La dirección de Podem renuncia a presentarse a las elecciones catalanas

La coalición En Comú Podem ya es historia. La dirección de Podem ha anunciado este miércoles en un comunicado su decisión de no participar en las elecciones del 12-M por un ejercicio de “responsabilidad” y para no colaborar en la fragmentación del “espacio de la izquierda” porque solo beneficia “a la derecha y a la extrema derecha”. El partido difundió hace nueve días su intención de concurrir a los comicios pero ahora, después de haber celebrado incluso unas primarias, se ha inclinado por renunciar a la carrera electoral. La cúpula, que señala que quiere centrar sus esfuerzos en las elecciones europeas, ha llamado a la militancia a participar en una consulta para refrendar su decisión. La votación se celebrará en las próximas 48 horas.

La pregunta a las bases, que no plantea ni alude directamente la convocatoria electoral, reza así: “¿Das apoyo a la decisión de Podem Catalunya y Podemos para continuar construyendo un Podem más fuerte, con mil pies en la calle y conseguir ser referentes a Cataluña para ser útiles para toda la gente que nos necesita?”. Sea cual sea el resultado de la votación, la decisión de Podem, dirigido por la exdiputada Conchi Abellán, zanja la hipótesis de que pudiera reeditarse la coalición con los comunes, muy cuesta arriba ya desde su ruptura tras el 23-J. La votación se celebrará en las próximas 48 horas.

El comunicado de Podem, una suerte de preámbulo que acompaña al enunciado de la pregunta, no cita a Catalunya en Comú pero, sin embargo, fuentes de Podemos han culpado después a los comunes de haber roto la histórica alianza. “Podem ha apostado por buscar los mejores acuerdos posibles para confrontar una candidatura transformadora que garantizara un govern de izquierdas, opción que se ha demostrado imposible por la negativa de los comunes”, aseguran. Tras ese mensaje de la dirección estatal, Abellán ha roto días de silencio y ha insinuado, sin citarlos, que los comunes han forzado el desenlace. “Es imprescindible tener organización y autonomía para seguir siendo una herramienta útil a nuestro pueblo y eso no pasa por ir a unas elecciones con quien desea que estemos muertos (...) No hay partido muerto y no somos quienes rompemos acuerdos”.

Esta será la primera vez desde su fundación que Podemos no concurre a unas elecciones. Podem celebró este fin de semana unas primarias con una lista encabezada por Abellán cuyos resultados no se han publicado. Con su renuncia, Podem se quedará sin cargos en el Congreso —Lilith Verstringe renunció a su escaño— ni en el Parlament al haber roto el carnet la diputada Yolanda López, cabeza de lista ahora de los comunes en Tarragona. Los dos partidos congelaron sus relaciones a raíz de que una decena de miembros de Podem firmara un manifiesto en favor del acuerdo con Sumar, saldado con un expediente y la fuga de un centenar de militantes y con la ruptura del grupo parlamentario en el Congreso.

Los comunes presentaron este martes sus listas, que capitaneará Jéssica Albiach, y no descartaban a última hora poder alcanzar un acuerdo final que ahora se ha evaporado. La diputada había afirmado en varias ocasiones su voluntad de alcanzar una entente con Podem aunque también es cierto que deslizó que era ese partido el que debía decir qué quería hacer. “Primero tienen que decir que es lo que quieren”, señalaron fuentes de los comunes este martes. En el caso de que Podem se hubiera presentado, habría gozado de derechos electorales. Al margen de Barcelona, Eloi Badia liderará la lista de Girona; Elena Ferré la de Lleida y la citada Yolanda López la de Tarragona.

Paralelamente, la CUP ha presentado este miércoles a sus cabezas de lista con una apuesta por perfiles ecologistas que derroten “el negacionismo climático”. Los cabezas de lista son la diputada Laia Estrada (Barcelona, seguida de Laure Vega, que ha optado también a ser primera candidata), Dani Cornellà (Girona), Sergi Saladié (Tarragona) y Bernat Lavaquiol (Lleida). En la presentación de la candidatura, Estrada ha llamado a combatir la “sumisión al Estado” y el modelo extractivista de los macroproyectos que conduce hacia el colaspo “climático, social y nacional”.

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