Aragonès descarta una inclusión de Junts en el Govern

El presidente catalán Pere Aragonès sigue dándole vueltas a su idea de movilizar “gran frente común” democrático ante un posible triunfo de la derecha en las elecciones generales. Este viernes le ha dado una vuelta de tuerca más y, en medio del receso de la jornada de trabajo con sus consejeros, ha comparecido para explicar que les ha encargado que en lo que queda de mandato se centren en consolidar y desarrollar más derechos para los ciudadanos y ha hecho de nuevo el llamamiento a la unidad política. Preguntado específicamente si abre la puerta a que Junts entre de nuevo al Ejecutivo, Aragonès ha respondido que su prioridad es asegurarse una “mayoría parlamentaria” que le dé estabilidad.

“Cataluña será un bastión en la defensa de los derechos y las libertades”, ha dicho el jefe del Govern, gracias a una inmensa “movilización de país” ante “la ofensiva” a los derechos y las libertades que cree se verán seriamente afectados por un gobierno donde estén los de Alberto Núñez Feijóo y los de Santiago Abascal. En esa unidad de acción para blindar “los grandes consensos de país”, ha dicho el president, ”no sobra nadie” pero en su mente no está la vía de que Junts vuelva al Ejecutivo que abandonó el pasado mes de octubre.

Aragonès, que se sostiene sobre 33 escaños de 163, apuesta por buscar fórmulas de grandes sumar en el Parlament que permitan soportar el eventual choque. Ya, tras los malos resultados del independentismo en las elecciones locales de mayo, el propio president había tendido la mano a las otras formaciones para un “frente común”, una idea que no se entendió muy bien ni entre las filas de los republicanos y que fue respondida por los de Jordi Turull pidiendo listas conjuntas para el 23-J. Esos llamamientos a la unidad terminaron en una agria confrontación por los pactos en alcaldías y entes municipales.

El plan del president ante ”la ola reaccionaria” contra derechos y libertades que representaría un triunfo del PP y de Vox tiene dos vertientes: por una lado, que haya una gran movilización electoral el próximo día 23 y, por otro lado, un trabajo interno en el Govern para blindar cualquier posible intento de ataque pero donde muy posiblemente también se tenga que contra con el apoyo del legislativo. De ahí que el encargo a los consejeros durante la sesión de trabajo, que ha durado todo el día, haya sido que “identifiquen” todos los derechos susceptibles de ser amenazados, recordando como en Vox critican directamente el aborto o ambas derechas se lanzan contra el modelo de escuela en catalán. Los departamentos de la Generalitat, ha continuado el jefe del Govern, “estudirán, prepararán y activarán todas als herramientas políticas y jurídicas para defendernos”.

Cataluña, ha recordado el también coordinador nacional de ERC, mantuvo el acceso a la salud universal durante los mandatos de Mariano Rajoy pese a que el PP, desde el Gobierno central, limitó ese derecho a las personas en situación inmigratoria irregular. La idea sería avanzar en esa fórmula, pero sin muchas más concreciones por ahora, más allá de la voluntad de alcanzarlo. Preguntado sobre su bajo nivel de reconocimiento en el último barómetro del CEO, Aragonès ha dicho que trabajará a un nivel más cercano de la ciudadanía pero ha puesto en valor cómo ha crecido la valoración de la gestión de todo el Ejecutivo, ubicada ya en niveles previos al anterior mandato.

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