Bravo dimitirá de consejera del Gobierno valenciano cuando se reúna la Mesa de las Cortes

La consejera en funciones de Justicia, Interior y Administración Pública del Gobierno valenciano, Gabriela Bravo, recién nombrada vicepresidenta segunda de la Mesa del Parlamento valenciano esta legislatura en representación del PSPV-PSOE, dimitirá de su cargo en el Ejecutivo autonómico cuando se convoque el órgano rector parlamentario, probablemente la próxima semana. La consejera ha mencionado que otros políticos —el socialista Lluís Berenguer o el popular Rafael Blasco— compatibilizaron cargos en el Ejecutivo y el Legislativo.

Bravo, en una comparecencia pública este viernes en las Cortes, ha mostrado un informe de la Abogacía de la Generalitat, encargado ante las críticas vertidas por el PP por su doble responsabilidad institucional: “No hay, según el documento, una situación de incompatibilidad absoluta ente ambos cargos. Sin embargo, teniendo en cuenta que el órgano rector de las Cortes tiene amplísimas competencias se podría dar lugar a una situación de incompatibilidad de facto que me obligaría a abstenerme a la hora de tomar determinadas decisiones”, ha explicado la consejera. “Por eso, en el momento en que se convoque el órgano rector de las Cortes, yo dimitiére”.

“Si no lo he hecho antes es por responsabilidad con las competencias que tengo en la consejería, donde gestiono no solo la función pública sino las emergencias” y ha recordado la situación de emergencia por ola de calor en la que está la Comunidad Valenciana o el riesgo de incendios, ha apuntado la consejera en funciones. Cuando renuncie, las competencias de Bravo pasarán a depender directamente de Presidencia de la Generalitat valenciana.

Bravo ha insistido en que para ella hubiera sido más fácil quedarse esperando a que la presidenta de las Cortes, Llanos Massó, convocara a la Mesa para adoptar las primeras decisiones, con órdenes del día sencillos, pues no se han constituido todos los grupos parlamentarios ni la Junta de Síndics. “Hubiera sido más fácil dimitir y quedarme en mi casa, sin ningún tipo de problemas pero decidí seguir trabajando en funciones por si se producía cualquier problema o emergencia, y no dejar la consejerá sin titular con las disfunciones que eso conlleva”, ha añadido tras calificar de lamentable que “quien va a ser presidente se dedique a incendiar un debate que es absolutamente ficticio en vez de preocuparse por como tiene que hacerse el traspaso de poderes”.

El presidente en funciones y secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, ha tildado de “ridículo” el debate abierto por la compatibilización de cargos de Bravo, ya que es “una cuestión de días” y además lo “razonable y exigible” en esta época es que haya alguien “competente en incendios”. “No hay incompatibilidad”, ha afirmado. Puig, en rueda de prensa, ha lamentado que esta cuestión “sea el centro del debate político” cuando además “no es la primera vez que se produce”. Puig atribuye el debate a “la insolvencia” del proyecto político de Mazón. “No es un debate crucial, es una cuestión mínima que se va a resolver, son 4 o 5 días, pero en estos momentos la consejera competente en incendios lo razonable y exigible es que se mantenga en el puesto hasta que se considere oportuno”, ha apostillado.

El director de campaña del PPCV y síndic de esta formación en las Cortes Valencianas, Miguel Barrachina, cargaba, sin embargo, solo unas horas antes contra la “infame” reacción del PSPV tras el resultado electoral del 28-M y ha considerado que “la asunción de resultados electorales es una asignatura pendiente” tanto del ‘presidente en funciones, Ximo Puig, y de las consejeras Rebeca Torró y Gabriela Bravo.