La policía encuentra a dos niños desnudos y solos en el centro de Madrid

Una patrulla de la Policía Nacional pasaba el sábado de madrugada por la plaza de San Francisco, en el centro de Madrid, cuando se percató de algo extraño. Dos pequeñas figuras que vagaban solas a las dos de la mañana, en la oscuridad y sin rumbo fijo. Bajaron del coche y comprobaron que eran dos menores de dos y tres años que caminaban por la calle de la mano desnudos. Otros agentes encontraron a su madre poco tiempo después, en estado de embriaguez. Está acusada de un delito de abandono.

Los niños, que responden a las inicialies T.O y M.O, deambulaban solos en medio de la noche. Uno de ellos nació en marzo de 2019 y el otro en diciembre de 2017, ambos en Túnez. La calle a esas horas estaba casi desierta porque, a pesar de que era el primer día de las fiestas de San Cayetano, la pandemia obliga a que las actividades multitudinarias sigan restringidas. De hecho, Madrid cuenta con un dispositivo especial policial para estos días para evitar aglomeraciones y botellones. Los pequeños se encontraban solos en casa y, por un motivo que se desconoce, decidieron salir a la calle.

La patrulla les condujo entonces a un centro sanitario para que comprobaran su estado de salud y después de ver que estaban bien, servicios sociales se hizo cargo de ellos. Otros agentes de seguridad ciudadana del distrito Centro se quedaron por la zona tras la alerta de los compañeros y se toparon sobre las seis de la mañana con una mujer en estado de nerviosismo y de embriaguez que aseguraba que sus hijos se habían ido de casa.

Los policías la acompañaron a su domicilio en la calle Jerte, muy cercano a donde encontraron a los niños, y comprobaron que era la madre. Los agentes encontraron la casa en malas condiciones y dentro se hallaba su pareja actual, que no es el padre de los niños, y que había salido con ella de fiesta esa noche. Los testigos confirmaron que acababan de llegar a casa y ella solo acertó a contar que había dejado a sus hijos en casa mientras ella salía. La mujer, con nacionalidad francesa y colombiana y de 38 años, ha sido acusada de un delito de abandono de menores.

Los servicios sociales deben analizar ahora la situación y, si se determina así, la Comunidad se hará cargo de la tutela de los niños. En estos momentos, el Gobierno regional se encarga de alrededor de 4.000 menores.

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