Rivekids afirma que su dispositivo no causó la muerte de una niña en un accidente de tráfico en Vilanova de Arousa

Rivekids, la empresa tecnológica de seguridad vial infantil, ha afirmado que su dispositivo RiveMove anclado al sistema ISOFUX del vehículo en el que falleció una menor en un accidente de tráfico en septiembre de 2018, en Vilanova de Arousa, no fue la causa del siniestro, según las conclusiones de la instrucción judicial. En un comunicado, la firma vallisoletana denuncia “una oscura operación para hundir su marca”.

Tras personarse en la causa judicial abierta por el fallecimiento de la niña de tres años a consecuencia del impacto del coche en el que viajaba contra la parte trasera de un autobús, la empresa Rivekids asegura que el atestado redactado por la Guardia Civil en ningún momento inculpa a su dispositivo RiveMove como causa del fallecimiento de la pequeña.

A través de un comunicado, el director general de Rivekids, José Laguna, explica que la empresa no ha recibido “ninguna demanda o querella, ni ninguna prohibición oficial que impida comercializar el dispositivo”. Laguna denuncia que las informaciones en las que se señalaba a su accesorio como causante de la muerte de la niña responden a “una operación de desprestigio” que tiene por objeto “sacar del mercado este dispositivo”.

En concreto, las informaciones a las que se refiere la firma tienen su origen en una nota de prensa emitida por la Asociación Unificada por la Guardia Civil (AUGC). El pasado mes de febrero la AUGC alertó del peligro del uso de este tipo de accesorios. “Estos dispositivos no se encuentran contemplados dentro de la reglamentación de homologación por lo que no es posible garantizar que el uso de los mismos no tiene un efecto negativo en la seguridad de los ocupantes”, señalaba la asociación en un comunicado.

Por el contrario, Rivekids asegura que en el folio 27 del atestado se afirma que, en este caso, al ser una colisión por alcance, el desplazamiento lateral de la silla “no influye en el resultado”. En su escrito, advierte que “el Ministerio de Industria, la ATGC y la DGT conocían su dispositivo RiveMove desde hace cuatro años”. Y atribuye la campaña en contra de su empresa “a un fuerte lobby de presión, con una gran influencia tanto en instituciones públicas, como privadas”.

Rivekids admite que su accesorio no está homologado, tal y como indicaba la nota de la AUGC, pero recuerda que “los únicos elementos que pueden estar homologados en un vehículo, son los propios componentes del coche y las sillas”. El resto de accesorios o dispositivos, como espejos, aproximadores de arnés, soportes para tablets, GPS o teléfonos, así como cuñas y limitadores de impacto lateral para SRI, están englobados dentro de los productos llamados “aftermarket”, aclara Rivekids.

Por ello, pese a no resultar posible su homologación y, como ocurre con la mayoría de productos ‘aftermarket’, “siendo posible su comercialización sin requisitos adicionales, en Rivekids se decidió, desde el compromiso con la seguridad, certificar voluntariamente el dispositivo por una entidad independiente de certificación”, incide la compañía.