Una noche en la Antártida

La base Gabriel de Castilla tiene capacidad para albergar hasta 18 personas, y en ella desarrollan sus trabajos tanto militares como científicos civiles. A lo largo de los cuatro meses de presencia española en la Antártida, pasarán por la base 28 científicos de diversos países, que llevarán a cabo sus proyectos de investigación hasta mediados de marzo de 2008.

Exploración

El viaje, como si de una historia de Julio Verne se tratase, empezó cuando científicos y militares embarcaron a finales de noviembre en el Buque de Investigación Oceanográfica Las Palmas, de la Armada Española, con el objetivo de poner rumbo sur y cruzar las agitadas aguas del estrecho del Drake hasta alcanzar Ushaia (Argentina).

La primera parada de la dotación llegó el 29 de noviembre en la Bahía Foster de Isla Decepción (Shetland del Sur), donde se hizo un reconocimiento de la isla, y se puso de nuevo en marcha. En la madrugada del 29 al 30 desembarcaron dos militares a unos 600 metros de la base antártica, que presentaba un espesor medio de nieve de dos metros, con máximos de dos metros y medio.

Una vez comprobado el acceso, otros cuatro miembros de la dotación junto a tres investigadores, trasladaron e instalaron la estación de banda ancha en un espolón libre de nieve situado entre la costa y el modulo científico. Su finalidad es registrar datos de actividad sísmica de Isla Decepción. Durante ese periodo se ha procedido a la apertura del modulo de vida, modulo de emergencia, modulo de obras y los dos grupos electrógenos. Recogidos los datos, se procedió a cerrar los módulos abiertos y a reembarcar el buque.

El 30 por la mañana los nueve miembros militares de la base y seis científicos volvieron a pisar tierra firme con unas condiciones meteorológicas adversas: vientos de hasta 55 nudos y sensación térmica de 20 grados bajo cero. Después de comprobar los datos de la estación sísmica, continuaron los trabajos de apertura de la base. La dotación constató que el espesor de nieve acumulada era mayor del esperado, dificultando las labores de trabajo. La causa: el fuerte frío austral del mes de octubre.

La base Gabriel de Castilla tiene capacidad para albergar hasta 18 personas, y en ella desarrollan sus trabajos tanto militares como científicos civiles. A lo largo de los cuatro meses de presencia española en la Antártida, pasarán por la base 28 científicos de diversos países.

Campaña antártica

El Ejército de Tierra participa en las campañas antárticas desde 1988, año en que se realizo la primera expedición conjunta con la finalidad de buscar un emplazamiento para la primera base española en la Antártida. El Ejército presta su apoyo al Subprograma Nacional de Investigación Polar del Ministerio de Eduación y Ciencia, que este año coordina ocho proyectos científicos liderados por investigadores de las universidades de Granada, Cádiz, Alcalá de Henares y Extremadura, y de la Estación Experimental de Zonas Áridas ubicada en Almería.

Además de proporcionar apoyo logístico para hacer posible el desarrollo de los proyectos civiles de investigación, el personal militar realiza sus propios estudios en las áreas de telecomunicaciones, medio ambiente, sanidad, vestuario, y otras disciplinas.