Corea del Norte promete una amnistía por el 60 aniversario de su fundación

Corea del Norte, que suele encabezar la lista negra de las organizaciones de derechos humanos, concederá una "gran amnistía" para conmemorar el 60 aniversario del fin de la ocupación japonesa y de la fundación del Estado estalinista, según han informado hoy los medios surcoreanos.

La agencia de noticias norcoreana KCNA, citada por la prensa surcoreana, anuncia que la amnistía tendrá lugar el próximo 1 de septiembre, aunque sin especificar a cuántos y a qué tipo de prisioneros serán liberados. Según el ministerio de Unificación surcoreano, será la primera vez desde abril de 2003 que el Gobierno de Pyongyang toma una medida de este tipo.

'Gulags' norcoreanos

La amnistía en el Estado norcoreano reviste especial interés teniendo en cuenta la existencia de numerosos campos de concentración en el que son encerrados y torturados todos aquellos que se oponen al régimen o que son acusados de estar "contaminados" o atraídos por la ideología capitalista. Numerosas Organizaciones No Gubernamentales (ONG) e instituciones políticas han denunciado en reiteradas ocasiones estos gulags de estilo soviético, a los que son confinados familias enteras, incluidos los niños, para una "reeducación" de la que muchos no salen con vida.

Algunos de estos prisioneros logran esporádicamente huir a Corea del Sur, país que concede automáticamente el refugio político a sus "hermanos" del Norte, y narran sus experiencias en los campos de concentración. Según los testimonios, los confinados en los gulags se enfrentan a condiciones inhumanas, en las que las enfermedades, la inanición, los trabajos forzosos, las torturas y las ejecuciones reducen drásticamente las posibilidades de sobrevivir.

Se desconoce, sin embargo, si la amnistía afectará a este tipo de prisioneros "extraoficiales".

Por su parte, el presidente surcoreano Roh Moo Hyun, con motivo de la celebración de la liberación de la ocupación japonesa el 15 de agosto de 1945, también ha anunciado una amnistía a 4,2 millones de personas, que en un 99 por ciento son infractores de las leyes de circulación.