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GUERRA CONTRA EL TERRORISMO

EE UU advierte a la ONU de que su ofensiva antiterrorista puede extenderse a otros países

Bush: "La misión se llevó a cabo según lo planificado".- Kabul denuncia 8 muertos civiles.- El Reino Unido informa de que 30 objetivos, todos ellos militares, han sido alcanzados

Un día después de la primera oleada de bombardeos sobre Afganistán, Estados Unidos ha advertido al Consejo de Seguridad de la ONU de que puede emprender "otras acciones" contra otras organizaciones o estados en el marco de la operación contra el terrorismo iniciada el domingo, que fue calificada como un éxito.

"Podemos encontrar que nuestra autodefensa requiere más acciones respecto a otras organizaciones o estados", aseguró la diplomacia estadounidense en una carta remitida al Consejo de Seguridad.

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Esta notificación se produce en el contexto de la evaluación de objetivos y daños de ambas partes. Desde el régimen talibán se afirma que sus baterías derribaron entre uno y cuatro aviones aliados y se habla de 8 muertos (cifra rebajada de los 20 reconocidos en un principio), en su mayoría civiles.

Desde EE UU y el Reino Unido, sin embargo, se asegura que 30 objetivos, todos ellos militares, fueron alcanzados con éxito y que no se había perdido ningún aparato en la operación.

El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, anunció que la misión de bombardeo de objetivos militares en Afganistán del domingo "se llevó a cabo según lo planificado". Según sus palabras, "la mejor defensa contra el terrorismo es una ofensiva global".

Según fuentes del Pentágono, EE UU y Gran Bretaña están dispuestos a continuar los bombardeos durante varios días más antes de pasar a otra fase en la operación contra la infraestructura terrorista de Osama bin Laden.

Rumsfeld: "Ha sido un éxito"

El secretario de Defensa de EE UU,Donald Rumsfeld, señaló que los ataques "han sido un éxito" y que es evidente que Osama bin Laden sigue en Afganistán, aunque los bombardeos de EE UU y Gran Bretaña no iban dirigidos directamente contra él.

Rumsfeld añadió que todos los aviones que participaron en los bombardeos, incluidos los que lanzaron ayuda humanitaria, habían regresado a sus bases tras la primera ofensiva.

El ministro de Defensa del Reino Unido, Geoff Hoon, afirmó por su parte que en las primeras incursiones los efectivos de EE UU y el Reino Unido se alcanzaron treinta objetivos, tres de ellos en Kabul, cuatro en las cercanías de zonas pobladas y los restantes 23 en "zonas remotas", pero ninguno civil.

Según Hoon los objetivos alcanzados son "campos de entrenamiento de terroristas, aeródromos e instalaciones militares" empleados por Al Qaeda, la red organizada por el millonario saudí Osama Bin Laden, o el régimen talibán que le protege.

Los submarinos de propulsión nuclear británicos que participaron en el ataque fueron el Superb, el Trafalgar y el Triumph, que dispararon misiles de crucero del tipo Tomahawk contra "un campo terrorista", según precisó el jefe del Alto Estado Mayor, almirante Michael Boyce.

Francia, por su parte, confirmó su compromiso con la ofensiva militar y su ministro de Defensa, Alain Richard, admitió que fuerzas especiales expertas en información se hallan ya en el interior de Afganistán.

La versión de Kabul

La versión oficial del régimen talibán la ofreció el embajador afgano en Pakistán, Abdul Salem Zaif. Salem Zaif afirmó en conferencia de prensa en Islamabad, que su país derribó al menos un avión estadounidense en los primeros ataques, aunque el número podría ascender a cuatro. Salem Zaeef cifró en 20 las víctimas mortales de los bombardeos, pero poco después, un portavoz del ministerio de Sanidad del régimen talibán rebajó a un máximo de 8 la cifra de muertos.

El ministro de Sanidad, Mohammad Abbas, señaló que "muchos de los aviones estadounidenses no alcanzaron sus objetivos".

"Las víctimas por el ataque estadounidense y británico no son tan numerosas como en un primer momento se pensó", dijo Abbas. "Es dificil establecer una cifra exacta de muertos. Pero está entre seis y ocho".

El embajador afgano en Pakistán, Abdul Salem Zaif, aseguró que los aviones derribados, lo fueron en la zona de Farah, al suroeste de Afganistán, aunque no precisó su nacionalidad.

El embajador talibán criticó además los ataques, que calificó de "actos terroristas, no sólo contra Afganistán, sino contra los musulmanes de todo el mundo."

"Este ataque es un deshonor para todo los musulmanes", manifestó, y agregó que se había tratado de una acción "ilegal e impresentable".

"De acuerdo con lo que ha dicho Estados Unidos, sus objetivos eran militares y campos (de entrenamiento de) terroristas; sin embargo, por desgracia, los cohetes han hecho blanco en lugares civiles y han matado mujeres, ancianos y niños", afirmó el embajador talibán.

En cuanto al terrorista saudí Osama Bin Laden, protegido del régimen talibán y a quien EE UU acusa de los atentados del pasado 11 de septiembre, el mulá Salam Zaeef manifestó que "está vivo y en el interior de Afganistán."

Atacadas tres ciudades

Estados Unidos llevó a cabo la primera oleada de ataques contra Afganistán en represalia por los atentados del 11 de septiembre. La operación militar aliada se centró en la capital Kabul, Kandahar y Jalalabad.

En la operación militar participaron buques, submarinos y superbombarderos, que lanzaron más de 50 misiles Tomahawk y bombas guiadas de alta precisión.

Los misiles de crucero, que pueden ser lanzados desde aviones, buques de superficie y submarinos, fueron el primer arma utilizada en la acción militar de castigo contra el régimen de los talibán por amparar a la red terrorista del saudí Osama Bin Laden.

Los misiles de crucero están guiados por satélite, por lo que tienen una alta capacidad de acierto en los blancos elegidos.

Los misiles de crucero más utilizados son los Tomahawk, que EE UU usó con frecuencia durante la guerra del Golfo Pérsico y en un ataque anterior en Afganistán y Sudán en 1998 después de los atentados terroristas contra las embajadas de Kenia y Tanzania. Cada misil Tomakawk cuesta más de un millón de dólares.

Un habitante de Kabul retira los escombros de su casa, afectada por los bombardeos, en esta imagen captada de la televisión.
Un habitante de Kabul retira los escombros de su casa, afectada por los bombardeos, en esta imagen captada de la televisión.
Un misil es lanzado desde el Philippine Sea, durante el ataque de esta noche.
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