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Vox sigue a la gresca con Almeida en Cibeles: “Alcalde, donde prometió, mintió”

La extrema derecha, socio de investidura de PP y Ciudadanos, crítica junto con PSOE y Más Madrid, el acuerdo de Presupuestos para 2022 con el Grupo Mixto

El portavoz municipal de Vox, Javier Ortega Smith, se dirige al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida (de espaldas en primer término), durante el Pleno.
El portavoz municipal de Vox, Javier Ortega Smith, se dirige al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida (de espaldas en primer término), durante el Pleno.KIKE PARA
Manuel Viejo

Primer pleno del año en Madrid, primer rifirrafe del año. Todo sigue igual en el palacio de Cibeles. La relación municipal entre el PP y Vox sigue en crisis. Lo que en un primer momento pudo ser un cese temporal de la convivencia o una interrupción de relación matrimonial, ahora apunta a un divorcio. Al menos, hasta las elecciones del año que viene. No así en la Asamblea, donde la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, presume de mantener una excelente relación con su socio de Gobierno. Una cosa es la Comunidad de Madrid para los emisarios de Santiago Abascal ―donde tienen muy difícil ampliar su nicho electoral ante la sombra de Ayuso― y otra muy distinta el Ayuntamiento, donde lo ven muy posible en las próximas urnas. Ahora mismo cuentan con cuatro concejales y 122.452 votos.

El alcalde de la capital de España cerró 2021 con la brújula de su dirección política desorientada. Tras dos años de continuos mensajes de apoyo hacia Vox, a quien les debe su investidura, tuvo que virar el rumbo a la vuelta del verano. En juego estaba la aprobación de la nueva ordenanza de movilidad —el nuevo Madrid Central― y los presupuestos de este año. Con el rechazo de Vox a la primera medida, la extrema derecha aprovechó cualquier acto, pleno o rueda de prensa, para recordarle que con esta directriz estaba incumpliendo día tras día su principal promesa electoral. Desde septiembre a diciembre todo se deterioró de golpe. Fueron meses durísimos. Nadie olvida las marquesinas en las estaciones de autobuses con el rostro de Almeida: “#ConAlmeida Madrid Central se acaba el 26 de mayo”. Y no ha sido así.

El primer pleno de 2022 comenzó con una intervención de José Luis Martínez-Almeida a petición del Grupo Mixto. El alcalde de la capital dio un varapalo a izquierda a derecha:

―Nos sentimos orgullosos porque este Gobierno no responde ante Pedro Sánchez ni ante Vox, solo responde a los madrileños.

La vicealcaldesa, Begoña Villacís, de Ciudadanos, asentía con la cabeza. “Nosotros”, continuó el también portavoz del PP a nivel nacional, “nos marcamos la capacidad de llegar a acuerdos, con unos y con otros. Queremos seguir consolidando a Madrid. Hemos pactado a izquierda y a derecha. Que nadie lo dude. Nadie nos va a decir con quién tenemos que pactar”.

El hipotético alcalde transversal, en el fondo, siempre se ha mostrado más cómodo con Vox, a quien ha defendido incluso en los momentos más duros como los días internacionales contra la violencia de género, donde la extrema derecha trata de arrancar segundos y fotos para salir en los telediarios.

Ahora, tras el rechazo también de Vox a las cuentas del Ayuntamiento de 2022 ―que fueron aprobadas gracias también al Grupo Mixto (tres exconcejales de Más Madrid)―, el equipo de Almeida trató de aminorar el impacto en sus votantes con una gran ronda de entrevistas a los medios afines a finales de diciembre. No es fácil de atribuir un relato de consenso con la izquierda entre sus fieles más conservadores. Hubo un día, incluso, en que realizó tres entrevistas en menos de 48 horas. Todas a medios conservadores. A ellos, explicaban en su equipo, se les debía una explicación, como también aseguró un editorial del diario El Mundo.

Javier Ortega Smith, de nuevo, lanzó el látigo contra el mandatario este martes. “Lo que no se merecen los madrileños es que les mienta”, dijo el portavoz de Vox en el palacio de Cibeles. “No se merecen haberse rendido ante un grupo que no lo ha votado a nadie [en referencia al Grupo Mixto]. ¡Cómo le va a explicar este precio a los madrileños!”. Antes del turno de réplica, PSOE y Más Madrid también se sumaron a las críticas hacia el Grupo Mixto. Así arrancó la socialista Mar Espinar:

―Nadie entiende su estrategia. El Grupo Mixto no representa a nadie.

Y así Rita Maestre, de Más Madrid:

―No sabemos si este pleno está siendo una tertulia de politólogos o de Madrid.

Dijo que los presupuestos de 2022 se habían hecho a imagen y semejanza de la extrema derecha. “Y hasta aquí la tertulia”, observó. “Si hablamos de Madrid, hablemos. Estamos en el año tres de la legislatura y esta es una legislatura perdida. Cuanto antes termine este Gobierno, mejor”.

El Grupo Mixto, que empezaron siendo cuatro ediles en abril de 2021 y ahora ya son tres, respondió con ataques a sus antiguos miembros de formación. “Muchos de los que están ahora en Más Madrid pintaron entre cero y cero en la anterior legislatura. ¡Ya está bien de tonterías! ¡Ni corta y pega ni hostias!”, enfatizó el edil Luis Cueto, que explicó de nuevo los motivos de su apoyo a Almeida en los Presupuestos de 2022, a la ordenanza de movilidad y a la ordenanza de terrazas: hay que tener consenso en tiempos difíciles.

De pronto, Almeida tomó la palabra de nuevo:

― Dentro vídeo.

Y no pasaba nada. Un silencio incómodo a la vista de todos. Entonces, insistió otra vez:

―Dentro vídeo, por favor.

Y apareció un vídeo en las grandes pantallas del Ayuntamiento con un Ortega Smith más rejuvenecido en una intervención pública ante los medios. En las imágenes, el emisario de Santiago Abascal en la capital se mostraba a favor del nuevo plan de contaminación de Almeida. El pleno se convirtió otra vez en un programa de televisión. Hace tiempo que la política madrileña es un plató. El alcalde, henchido de orgullo, dijo al terminar su fragmento audiovisual: “Muchas gracias”. Y se fue a su asiento de la primera fila. Mientras tanto, el edil de Vox bebía un par de tragos de agua. Preparaba su respuesta. “Tomamos nota del vídeo para los próximos plenos”, contestó. Y entonces levantó el dedo índice y le advirtió con fiereza al alcalde: “Usted pondrá en su epitafio político. Donde prometió, mintió”.

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Sobre la firma

Manuel Viejo
Es de la hermosa ciudad de Plasencia (Cáceres). Cubre la información política de Madrid para la sección de Local del periódico. En EL PAÍS firma reportajes y crónicas desde 2014.

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