Washington afirma que Irak tuvo su "última oportunidad" con su informe de armamento

EE UU ha reiterado hoy que el informe presentado por Irak a la ONU, en el que niega poseer arsenales nucleares, biológicos o químicos, fue la última oportunidad de Bagdad para demostrar que no cuenta con armas de destrucción masiva y que ya no hay lugar para correcciones. Mientras, continúa la frenética actividad de los inspectores, capaces de visitar ya hasta 13 lugares cada día.

"Está muy claro que ésta era la última oportunidad que tenía Irak de informar al mundo de forma plena, exacta y completa sobre las armas de destrucción masiva que posee", ha indicado el portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer. Esta advertencia se produce poco después de que el secretario de Estado, Colin Powell, afirmara que el Gobierno de EE UU tenía algunas dudas sobre el informe iraquí, de unas 12.000 páginas, sin agregar más detalles.

"Nos reservaremos una declaración final hasta que hayamos completado nuestro análisis con los inspectores de armas de la ONU y de la IAEA [Organización Internacional de Energía Atómica]", ha añadido Powell, para apuntar que la declaración se producirá el fin de la semana, después de que el jefe de los inspectores de la ONU, Hans Blix, haga una presentación ante el Consejo de Seguridad sobre sus actividades, el próximo jueves.

Bombardeos en el sur de Irak

EE UU y Gran Bretaña han afirmado en reiteradas ocasiones que lanzarán una operación contra Irak si se demuestra que el rémigen de Sadam Husein ha violado la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para asegurar que no cuenta con ese tipo de armas. La resolución, aprobada el mes pasado, advierte a Irak de que puede sufrir "serias consecuencias" si no cumple con las demandas de desarme. Sin embargo, ni Powell ni Fleischer han aclarado si, en caso de que se produzca una "violación flagrante", el inicio de la guerra será automático. "Si Irak no cumple estoy seguro de que la comunidad internacional tomará nota y decidirá cuál es la acción apropiada. Pero en este momento no quisiera anunciar nada ", ha señalado Powell.

Mientras tanto, los aliados han vuelto a bombardear, por tercer día consecutivo, el sur de Irak. En un comunicado, el comando central estadounidense (Centcom) ha confirmado que, junto a las bombas, se han lanzado medio millón de octavillas en seis lugares cercanos a centros de comunicación destruidos. "Las octavillas advierten a las fuerzas iraquíes de la destrucción de cables de fibra óptica y que su reparación pondría en peligro la vida de militares iraquíes". Los mensajes acusan a Sadam de utilizar los cables para reprimir al pueblo iraquí. Además, los expertos en armas biológicas de la ONU han vuelto a inspeccionar hoy los laboratorios de la Universidad de Bagdad, donde estuvieron ayer en busca de armas prohibidas.