El vicepresidente de Paraguay dimite para optar a la candidatura del Partido Colorado

El vicepresidente de Paraguay, Luis Castiglioni, presentó ayer su renuncia ante el Congreso para disputar la candidatura presidencial del gubernamental Partido Colorado, al frente de un movimiento creado tras su ruptura con el jefe de Estado, Nicanor Duarte. Castiglioni, un ingeniero civil de 44 años, vinculado a empresas de la construcción, es el mejor situado en todos los sondeos de intención de voto para los comicios internos del partido en el poder desde hace 60 años en Paraguay, que se realizarán el próximo 16 de diciembre. La Constitución de 1992 establece que el vicepresidente debe renunciar seis meses antes de los comicios generales, convocados para el 20 de abril de 2008, para poder competir en esas votaciones.

El candidato colorado se enfrentará en esos comicios a una oposición actualmente dividida en su respaldo a tres precandidatos: el ex obispo católico Fernando Lugo, el recientemente excarcelado ex general golpista Lino Oviedo y el empresario Pedro Fadul.

El presidente del Congreso, el senador opositor Miguel Abdón Saguier, explicó que la renuncia de Castiglioni deberá ser aceptada por el pleno de las dos Cámaras del Parlamento, que se reunirá probablemente la próxima semana. El dimisionario vicepresidente ocupará interinamente la presidencia durante nueve días a partir de hoy, cuando Duarte viajará a Taiwan en visita oficial.

Saguier precisó que el Congreso, además de decidir sobre la renuncia de Castiglioni, podría elegir en la misma sesión a un sucesor hasta el final del mandato, el 15 de agosto de 2008, cuando tomará posesión el presidente elegido en abril de ese año.

"Ocurre que no existe un reglamento del Congreso [para estos casos]. Lo que tenemos son precedentes de casos análogos", refirió Saguier, tercero en la línea de sucesión presidencial, al asegurar que se buscará "apostar a la estabilidad para que se llegue de una manera ordenada a las elecciones de abril de 2008".

Castiglioni es un duro crítico de la gestión de Duarte desde abril pasado, cuando supo que el jefe del Estado ya había decidido apoyar la postulación presidencial colorada de la entonces ministra de Educación, Blanca Ovelar.

El gobernante presenta a Ovelar como "una mujer venida del campo, una maestra en su juventud". Su apoyo total le valió también la enemistad del actual presidente interino del Partido Colorado, José Alberto Alderete, quien rechazó el ofrecimiento de completar la fórmula oficialista como candidato a la vicepresidencia y ha lanzado su propia candidatura.

Alderete, ex ministro de Obras Públicas, tiene el respaldo de sectores nostálgicos de la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-89), pero en las encuestas aparece en el tercer lugar, detrás de Ovelar, para los comicios internos colorados.