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Los vecinos de Azuébar pueden volver a sus casas al estabilizarse el incendio que ha arrasado 500 hectáreas

Los efectivos logran perimetrar el fuego que ha afectado a una zona montañosa poblada de alcornoques y pinos del parque natural de la Sierra de Espadán

Ferran Bono
Los bomberos durante las labores de extinción del fuego de Azuébar, en una imagen del consorcio de Castellón.
Los bomberos durante las labores de extinción del fuego de Azuébar, en una imagen del consorcio de Castellón.

Más de 300 vecinos del municipio de Azuébar, en el interior de la provincia de Castellón, que fueron evacuados la madrugada del domingo ante el avance de un incendio recibieron este domingo por la tarde el visto bueno para volver a sus casas. El fuego, en el que este lunes trabajan 135 efectivos, se encuentra estabilizado desde las cuatro de la madrugada, según informa el Servicio de Emergencias 112. Todo apunta a que la caída de un rayo de una tormenta seca ha sido la causa del incendio, según fuentes de la Generalitat y del Ayuntamiento. El fuego afecta ya a unas 500 hectáreas de superficie forestal, de acuerdo con las primeras estimaciones.

“La población desalojada de Azuébar puede volver a sus casas sin peligro. Evolución favorable y condiciones meteorológicas óptimas para mañana”, anunciaba el domingo por la tarde un tuit de la Generalitat. El fuego, que se declaró a última hora del sábado, amenazaba en su avance a una zona montañosa poblada de alcornoques y pinos del parque natural de la Sierra de Espadán.

El domingo por la mañana, Toni, vecino de Azuébar, estaba sentado en el borde de la carretera en la cercana localidad de Soneja, a donde han sido trasladados la mayoría de los desalojados. “Nos han llamado por megafonía sobre las cuatro de la madrugada y nos hemos ido. Ha sido todo muy ordenado. Yo he visto las llamas al otro de la carretera del pueblo”, comenta. Allí, donde este jubilado vio las llamas, estaban apostadas varias unidades de bomberos de los diferentes servicios de emergencias y de la UME (Unidad Militar de Emergencias) para asegurar el perímetro del pueblo y evitar que el fuego llegue a las casas de la población, uno de los 19 municipios que pertenecen al parque natural de la Sierra de Espadán.

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Las autoridades han cerrado el Puerto de Sagunto para facilitar las labores de recogida de agua para la extinción del incendio, que afecta “con carácter provisional y en una primera estimación” a cerca de 500 hectáreas de superficie. Así lo ha asegurado la consejera de Justicia, Gabriela Bravo, quien ha indicado que la causa del incendio, que afecta a los términos municipales de Azuébar, Almedíjar y Soneja, y parte del parque natural de la Sierra de Espadán, “puede haber sido una tormenta seca”, ya que cayeron bastantes rayos durante la tarde de ayer.

La consejera ha indicado que se trata del incendio más importante que se ha registrado este verano en la Comunidad Valenciana, ya que el que hubo la pasada semana en Rafelguaraf no alcanzó las 300 hectáreas. “El incendio nos preocupa porque si como consecuencia de un cambio en la evolución del viento entrara de lleno en la Sierra de Espadán, la masa forestal generaría una masa combustible que cambiaría mucho la situación”, ha indicado Bravo, desplazada al puesto de mando avanzado, montado en el complejo de piscinas de Azuébar.

Durante la mañana se han incorporado a las labores de extinción más de una veintena de medios aéreos de la Generalitat, del Gobierno y de la UME. La gran cantidad de humo dificultaba la visibilidad de los medios aéreos que se están concentrando ahora en evitar el avance de las llamas por el barranco de la Mosquera hacia la población de Almedíjar, según ha explicado a este periódico Juan Bautista Gómez, coordinador de la unidad helitransportada de los bomberos de la Generalitat. Esta zona es una de las principales reservas de alcornoques de la Comunidad Valenciana y permite el acceso al corazón del parque natural. De momento, se ha quemado sobre todo matorral y pinos. Tres efectivos de la UME, dos brigadas y dos bomberos forestales de la Generalitat han tenido que ser atendidos por los servicios médicos debido a golpes de calor. Se está montando un hospital de campaña para dar respuesta sanitaria.

El incendio, a las cuatro de la mañana, en una imagen tomada por Toni, vecino de Azuébar, antes de ser desalojado.
El incendio, a las cuatro de la mañana, en una imagen tomada por Toni, vecino de Azuébar, antes de ser desalojado.

El viento de poniente y las elevadísimas temperaturas, que alcanzaron a la una de la madrugada los 40,2 grados en algunas zonas de la provincia de Castellón durante la ola de calor extremo, avivaron el fuego por la noche. “Ya por la tarde, avisamos a los vecinos de que estuvieran preparados por si había que evacuar. Y ha sido un desalojo muy tranquilo. Todo apunta a que ha sido un rayo el causante. Hubo una tormenta eléctrica y se vieron y escucharon muchos rayos. Las llamas se veían muy cerca, cayó agua, pero muy poca.”, ha señalado la alcaldesa de Azuébar, Jessica Miravete.

El pueblo estaba completamente vacío a primera hora de esta mañana. Solo se oía el sonido de los helicópteros y los aviones y el ladrido de algún perro. Una patrulla de la Policía Autonómica estaba apostada junto al campanario de la iglesia del pueblo para prevenir la posibilidad de robos durante el tiempo en que la población permanece evacuada.

Vecinos de la localidad de Azuébar se refugian en un pabellón de la localidad castellonense de Soneja este domingo, tras ser evacuados por el incendio declarado a última hora de ayer en Azuébar.
Vecinos de la localidad de Azuébar se refugian en un pabellón de la localidad castellonense de Soneja este domingo, tras ser evacuados por el incendio declarado a última hora de ayer en Azuébar. Domenech Castello (EFE)

El núcleo de la población de Azuébar se encuentra encaramado en la ladera de una montaña, a 298 metros de altitud, dentro del parque natural de la Sierra de Espadán. Cuenta con una enorme riqueza de especies vegetales como el alcornoque, la carrasca, los olmos, el romero o el espliego, siendo el Paraje de Mosquera uno de los mejores exponentes de bosque mediterráneo. La sierra, con 31.180 hectáreas, fue declarada parque natural por el Gobierno valenciano el 29 de septiembre de 1996, siendo el segundo entorno protegido más grande de toda la Comunidad Valenciana. El parque natural forma parte de una sierra en las estribaciones del Sistema Ibérico que separa las cuencas de los ríos Palancia, al sur, y Mijares, al norte.

La Dirección General de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior, a petición de la Generalitat, solicitó al Ministerio de Defensa la activación de la UME para intervenir en el incendio. La unidad ha desplazado 19 vehículos y 53 militares para ayudar en las tareas de extinción.

Los rayos fueron los principales causantes de los incendios forestales el sábado en las localidades de Dénia, Muro de Alcoy, Culla, Sueras y Bicorp. La mayoría han sido controlados o estabilizados. El de Sueras también ha afectado al parque natural de la Sierra de Espadán. “Pero al declararse por la tarde dio tiempo de que actuaran los aviones y se pudo controlar pronto”, ha indicado el presidente de la Diputación de Castellón, José Martí. Tanto el siniestro de Sueras como el Azuébar fueron causados por un rayo, añade.

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Sobre la firma

Ferran Bono
Redactor de EL PAÍS en la Comunidad Valenciana. Con anterioridad, ha ejercido como jefe de sección de Cultura. Licenciado en Lengua Española y Filología Catalana por la Universitat de València y máster UAM-EL PAÍS, ha desarrollado la mayor parte de su trayectoria periodística en el campo de la cultura.

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