El viaje de la excelencia a bordo de la pasión

El camino hacia la máxima excelencia no suele ser corto. Pero, como en casi todo en la vida, lo importante es disfrutar el viaje. El cocinero Jesús Sánchez cumple más de 30 años de ese trayecto vital que le ha llevado a conseguir que su restaurante Cenador de Amós, en Villaverde de Pontones (Cantabria) atesore 3 estrellas Michelin, una estrella verde y 3 soles Repsol.

El combustible que guía el camino de Jesús Sánchez es la pasión. La misma que comparte con DS Automobiles, marca creada en 1994 y de la que es embajador. En el itinerario de ambos resulta sencillo encontrar puntos en común, hitos que guían la trayectoria de dos referentes, uno en el campo de la alta gastronomía, y otro, en el ámbito del automóvil de lujo.

Francia como origen y motor

“Cuando yo empecé en esto, la brújula de la gastronomía apuntaba hacia Francia. Ese savoir-faire ha sido muy importante en mi trayectoria”, señala Sánchez. En esa conexión arranca la pasión de Sánchez por la belleza, algo que comparte con DS Automobiles, que lleva en su ADN el arte francés de vivir y de viajar, en definitiva. A partir de ese legado, Sánchez ha sido capaz de enriquecer su cocina integrando sus raíces navarras sin dejar de mirar hacia el Cantábrico como escenario inspirador. Un ejemplo de esa conjunción de influencias es su ostra acompañada de una salsa de mantequilla con un toque cítrico.

Elogio de lo artesano

Jesús Sánchez compone sus platos como si de un orfebre se tratara, respetando la materia prima que le da su entorno y presentándola a sus comensales en su máxima expresión. Como muestra, el pan que día a día se elabora en el obrador del restaurante. Ese mismo mimo se refleja en el trabajo de los artesanos para DS Automobiles, que parten de materiales de la más alta calidad para lograr acabados de gran elegancia, tan atemporales como refinados.

Atención (plena) al detalle

Cuando uno se pone ante un plato de Jesús Sánchez ⎯ya sea en el Cenador de Amós o en su restaurante Amós, ubicado en el hotel Rosewood Villamagna de Madrid⎯ se da cuenta de que nada es fruto del azar. “Cada uno de los detalles de un plato tiene un significado y una razón de ser”, reflexiona el chef acerca de su proceso creativo, algo que se trasluce en composiciones como el espárrago de temporada, con almendras y berberechos. Esta misma atención al mínimo detalle se puede ver en los modelos de DS Automobiles, como las costuras “punto de perla” en la tapicería o la moldura metálica con el grabado Clous de Paris, detalles que marcan la diferencia.

Una palabra ante todo: calidad

Siglos de cultura gastronómica se condensan en los platos de Jesús Sánchez a partir de la reinvención de recetas y la innovación técnica con sentido (y sensibilidad). Así ocurre en la treintena larga de versiones (y reversiones) de su tortilla Amós. Una historia de calidad y autoexigencia paralela a la de DS Automobiles, que toma como punto de partida el DS original presentado en el Salón del Automóvil de París de 1955 para diseñar desde la excelencia tecnológica, la sofisticación plena y la sed de vanguardia los coches de las generaciones futuras.

Compromiso inquebrantable con la sostenibilidad

Todo lo compartido por Jesús Sánchez y DS Automobiles no tendría razón de ser si no existiera un vínculo con la sostenibilidad, que marca el camino actual de todos aquellos que aspiran a ser referente en su sector. La estrella verde Michelin reconoce el trabajo pionero de Sánchez en la reducción de emisiones, el compostaje, la apuesta por productos kilómetro cero o la economía circular generada en torno al restaurante. Toda una filosofía que da lugar a propuestas como su Áspic de primavera, una gelatina de caldo cocido y jamón con guisantes lágrima de su huerto.

La estrella verde Michelin reconoce el trabajo pionero de Sánchez en la reducción de emisiones, el compostaje, la apuesta por productos kilómetro cero o la economía circular generada en torno al restaurante

DS Automobiles también encarna el paradigma de una compañía de automoción que abraza el cambio positivo. Lo hace a través del uso de tecnologías ecoeficientes, el uso de materiales reciclados y el desarrollo de nuevos comportamientos de movilidad ecológicos. Como ejemplo, la gama DS de vehículos eléctrificados, sus modelos E-TENSE, donde la sostenibilidad y el disfrute de la conducción van de la mano: igual que en cualquiera de los platos de Jesús Sánchez.