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Así es Valentina Pinault, la hija de 14 años de Salma Hayek, que quiere ser “actriz y directora”

La joven, nacida de la relación entre la actriz y el empresario François Henri Pinault, posa por primera vez con su madre en portada de una revista, ‘Vogue México’, a la que ha concedido su hasta ahora única entrevista

Hija Salma Hayek
Salma Hayek y su marido Francois-Henri Pinault posan con su hija Valentina en la playa francesa de Deauville en septiembre de 2012.Francois Durand (Getty Images)
El País

Valentina Paloma Rinault Hayek ya era famosa desde antes de nacer. La hija de Salma Hayek y François Henri Pinault vino al mundo en septiembre de 2007, pero se supo que su madre, una de las más famosas actrices mexicanas, estaba embarazada de ella en marzo de ese mismo año. De ahí que su nacimiento fuera muy esperado y que, desde entonces, haya sido fotografiada en multitud de ocasiones; de hecho fue la propia Hayek la que difundió su primera fotografía dos meses después de nacer, posando con la pequeña.

Hayek vuelve ahora a dejarse retratar con su hija. La actriz, de 55 años, comparte por primera vez la portada de una publicación con Valentina, que ya tiene 14 años y cuenta que le gustaría “ser actriz y después directora”. En este caso se trata de un reportaje para la revista Vogue en su edición mexicana y latinoamericana donde, además de posar para media docena de retratos, también han concedido una entrevista. “Qué gran regalo anticipado para el Día de las Madres”, ha escrito Hayek en su perfil de Instagram, donde tiene más de 21 millones de seguidores. “Me encantan estas fotos hermosas de Nico Bustos”, cuenta en referencia al fotógrafo español que las ha retratado, “y este momento tan especial con mi Valentina. ¡Gracias Vogue México!”.

La mexicana también explica que para ella la llegada de Valentina fue lo más importante de su vida. Tuvo a su hija cuando ya había cumplido 41 años, y ella asume que fue madre “muy tarde”. “Lo hice ya que encontré a la pareja de mi vida y tenía una carrera estable, pero es que yo ya tenía tantas ganas de tener a esta hija que ya nada más me importaba. Ni mi carrera ni nada, creo que eso me ayudó mucho. Además, sentí que ya había hecho muchas cosas en mi vida, entonces ya era una etapa distinta para mí porque ya había hecho cosas de las que ya me sentía muy orgullosa“, confiesa ahora, casi tres lustros después. También afirma que hoy día “ser madre da más miedo que nunca, es demasiado lo que se le pide a las mujeres”.

Cuenta la actriz, reconvertida en empresaria y productora, que su marido le insistió en que volviera a retomar la actuación cuando la niña tenía “poco más de un año”. “Porque en algún punto podría extrañar mi profesión, porque además es una que celebra, porque permite darle rienda suelta a mi creatividad, y porque soy artista. Fue como a los tres años de tener a Valentina que comencé a actuar de poco a poco y empecé a viajar, cuando ella tenía siete años buscó tener su propio ritmo y su propio espacio. En mi caso, aunque he logrado seguir actuando y he podido mantener viva mi profesión y la adoro, no es fácil ningún día, hay momentos en donde las decisiones se vuelven cada vez más complicadas. Es un hecho que la familia pasa a primer plano siempre”, reflexiona.

De hecho, asegura que ya no se implica en proyectos largos: “Salvo cuando ella se va de campamento, creo que ahí sí pido que me traigan una película”. Bromeando sobre su implicación como mujer latina en la crianza de su hija, Hayek dice: “Mamá mexicana es mamá mexicana, no importa en donde estés…”. Valentina lo refrenda: “Siempre me habla, que si ya comí, que si ya me dormí. No importa si está en L.A. y yo en Londres, me marca. Y sí, yo le tengo que enseñar a usar el teléfono”. Valentina explica que usa las redes sociales no tanto por los Me gusta sino por “tener algo que decir”. “Quiero poner cosas en mis redes sobre quién quiero ser, pero lo importante también está allá afuera”.

Salma Hayek posa con su hija de dos meses, Valentina Paloma.
Salma Hayek posa con su hija de dos meses, Valentina Paloma.

Según Hayek, la joven de 14 años siempre ha sido muy autónoma a la hora de vestir, y ahora lo es para maquillarse. “Desde pequeña nunca me dejó escogerle su ropa, y eso siempre me gustó, además con el maquillaje es muy buena. Yo soy buena para el maquillaje, pero ahora ella me enseña a mí”, explica la actriz. Cuenta en la charla la joven Valentina que “cuando se trata de ropa, la de ella me encanta”, dice sobre el armario de su madre. “Siempre uso lo que me gusta, casi no me fijo en la marca. En general me agrada también combinar y llevar piezas vintage. Sí, me gustan las marcas, pero no uso las cosas por eso, solo porque me gusta”, explica la también hija de Pinault (que tiene otros tres hijos, dos de un anterior matrimonio y otro con Linda Evangelista, apenas un año mayor que Valentina), presidente de Kering, el conglomerado de marcas de lujo que agrupa a Gucci, Balenciaga, Yves Saint Laurent, Stella McCartney... y también de Puma o Fnac.

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