Bush pierde el conocimiento unos segundos tras atragantarse con una galleta

El presidente de EE UU, George W. Bush, se ha desvanecido esta madrugada durante unos segundos al atragantarse con una galleta salada mientras veía un partido de fútbol americano en su residencia de la Casa Blanca, según han informado fuentes de su servicio médico. Bush se cayó y sufrió un rasguño en la mejilla, pero se recobró instantes después y se encuentra bien, por lo que no se han previsto cambios en su agenda.

"El presidente se desmayó debido a una caída temporal del ritmo cardíaco ocasionada al atragantarse con una galleta salada", ha informado el coronel Richard Tubb, médico de la Casa Blanca. Según el doctor, al desmayarse, Bush se golpeó en la mejilla izquierda, ocasionándose un pequeño hematoma, así como una herida en el labio. No obstante, Tubb ha señalado que el presidente de EE UU se ha recuperado, por lo que no cree que el desmayo "vuelva a pasar".

El presidente de EEUU se encontraba recostado en un sofá viendo un partido de fútbol americano entre los equipos de Baltimore y Miami, cuando, al parecer, cayó al suelo tras desmayarse. Su esposa, Laura Bush, se encontraba en ese momento en una habitación contigua hablando por teléfono. Unos minutos después de producirse el desvanecimiento de Bush, -a última hora de la noche en España- y una vez que recobró el conocimiento, se avisó a la enfermera de guardia de la Casa Blanca, quien, a su vez, localizó al coronel Tubb para que examinara al presidente.

El doctor Tubb indicó que el desvanecimiento del presidente duró apenas unos segundos, pues el mismo Bush le explicó que cuando se recobró, sus perros estaban en la misma posición que cuando se atragantó con la galleta. Asimismo, explicó que Bush se trasladó, sin necesidad de ayuda, desde el segundo piso al primero de la mansión residencial para ser examinado por el facultativo, quien informó de que la presión sanguínea y el pulso del presidente eran normales.

Tubb explicó que como el presidente de EEUU tiene un bajo nivel de pulsaciones, lo que se atribuye a que regularmente hace ejercicio físico, es más propenso a sufrir desvanecimientos. Además, según parece, en los últimos días Bush había expresado a la primera dama que no se encontraba totalmente en forma y que creía que se estaba resfriando.