Homenaje al padre
La Real Filharmonía dedica su concierto a José López Calo, padre de la musicología gallega, profesor universitario y gran investigador de la música de las catedrales españolas
La Real Filharmonía de Galicia, dirigida por Maximino Zumalave, ha celebrado su concierto de abono de esta semana bajo el título In nomine domini, dedicado a la memoria del musicólogo José López Calo S. J. (Porto do Son, A Coruña, 1922 – Salamanca, 2020). El programa ha estado compuesto por una parte del Divertimento concertante de José Arriola (1896-1954), la Suite nº 3 en re mayor de Johann Sebastian Bach (1685-1750) y la Sinfonía nº 84 “In nomine Domini” de Franz Joseph Haydn (1732-1809).
El Padre Calo fue asesor musical de radio Vaticano, secretario general de la la Sociedad Internacional de Música Sacra, profesor asistente de la Cátedra de Musicología del Instituto Pontificio y profesor de la Universidad de Santiago. Fue autor de sesenta libros y más de mil artículos y lo más granado de sus estudios se centra en la música de catedrales españolas, la del Camino de Santiago, destacando los realizados sobre música barroca y renacentista.
El fragmento del divertimento de Arriola, una auténtica elegía para flauta y orquesta de cuerda, tuvo una lectura llena de sentimiento tanto por parte de Zumalave y la orquesta como, muy especialmente, por el solista de flauta de la RFG, Laurent Blaiteau. El largo silencio sin aplauso alguno, tal como solicitó Zumalave al público en su presentación, debió de resonar como un trueno en el Auditorio de Galicia, al menos por lo que se pudo percibir en la transmisión en directo por “streaming”.
La Suite en re de J.S. Bach, segunda obra en programa, fue otro sentido homenaje al sabio sacerdote jesuita, que fue en vida un gran admirador del cantor de Santo Tomás. Según refirió Zumalave, López Calo hablaba en sus últimos años de sus planes de llegada al Cielo, detallando que tras saludar a Jesucristo y a María, su madre, lo primero que pensaba hacer era hacer lo propio con Bach.
La interpretación de la más célebre de las cuatro suites orquestales de Bach tuvo la riqueza y variedad de caracteres de sus distintas partes. En la obertura hubo la adecuada solemnidad inicial, viveza y claridad en la fuga central y serenidad en su final. La célebre Aria en sol transmitió una sensación de profunda paz, tal vez aquella a la que aspiraba el padre Calo y que bien mereció por su obra. Las gavotas transmitieron toda la alegría que Bach era capaz de infundir a su música cuando esta lo requería, antes de rematar con una lectura más que adecuada de la bourrée y la giga final. Esta suite mostró una notable mejora en la realización televisiva, especialmente en los tiros de cámara sobre solistas.
La Sinfonía nº 84 en mi bemol mayor de Haydn es una muestra de la capacidad de adaptación del padre de la sinfonía a los gustos de sus distintos auditorios. La versión de Zumalave y la Real Filharmonía fue fiel tanto a la letra como al espíritu de la obra desde la introducción del primer movimiento, un largo de libro que precedió a un allegro lleno de expresión lograda sobre todo con una fina regulación de la intensidad sonora.
El andante se produjo con un tempo muy reposado y bastante contraste dinámico, destacando el precioso diálogo de las secciones de vientos, y en el minuetto hubo un hermoso contraste expresivo entre solemnidad y alegría; el Trio fue el perfecto ejemplo de las bondades de la brevedad cuando la calidad de lo escrito es óptima. El vivace es un prototípico finale haydiano y tuvo una sensible lectura por parte de Zumalave que con sus cambios de tempo y dinámica supo aprovechar positivamente la gran eficacia conclusiva típica de Haydn.
La Real Filharmonía toca el mismo programa este viernes a las 20.30 en el Auditorio de Ferrol, en colaboración con la Sociedad Filarmónica Ferrolana, y el sábado a las 20.00 en Teatro Principal de Ourense dentro de la colaboración con la Diputación Provincial.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.