importa la ideología ni los odios de tantos en tans ideologías que dicen .. no no vengas a visitarme... en ese aspecto no se puede aplicar la fraswe.. ya que nos da igual si es Somalia, China, Cuba o Usa y Guantánamo y nos odian todos por igual, Francia, España, Dubai Afaganistán o Dinamarca... podemos visitar las cárceles? y todos se preparan ok! no apoyamos a Irak ni la forma en que se apresó a Sadma... usa nos odian, no apoyamos a Cuba proque no tiene derechos humanos, ni a China ni a México usa! como nos odian... no nos importa No apoyamos que Carla Bruni visitara y dedicara flroes a los budas mientras Sarko el presidente se reunía con Bush, no apoyamos a China que no quiere que Obama visite a Dalai Lama y ... usa como nos odian y claro no apoyamos a dinamarca que encarcela por nada a Greenpeace uasa como nos odian,,,, no nos importa seguimos trabajando para los Derechos humanos y sin ideología. ok! No nos gusta que desprecien a Alá ni a Cristo, ni nos gusta que maten, no nos gusta que en nombre de la democracia invadan Iraq y Azanr se vaya a un rancho a a descansar y decir sí... no nos gusta que Israel tenga un Mosad que no explica que hace cuando caen en Gaza, ni que Hamas tire cohetes ni ... ni ... nos odian ok! Nosotros seguiremos trabajando para y con todas las ideologías para que existean dentro de los Derechos Humanos ok! dime quien te odia... pues.. practicamente todos a los que decimos esto va en contra de los Derchos humanos te llames España, Cuba, China Mexico o USA o ... m m
Ya son numerosos los merecidos elogios, razón por la que no insistiré en aumentarlos. Efectivamente ha puesto usted "un dedo en la llaga", y ha dado en el clavo. Es un hecho inegable, el que los poderes necesitan un "enemigo" (pues es indispensable que alguien cargue con las culpas y la responsabilidad, además hay que desviar la atención con un señuelo, real o imaginario). Para ello hay que construir una imagen lo más desagradable posible, para así deshumanizarlo, con lo que entrar a "combatirlo" sería más cómodo y efectivo (amén de honroso); esta clásica técnica se ajusta al concepto blanco y negro, en la que naturalmente el enemigo es negro, el malo, al que hay que odiar, denigrarar y humillar; de nada sirve hacer notar que cuando se apunta con un dedo, hay otros 3 apuntándo hacia uno mismo. Todo éste absurdo escenario, e inmensa y trágica comedia, jamás podría efectuarse si no se contara con el masivo apoyo de una bien engrasada máquinaria: Los medios de comunicación, a los que se controla, empleándolos como catalizadores. Lo vergonzoso no es sólo mentir descaradamente, sino insistir en la propia inocencia, tirándo la piedra y escondiendo la mano, y peór aún, auto infligirse un ataque, con el que se tendrá una excusa dorada para efectuar sus macabros planes bajo el absurdo: Autodefensa.
Se me quedó en el tintero la última frase: A sabiendas de su superior poderío.. Disculpádme. Un saludo
Lo cierto es que sí habrá una gran persecución de cristianos. El libro del Apocalipsis la denomina como la Gran Tribulación. Serán siete años de prueba para aquellos cristianos que no tuvieron la fe suficiente como para ser incluidos entre el número de escogidos en el día del arrebatamiento de la Iglesia. Este acontecimiento histórico será precedido por acciones perversas que no sólo serán consideradas insignificantes sino también serán celebradas como “expresión creativa” del espíritu humano (el Cristo gay de Fernando Bayona, por ejemplo); sin embargo, cada una de estas “pequeñas” blasfemias convergerán y desembocaran en el día de la Gran Tribulación. La dicotomía entre el bien y el mal existe. No es la invención de mentes estrechas o conspirativas.
En mi experiencia he notado que los especialistas en victimología, y en manipulación de de emociones públicas son los socialistas. Nada se compara al uso de la victimología para justificar "derechos" inexistentes, prestaciones abusivas, y absorción al colectivismo estatal. La dependencia de las "minorías", los resentimientos por "odios" y "vejaciones" inexistentes, "racismos" percibidos y manipulados, y muchas otras manifestaciones provocadas por los socialistas manipuladores han hecho presa de las sociedades.Si digo: "Argentina es un caso perdido" ahora se percibe como "racismo". Si digo: "Las cárceles están llenas de ilegales" es racismo. Si digo: "La mayoría de los productos chinos son fabricados con mano de obra cuasi esclava" es racismo. Si digo que no estoy de acuerdo con las "socialistadas" estúpidas de Obama, soy racista.En fin, pura maniobra loca de los socioides...
Estimado Lluís, estimad@s tod@s, retomo la inicial entrada y, ahora, habiendo leído el "ejemplo" ya citado de los "Episodios de cristofobia". Me parece difícil, si no imposible, adentrarnos mucho en esa representación del sistema que hace toda ideología y, se dice en el post, puede ser articulada, con creciente frecuencia, mediante la construcción de un enemigo total y exterminador. No, para nada se construye así la representación del sistema en una ideología; pero sí puede ser cierto que esta construcción de un enemigo total y exterminador ocurre: aunque deberá reconocerse, también, como una derivación, y consecuencia, de otras motivadas razones que podemos decir subyacentes al interés, muy humano, de la manipulación. No está de más reconocer que, esta estratagema del espejismo interesado, siempre (en la historia humana) se utiliza con una máxima frecuencia, si es que no se usa en toda ocasión y en lo que conviene a la mentira, a la media verdad, o a la visión parcializada convertida en verdad incuestionable (quizá aquí, por la Gracia Divina). A veces, hasta se usa la tal artimaña elaborada con un pleno auto-convencimiento de que se está expresando alguna verdad incuestionable. Pero, en general, no es fácil toparse con tales valiosas verdades absolutas que desencadenen el hermético "cerrar filas" buscado en interés legítimo (o no). Ante la falta de verdades apropiadas, simple y llanamente, se inventan, se exageran, se machacan, con sistemática, todas las posibilidades para la, vulgarmente vista, “comedura de coco” con mucha intención. Vamos por partes. No es que sin amenaza, sin proyecto demoledor, sin una sombra que gravite sobre nuestras débiles ideas, y nuestras inconsistentes convicciones, sea imposible articular argumentos políticamente bien organizados en nuestra cabeza, y en el discurso de nuestra intención. Claro que es posible ... ¿quién dijo tal cosa? ... no sería Lluís, en lo que intuyo. Otra cosa, muy distinta, es que cuando se persigue el articular, a conveniencia, los mecanismos de la "moral de combate", en el grupo de pertenencia, se recurra a esta estratagema y se apliquen, tanto como sea preciso, las normas de la disciplinaria imposición. También la retórica del encender fuego de valentía en las huestes propias, y/o sembrar el terror entre aquellas que se desee amedrentar. Es ejercicio animal sin duda, por lo tanto, muy humano, también. No pocas veces, incluso, la táctica es consistente con el crear la división entre las huestes del contrario y, en lo posible, lograr alguna rapiña proselitista (captando nuevos miembros) para engrosar las propias filas. Es el juego viejo, y eterno, de la pre-confrontación, la confrontación, y la conflagración. Nada nuevo bajo el sol y, desde luego, nada excepcional. Pues, todo ésto, forma parte del mentado combustionar interno en que las personas (y sus proclamas) tratan de cocinar la voluntad y las pasiones de sus abyectos (declarados y/o potenciales). De ninguna manera puede aceptarse, ni siquiera darse a entender por error, que las ideologías se desvanecen hasta su práctica degradación (en ese combustionar interior mencionado): no son las ideologías las que se degradan, sino las personas. Quizá pueda ser otro tema de debate, también de interés. No es sorprendente que don Juan Manuel de Prada se muestre, en la transmisión de su visión arrebatada, como un bebedor apurado de elixires del éxtasis catártico. Así, expone, estéticamente, su posición interesada en relación al Cristo de Monteagudo, o el destino -dizque- anunciado para el Valle de los Caídos. Ya veremos en qué quedan ambos asuntos y cómo prosperan, o se estancan, las propuestas y pretensiones enfrentadas (en el supuesto). No es exacto señalar que este señor ponga a la Ley de Memoria Histórica como ejemplo de la vorágine cristofóbica, sino que la misma, según dice claramente, cobijaría a los cristófogos hogaños en su deseo de meter mano a la muy manoseada símbología franquista impuesta en el Valle de los Caídos. Hay un matíz clarísimo; aunque, también podemos decir que ... aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, pues ... éso, lo que entendemos en el decir del dicho popular. ¿Cuál puede ser la sorpresa y extrañeza, entonces?. Si hago caso (que lo hago) a los testimonios cercanos, de muchos héroes de la resistencia antifranquista que lucharon en la Guerra, me veo imaginando a mis soldados y milicianos republicanos haciendo guardia nocturna en las Iglesias y el convento de mi pueblo ... para que los fascistas no quemaran, arrasaran las edificaciones, y violaran a las monjas. Era práctica muy frecuente, realizada con la clara intención de echar la culpa a los legítimos defensores de la España Constitucional, tratando de mostrarlos como "Hordas Comunistas y Ateas". ¿Recuerdan cómo repicaron los franquistas, hasta la saciedad, que habían sido las tropas “rojas y vascas” las que habían destruido Gernika?. Pues éso. Con todo, no me da la gana cerrar mi entendimiento y expresar mi rechazo a barbaridades cometidas, también, por los “rojos”, en otras ocasiones de la guerra y el desmadre levantado en Cruzada de muerte. Podría haber callado este párrafo, pero no ... ésto me diferencia, y lo expreso, del Sr. de Prada. Veamos pues, al asesino y verdugo de inocentes ... gritando, entre las víctimas, que la víctima es él. Es el clásico truco del almendruco, tan viejo, tan viejo, como la mentira misma: un engaña-bobos socorrido al que recurre la mucha escoria humana sin sustancia. El puro y llano “Maligno” desatado. El lobo entre corderos. El ángel exterminador y cobarde ... entre los indefensos. No proseguiré mucho más, pero sí me interesa señalar que la expresión (comunicación) de la representación del sistema que hace la ideología, no es una representación, sino una representación de la representación del sistema que hace la ideología; es decir, es propiamente una meta-representación del sistema. Tod@s tenemos una ideología (representación del sistema); así, cuando tratamos de expresarla (o abarcarla, incluso, en vivencia interior), siempre conseguimos una incompleta apropiación de la misma (representación de la representación del sistema). En la transmisión colectiva de estas meta-representaciones, nuevamente, incurrimos (inevitablemente) en una incompleta formulación. Dicho de otro modo: es muy corriente, y humano, confundir la tal meta-representación con el ser (verdadero) de la persona que tiene ideología (tod@s). Cuando ésto ocurre, es muy fácil clasificar al contrario en el lugar equivocado; es decir, no en el lugar de su verdadero ser (e ideología), sino del entendimiento incompleto (y parcial e interesado, injusto) que podamos hacer de la meta-representación de su verdadera ideología (y ser). A partir de la comprensión de la realidad efectiva, de estos descontroles inevitables (por incapacidad humana real), quizá entendamos mejor porqué se llama a rebato a las huestes propias (y ajenas) contra demonios “inexistentes”, porqué se manipula y se ejerce la disciplinaria imposición a las huestes propias (bajo amenaza de lo peor), porqué se demoniza -en lo absoluto irracional- al contrario, porqué se miente con malicioso interés y egoismo brutal, porqué se insiste en la falsaria hipocresía de los sepulcros blanqueados ... porqué se desatan los demonios en el mundo y se proclama la condenación (exterminio) del contrario, o el disidente, o el humilde, o tanta y tanta gente buena, o tanta gente sin más. Todo lo expresado, de una manera u otra, se conforma -finalmente- en la otra parte importante de una ideología: EL PROGRAMA DE ACCIÓN. Saludos cordiales (con excusa por lo extenso y limitadas capacidades),
Lo que comenta Lluis, tiene asidero en los tratados de René Girard, “mimesis”... ej: una vez que el soviet se fue, quién quedó con el muerto...?

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