Barcelona celebra la primera Nochevieja tras la pandemia

Barcelona celebrará este sábado –después del parón de dos años provocado por la pandemia- la llegada del año nuevo con un gran espectáculo de música, pirotecnia y campanadas en la avenida Reina Maria Cristina.

La Guardia Urbana junto con Mossos d’Esquadra y Protección civil han preparado un dispositivo con filtros de acceso en la zona del espectáculo. Los agentes no solo evitarán el acceso al lugar de botellas de vidrio sino que también utilizarán las palas detectoras de metales para que no se introduzcan navajas o cuchillos. En esta zona solo estará habilitado un acceso ubicado en la calzada central entre las dos Torres Venecianas y allí se revisarán al público asistente al espectáculo.

La zona destinada al público será la calzada central de la avenida Reina Maria Cristina junto con la acera del lado Besòs de la calle. La acera Llobregat quedará libre y solo será utilizada por los equipos de emergencia. No se permitirá el acceso de público ni por la avenida Rius i Taulet ni por la avenida Ferrer i Guàrdia que se reservarán exclusivamente para la evacuación en caso de emergencia y para facilitar el desalojo una vez finalizado el espectáculo.

El intendente mayor de la Guardia Urbana, Pedro Velázquez, ha asegurado este viernes que entre agentes de Mossos y de la policía municipal se coordinarán cerca de 800 policías. “Este año habrá 255 policías de la Guardia urbana, un 5% más que en 2019″ ha mantenido Velázquez. El intendente ha desvelado que la previsión de asistentes al espectáculo de Nochevieja es similar a la de 2019 cuando se concentraron 94.000 personas en esa zona próxima a la plaza Espanya. “También habrá agentes de paisano para garantizar la seguridad y prevenir delitos, sobre todo, los hurtos aprovechando el descuido de las víctimas”, ha añadido Velázquez.

Además, tal y como se hizo durante el musical de la Mercè, se activará el servicio de drones. Con estos aparatos la Guardia Urbana dispondrá de imágenes cenitales muy útiles en situaciones de emergencias y facilitan la toma rápida de decisiones. Las imágenes que capten los drones no quedarán registradas y solo se utilizarán para observar en tiempo real la situación en la avenida Maria Cristina. Los aparatos disponen de visión nocturna, visión térmica y altavoz.

Pese a que el epicentro de la seguridad durante la noche estará situado en la avenida Maria Cristina, la Guardia Urbana también tendrá efectivos en la plaza Catalunya y en varios puntos de la ciudad. Además, los agentes llevan varios días realizando inspecciones a locales de pública concurrencia para supervisar que se cumplan las condiciones de seguridad dentro de estos establecimientos. Además, durante la noche se velará para evitar ruidos, excesos de aforo y consumo de bebidas en la vía pública. Solo en este mes se han detectado 68 infracciones de este tipo, la mayoría leves, por no tener la señalética correcta dentro de estos locales.

La Guardia Urbana también monitorizará las redes para evitar fiestas ilegales.

Una vez más, la Guardia Urbana establecerá itinerarios seguros desde los entornos de ocio nocturno (Front Marítim, Poblenou, Paral·lel i Gràcia/Sarrià-Sant Gervasi) –también desde la fiesta de la avenida Maria Cristina- hasta el transporte público. En estos lugares, la Guardia Urbana realizarán patrullajes proactivos prestando especial atención a la seguridad de las jóvenes e intentando, así, evitar que se lleven a cabo violencias machista, agresiones sexuales o conductas LGTBIfóbicas. El cuerpo policial municipal también estará en contacto continuo con los responsables de los establecimientos de ocio nocturno por si es necesario ante cualquier tipo de incidente. Estos itinerarios seguros llevan semanas planificándose y son los recorridos que los usuarios de los centros de ocio siguen de “manera natural”.

Además, durante toda la noche, los agentes realizarán en varios puntos de la ciudad controles de alcohol y drogas. Este mes de diciembre se han detectado 372 alcoholemias y 85 drogotest positivos.

El metro funcionará 43 horas sin interrupción, desde las 5.00 del sábado 31 de diciembre hasta que finalice el servicio el domingo 1 de enero a las 00.00.

El teniente de alcalde de seguridad, Albert Batlle, ha defendido que pese a que la principal preocupación de los barceloneses es la falta de seguridad, los “datos objetivos” demuestran que donde más ha bajado la delincuencia es en la capital catalana.

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