_
_
_
_

Los vencedores en Pakistán comienzan los movimientos para formar Gobierno

El PPP, la Liga-N y el Partido Awami están muy cerca de lograr los dos tercios del Parlamento y pretenden marginar al partido de Musharraf

Las fuerzas políticas en Pakistán comienzan sus movimientos tras las elecciones del lunes, que dejaron al presidente, Pervez Musharraf en una situación más que incómoda: su partido sufrió una humillación histórica en el Parlamento, superado por el Partido Popular de la ex primera ministra asesinada Benazir Bhutto y por la Liga Musulmana-N de Nawaz Sharif. Ahora, estos dos partidos buscan un Gobierno de coalición, mientras sus seguidores piden la renuncia de Musharraf. El presidente ha anunciado hoy que no abandonará su puesto y se ha mostrado dispuesto a trabajar con el Gobierno que salga de las elecciones.

El PPP ha comenzado los contactos con la Liga-N de Sharif para lograr un Gobierno que sume los dos tercios de los escaños necesarios para proceder a un cambio constitucional que permita saca a Musharraf de la presidencia. De hecho, la Liga-N de Sharif se ha propuesto como principal objetivo acabar con Musharraf, el hombre que desalojó a Sharif del poder con un golpe de Estado en 1999. Para ello, la Liga-N y el PPP deberán contar con otro aliado, el Partido Nacional Awami, un que ha contribuido a sacar a los partidos islamistas del poder en la Provincia Fronteriza del Noroeste, junto a Afganistán.

"La línea divisoria [para entrar en la coalición] es si uno está con la dictadura [de Musharraf] o si uno está con las fuerzas que luchan por la democracia", ha comentado Taj Haider, un alto cargo del PPP en la cadena de televisión Dawn.

Según los resultados conocidos hasta ahora, no definitivos, el PPP, la Liga-N y el Partido Awami están muy cerca de conseguir los dos tercios de los asientos de la Asamblea Nacional. Otros partidos podrían sumarse a esta mayoría para conseguir la fuerza necesaria para reformar la constitución o para reponer en sus puestos a los miembros del Tribunal Constitucional que Musharraf purgó para asegurarse el tercer mandato que ahora ostenta.

Los líderes del PPP y de la Liga-N pidieron ayer la retirada de Musharraf, pero éste ha descartado que vaya a marcharse. Sabe que cuenta con el respaldo de EE UU -Musharraf ha sido un aliado clave de Washington en su guerra contra el terrorismo-, que ayer mismo celebró las elecciones como "un paso más hacias la completa restauración de la democracia" y que instó a los partidos vencedores a no marginar a la Liga Musulmana-Q de Musharraf de las negociaciones de Gobierno.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_