Un bombero voluntario, primera víctima de los incendios en California
Miles de personas han sido evacuadas mientras las llamas amenazan con quemar 8.000 viviendas
El fuego continúa avanzando sin control en California y ha cobrado su primera víctima, un bombero voluntario de 63 años que ha muerto en el norte del estado. El gobernador, Arnold Schwarzenneger, ha movilizado a la Guardia Nacional para combatir los más de mil focos de incendio que amenazan con destruir 8.000 viviendas.
En Goleta, una ciudad cerca de Santa Bárbara, las llamas se han acercado inesperadamente a más de 2.500 casas y por poco dejan sin luz a 100.000 personas. "Es un momento crítico", ha dicho Karen McKinley, portavoz de los bomberos de California. "Todo el cielo en Goleta está negro y estamos evacuando varias poblaciones más".
Otro lugar que corre peligro es el paraje natural Big Sur, situado 240 kilómetros al sur de San Francisco, donde 1.800 viviendas han sido abandonadas por sus dueños, que las rociaron con gel protector antes de partir. Por las llamas, que han obligado también a cerrar 40 kilómetros de la autovía del Pacífico, la Cámara de Comercio de Big Sur ha emitido un comunicado avisando a los potenciales turistas que no visiten la zona.
Desde el pasado 20 de junio, cerca de 180.000 hectáreas han sido calcinadas, especialmente en las zonas norte y centro de California, según datos del departamento forestal. El calor, la sequedad del terreno, el viento y las tormentas fueron los detonantes de la ola de fuegos que ha superado la capacidad de respuesta de las autoridades, que han pedido el amparo del Gobierno federal.
En total se han empleado más de 19.000 personas en las tareas de extinción, y está previsto que, a partir de la próxima semana, se sumen 200 integrantes de la Guardia Nacional, una intervención que no tiene lugar desde 1977. Los expertos calculan que los incendios azotarán California hasta octubre.
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