La primera ministra finlandesa Sanna Marin anuncia su divorcio

La todavía primera ministra finlandesa, Sanna Marin, ha anunciado este miércoles que ella y su marido, Markus Räikkönen, han decidido divorciarse de mutuo acuerdo. Räikkönen y Marin se casaron en agosto de 2020, después de una larga relación que empezó en la universidad de Tampere. La hija de ambos, Emma, nació en 2018. “Estamos agradecidos por los 19 años que hemos pasado juntos y por nuestra querida hija”, ha publicado en su cuenta de Instagram.

“Seguimos siendo muy buenos amigos, nos llevamos muy bien y somos unos padres amorosos. Seguiremos pasando tiempo juntos como una familia”, ha comentado en su cuenta de Instagram. “Esperamos que respeten nuestra privacidad y no haremos más comentarios sobre el tema”.

Marin dimitió el pasado mes de abril como líder de los socialdemócratas finlandeses después de que su coalición de Gobierno perdiese la mayoría en las elecciones (su partido, el SDP, mejoró sus resultados) aunque aún ocupa el cargo de primera ministra en funciones mientras concluyen las negociaciones de un nuevo gobierno, que sería el más virado a la derecha del país nórdico desde la II Guerra Mundial. Por su parte, hace un par de semanas, Räikkönen había anunciado su incorporación a una firma de capital riesgo con sede en San Francisco (EE UU).

Sanna Marin, hasta entonces ministra de Transportes, asumió la posición de líder de los socialdemócratas en diciembre de 2019, después de que el líder anterior, Antti Rinne, tuviera que dimitir como líder y primer ministro tras su gestión de una protesta de trabajadores postales que acabó en una huelga general. A sus 34 años, Marin se convirtió en la persona más joven en convertirse en primer ministro de Finlandia, y apareció en la lista de las 100 mujeres más relevantes del mundo de la BBC, y en la portada de la revista ‘Time’.

En sus tres años en el cargo, Marin tuvo que gestionar la pandemia de covid primero y la invasión rusa de Ucrania después, y ha navegado junto al presidente de la República, Sauli Niinistö, el proceso de incorporación de Finlandia a la OTAN. La filtración de unos vídeos privados en las que la mostraba participando en una fiesta generó una polémica internacional. Marin pidió disculpas por las imágenes, a pesar de que, meses más tarde, una comisión parlamentaria reconociese que, al participar en las celebraciones, no incumplió con sus responsabilidades como primera ministra.

La polémica también encendió el debate sobre las responsabilidades que se exigen a las mujeres, sobre todo a las mujeres jóvenes, en el ejercicio de la política.