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Me niego

Me entero gracias al blog de un viejo amigo, a quien no veo desde hace años, de una muy amarga noticia. Bronislaw Geremek, historiador, ex ministro de Exteriores de Polonia y ahora eurodiputado, se ha negado a someterse a la Ley de Lustración, promulgada por los hermanos Kacinsky, que obliga a los políticos, profesionales, universitarios y periodistas a realizar una declaración sobre su pasado y a someterse a una investigación por parte del Gobierno respecto a sus relaciones con el desaparecido régimen comunista. Como consecuencia de su negativa, deberá abandonar su escaño en el Parlamento Europeo. Geremek es uno de los fundadores de Solidarnosc. Ha sido protagonista de las negociaciones de ingreso de Polonia en la Unión Europea. Es un hombre profundamente europeísta y demócrata, al que nadie debe pedirle explicación alguna por su brillante trayectoria como historiador y su limpia vida política entregada a la causa de la libertad y de la democracia. Su gesto es ejemplar. Esperemos que sean muchos los que le sigan y se nieguen a someterse.

Lo cuenta Jean Quatremer, corresponsal de Libération en Bruselas, que mantiene un espléndido blog, Coulisses de Bruxelles, probablemente el mejor sobre la vida política de las instituciones europeas y en todo caso el de orientación más comprometidamente europeísta. Hay dos entradas sobre este desgraciado caso polaco, y en la última incluye la carta de Geremek en la que anuncia su decisión y que empieza con esta frase “Je refuse”, es decir, “me niego”. Y añade, entre otras cosas: “La ley de lustración viola las reglas morales, amenaza la libertad de expresión, la independencia de los medios y la autonomía de las universidades. Engendra una especie de Ministerio de la Verdad y una Policía de la Memoria y desarma al ciudadano ante las campañas de calumnias, al debilitar la protección de sus derechos”.

Para la buena integración europea, tan importante es entrar en Europa como que Europa entre en el país candidato. La pasada semana, en la presentación de dos libros académicos sobre Ernest Lluch (‘Bibliografia Ernest Lluch’ y 'Miscel•lània acadèmica Ernest Lluch'), celebrada en la librería Blanquerna de Madrid, uno de sus maestros, el catedrático de Historia Económica Jordi Nadal, aseguró que Europa había ya entrado en España mucho antes de que España entrara en Europa, dos décadas antes en realidad. Por tres caminos: el turismo, las remesas de los ahorros de los emigrantes españoles y las inversiones de empresas europeas. Turquía, a pesar de las dificultades, está siguiendo un camino análogo: Europa entra en ella a la vez que ella entra en Europa. Pero Polonia parece recorrer el camino inverso: Polonia expulsa las ideas europeas, reprime a sus europeístas, y legisla contra Europa justo después de haberse incorporado a Europa.

Hoy publico también, en EL PAÍS de papel, una columna titulada ¿Qué hacemos en Afganistán?. Y esto es todo por hoy. Muchas gracias por leerme.

Comentarios

"Exige realizar" u "obliga a realizar", pero no "exige a realizar", querido Lluís. Un saludo, gracias y disculpa.
Es sabido que los hermanos Kacinsky están llevando a cabo, medidas anti-europeas y contra los derechos humanos( la homosexualidad..etc), por eso, mi pregunta es, cuáles son los puntos básicos en los tratados europeos para formar parte de la U.E? No hay ninguna cláusula donde se haga referencia a los derechos humanos, se puede formar parte de la U.E. sin antes acordar unos valores básicos de convivencia? Perdonen mi ignorancia, pero pienso que la U.E es una abstracción.
Bayrou termino su intervencion ante los peridistas ayer con una alusion a la situacion de Geremek y de Polonia. Buen golpe. La frase no deberia ser "me niego" sino "j'accuse".
¿Se puede iniciar un proceso de sanción a un gobierno nacional por vulnerar los princpios de la Unión? Supongo que sí, pero ignoro como. ¿No podría hacerlo de oficio el Defensor del Pueblo europeo? ¿O el Parlamento¿
recientemente, discutiendo con un amigo polaco la cuestion de la percepcion de las brigadas internacionales en Espana Y Polonia, llegamos a la conclusion de que el fondo del problema era el cruce de las memorias colectivas en ambos paises. Lo que en Espanha es considerado un acto de heroismo y lucha contra el fascismo, en Polonia es visto, a dia de hoy, como un acto de sometimiento y vasallaje a la Union Sovietica de entonces. En el caso Geremek, algunas similitudes podran verse hoy en dia en una parte de la prensa polaca, donde se ha comenzado una campana de intoxicacion demagogica en su contra. El viejo profesor de Historia de Europa ha realizado un acto etico, con el cual esta defendiendo algo mas profundo que la democracia en su pais. Enfrentandose a la intolerancia con el pasado y los mecanismos de supresion de las conciencias, esta defendiendo la memoria como mecanismo y condicion de posibilidad del conocimiento y una concepcion etica de la libertad que nos concierne a todos.
Los extremos se juntan... Polonia desde el inicio de la II Guerra Mundial fue un pais disputado, clavado entre el nazismo, con su barbara ocupación y el comunismo aplastante durante 40 años, este pais sigue sin tener su propio camino. Con la caida del muro de Berlin, nuevos vientos de democracia mezclados con el neoliberalismo feroz dieron a a la sociedad poloca un nuevo respiro, pero de nuevo la intolerancia, la caza de brujas, vuelve a atormentar de nuevo a una sociedad que no le da tiempo a salir de una pesadilla para meterse en otra. Muestra clara que no son los polacos capaces de marcar su senda, son las potencias europeas, Rusia y hasta el Vaticano que de una forma o de otra siguen con la "ocupación"

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