Salen a subasta unas cartas privadas de Lady Di en las que lamenta su “feo y desesperado” divorcio con Carlos de Inglaterra

En una nota escrita a mano puede leerse lo siguiente: “Os pido disculpas por no acudir hoy a la ópera. Estoy pasando por un momento muy difícil y la presión es seria y viene de todos lados. A veces es demasiado difícil mantener la cabeza levantada y hoy estoy de rodillas y solo anhelo que este divorcio se lleve a cabo, ya que el posible coste es tremendo”. La nota la firma, simplemente, Diana. Aunque el mundo la conoce como Diana de Gales o, cariñosamente, como Lady Di. La carta está fechada el día 26 de abril de 1996, tan solo unos meses antes de que se finalizase el proceso de divorcio de su marido, el entonces príncipe Carlos, el 28 de agosto de 1996, y fue enviada por la princesa a sus amigos Susie y Tarek Kassem. El próximo 16 de febrero, el matrimonio subastará esta y otras misivas y tarjetas de su correspondencia personal con Diana de Gales, que llevan guardandos más de 25 años.

“En 2023, la propiedad de estos conmovedores documentos es una responsabilidad que los Kassem no quieren traspasar a sus hijos o nietos”, señalan desde la casa de subastas Lay’s Auctioneers, que se encuentra en la localidad portuaria de Penzance, en la península de Cornualles. “Han decidido vender las cartas y utilizar las ganancias de la venta para apoyar algunas de las organizaciones benéficas con las que colaboraban Susie y Diana”.

La boda real entre Carlos de Inglaterra y Diana Spencer tuvo lugar el 29 de julio de 1981 en la catedral de San Pablo, en Londres. En diciembre de 1992, el primer ministro John Major anunció ante la Cámara de los Comunes que el príncipe y la princesa de Gales se separaban, conmocionando a la sociedad británica. “Es una decisión amistosa y ambos seguirán participando plenamente en la crianza de sus hijos”, transmitió a través de un comunicado oficial del palacio de Buckingham. En 1995, la princesa concedió la polémica entrevista al periodista Martin Bashir en el programa de la BBC Panorama, en la que pronunció la conocida frase de que en su matrimonio con el príncipe Carlos eran tres y que, por tanto, “estaba un poco superpoblado” ante 23 millones de espectadores. Un año más tarde, Carlos y Diana se divorciaron. Ahora, la correspondencia entre Diana y los Kassem aporta una nueva luz sobre cómo la princesa vivió este proceso: “Si hubiera sabido hace un año lo que experimentaría al pasar por este divorcio, nunca hubiera consentido. Está siendo feo y desesperado”, afirma en otra de sus cartas.

Diana de Gales y el matrimonio de los Kassem se conocieron en agosto de 1995, durante una de las frecuentes visitas de la princesa al Hospital Real de Brompton, en Londres. Desde entonces, la pareja se convirtió en un enorme apoyo para la princesa, como lo demuestra la correspondencia en la que Diana se suele mostrar agradecida con ellos. En una carta el 2 de diciembre de 1995, tan solo un día después de que la reina Isabel aconsejase a Carlos y a Diana divorciarse, escribe a los Kassem: “Puede que me hayan descrito como una mariposa, pero no quiero volar lejos de esta encantadora familia”. Se refiere a los Kassem. Diana también les agradece, en varias ocasiones, el hecho de estar ahí cuando ella lo necesita y escucharla en todo momento. En otra de las misivas bromea sobre lo magnífico que es formar parte de un trío. “Estoy inmensamente conmovida por lo protectores que sois conmigo... ¡No estoy acostumbrada a eso!”, escribe en otra ocasión.

“Susie y Tarek se sienten extremadamente privilegiados por haber tenido la oportunidad de conocer tan de cerca a la princesa”, escriben desde la casa de subastas. “A lo largo de su amistad, los Kassem siempre se sorprendieron del increíble efecto que Diana tenía con cualquiera que entrara en contacto con ella, ya fuera en la calle, en el teatro, en un restaurante o en cualquier otro lugar. Su presencia electrizante trasciende el tiempo. La fascinación de la gente por la princesa Diana apenas ha disminuido desde su trágica muerte”, añaden. Según los principales tabloides británicos, las 32 cartas y notas de la princesa podrían llegar a alcanzar las 90.000 libras (alrededor de 101.000 euros al cambio actual) durante la subasta.

No es la primera vez que parte de la correspondencia íntima de Diana de Gales sale a subasta. En 2021, la misma casa de subastas sacó a la venta una colección de alrededor de 40 cartas enviadas por la princesa a su amigo Roger Bramble entre 1990 y 1997. La cifra más alta por un solo lote fue de 7.200 libras (unos 8.142 euros) por una carta de 1996 que describía a la reina Isabel como “la jefa”. Otra misiva de 1996, que describía cómo Roger Bramble fue “una distracción muy bienvenida dentro de las actividades mundanas asociadas con un divorcio inminente”, fue vendida por 6.500 libras (unos 7.300 euros). La venta de toda la correspondencia alcanzó las 67.900 libras (76.800 euros). Otros objetos, como el Ford Escort RS Turbo S1 del año 1985, con el que Lady Di fue fotografiada al volante a menudo acompañada de sus dos hijos, o el colgante de amatista y diamante utilizado en varias ocasiones por la princesa también encontraron compradores en subastas recientes. El coche se vendió por 722.500 libras (817.020 euros). El collar fue adquirido recientemente por Kim Kardashian por 63.800 libras (unos 200.000 euros) en una subasta en la casa Sotheby’s, duplicando el precio de salida del objeto.