Puente responde con ironía y papeles a la queja del alcalde de Móstoles sobre el carril bus de la A-5: “Es una petición de la Comunidad de Madrid”

El alcalde de Móstoles, Manuel Bautista (PP), tuiteó el jueves por la tarde la fotografía de un atasco en la A-5, entre ese municipio y Cuatro Vientos. “Este es el suplicio diario que tienen que soportar los mostoleños por el inventito del carril bus”, señaló el alcalde, apuntando directamente como culpable al ministro de Transportes, Óscar Puente. Desde que empezaron las obras de soterramiento de esa vía a mediados de enero, se producen con frecuencia retenciones en esa zona. El ministro contestó entonces con otro tuit en el que adjuntó dos documentos que demuestran que fue la propia Comunidad de Madrid, gestionada por el mismo partido que Bautista, la que solicitó el carril en esa vía durante las negociaciones para trazar un plan de movilidad alternativo a las obras. Bautista cambió entonces el enfoque del problema y esta mañana ha respondido a EL PAÍS y señala que el caos no lo causa el carril VAO en sí, sino su ubicación. El ministerio ha recortado esta noche el tramo de autobuses en dos kilómetros.

Todo empezó con una petición expresa. “El Consorcio Regional de Transportes [sociedad pública dependiente del Gobierno de la región] solicita asimismo el carril bus desde Móstoles a Cuatro Vientos en la A-5″, puede leerse en el primer documento que colgó Puente como prueba de que la queja de Bautista procedía de sus propias peticiones, al menos de las del Gobierno de la región, firmado por el Consorcio el 13 de noviembre de 2024. En el segundo, enviado un día después, el Consorcio insiste: “Le solicito que, como titular de la vía, valore y considere la propuesta de habilitar un carril bus en la A-5, y en caso de que el informe fuera favorable se lleven a cabo las actuaciones oportunas”.

Tras la polémica generada en redes por la noche, aupada por un espectador de La Revuelta que se quejó casualmente ante David Broncano por lo mismo, Bautista ha cambiado unas horas después el enfoque de la problemática. En una respuesta por escrito a este periódico, ha apuntado que el problema no es el carril bus en sí, sino la ubicación en la que se sitúa y que “la marca la administración competente, que es el Ministerio de Transportes”. El alcalde de Móstoles acusa a Óscar Puente de “echar balones fuera”y ha hecho hincapié en que, pese a que fue una propuesta de la Comunidad de Madrid, la última palabra sobre el asunto la tiene el ministerio. “El señor Puente parece haberse olvidado de cuáles son las competencias asignadas al departamento que dirige”, ha espetado.

“Como nos olíamos que nos ibais a cargar el muerto si salía mal, pedimos que se solicitase formalmente”, insistió Puente la noche de este jueves en X. “Y como puedes ver, así lo hizo la Consejería de Transporte el 14-11-24. Está claro que acertamos, porque os conocemos muy bien”, zanjó el ministro.

Borja Carabante, concejal de Movilidad en el Ayuntamiento de Madrid, fue uno de los responsables de elaborar el plan de movilidad alternativo al soterramiento y mantuvo reuniones con Puente para trazar la estrategia. A pesar de ello, retuiteó el mensaje de X de Bautista en el que culpa directamente al ministro del carril bus. “A lo mejor el alcalde de Móstoles desconoce esto”, señaló el Óscar Puente. “Lo más lamentable es que quien sí lo conoce, que es el Concejal de Movilidad de Madrid, encima lo retuiteé”.

No es la primera vez que el alcalde de Móstoles culpa al ministro del carril bus. El 28 de enero, colgó otro tuit al respecto. “Le pido al señor Puente que recapacite, que abandone las medidas experimentales y retire el nuevo carril bus de la A-5 que une Móstoles y Alcorcón”, señaló Bautista. Cuatro días antes de ese mensaje, puso otro aún más contundente: “El señor Puente ignora completamente a los mostoleños”.

Las obras para soterrar la A-5 comenzaron a mediados de enero. En las negociaciones para trazar un plan de movilidad alternativo estuvieron los ayuntamientos afectados, la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Transportes. Entre las medidas estuvo la de desviar los autobuses interurbanos a la estación de Cuatro Vientos, que sirve de conexión también con Cercanías. Para agilizar la llegada de los autobuses allí, la Consejería de Transportes pidió que se habilitara un carril especial que “mejoraría sin duda los accesos de los autobuses que se van a reforzar para paliar las afecciones que las obras”, según consta en el segundo documento que colgó el ministro.

Cada administración actuó dentro de sus competencias para amenizar los problemas de movilidad que han generado las obras de soterramiento. El Ayuntamiento de Madrid reforzó los autobuses de la EMT, el Consorcio Regional de Transportes, las líneas 5 y 10 de metro y el Ministerio de Transporte hizo lo mismo con la línea C-5 de Cercanías, añadiendo 40.000 plazas más. Una de las peticiones que Comunidad y ayuntamientos populares hacían también es que el ministerio, titular de la autopista de peaje R-5, abriera la vía de manera gratuita a vehículos privados. En su lugar, la decisión de Óscar Puente fue permitir el acceso solo de autobuses desde el 15 de enero sin coste alguno. Según el ministerio, se han registrado 5.443 trayectos de autobús y microbús por esa carretera desde que se aplicó la medida hasta el 31 de enero, lo que supone un ahorro de 11.840 euros.