Detenidos dos hombres por el caso del torso hallado en una maleta tirada en un contenedor de Barcelona

Los Mossos d’Esquadra han detenido a dos hombres por su supuesta implicación en el asesinato de un hombre en Barcelona. De él, la policía ha recuperado únicamente un torso que fue hallado el martes en una maleta dentro de contenedor en el cruce de las calles de Casanova y de avenida de Roma, en el centro de la ciudad. Los dos sospechosos convivían supuestamente con la víctima en un piso ubicado delante de donde fue encontrado el cadáver, según fuentes del caso. Uno de los arrestados ha quedado en libertad con cargos, con la obligación de personarse en el juzgado, retirada de pasaporte y prohibición de salir de España. Para el segundo, el juzgado de instrucción número 23 de Barcelona ha ordenado su ingreso en prisión comunicada y sin fianza en una causa abierta por un delito de homicidio.

Álex, la supuesta víctima a la espera de la confirmación de ADN, hacía años que vivía de alquiler en el enorme edificio de ocho plantas de la calle de Casanova, explica una de las residentes. Reservado, de origen alemán, los vecinos, en un bloque donde la mayoría son inquilinos, no sabían mucho de él, más allá de que realquilaba habitaciones. “Salía y entraba gente constantemente. Nunca llegamos a saber quién vivía ahí”, lamenta su vecino de rellano, que tiene una cámara instalada en la puerta. El viernes, los Mossos detuvieron a uno de los dos investigados el domicilio -que está precintado desde el sábado- y al día siguiente por la noche arrestaron al segundo sospechoso, que había huido, en una terraza mientras tomaba algo.

El hallazgo del cadáver tuvo lugar el pasado martes, pasadas las once de la mañana, cuando un chatarrero encontró la maleta dentro de un contenedor que removía. Desde entonces, la policía catalana ha peinado la zona y las cámaras de videovigilancia de los establecimientos del lugar. Finalmente, dieron con el piso en donde sospechan que se cometió el crimen, y donde convivía la víctima con los dos supuestos implicados. El que huyó de los dos, de origen irlandés, tenía antecedentes por delitos violentos, según fuentes del caso. Para él, la jueza ha ordenado el ingreso en prisión preventiva. El segundo, de origen ucranio, llevaba muy poco tiempo viviendo en el inmueble y, según esas mismas fuentes, no estaba en el lugar cuando se cometió el crimen.

Las cámaras han sido esenciales en la resolución de crimen, pero también el puerta a puerta de la policía catalana para intentar saber algo más de lo ocurrido. Con las sospechas de que quien hubiese tirado la maleta en el contenedor no podía andar muy lejos, trataron de deshacer la madeja de un asesinato que había pasado unos días antes del hallazgo, pero tampoco mucho tiempo más atrás, según indicaba el estado del cadáver. Eso permitió descartar ya inicialmente otros casos, como el del joven que vigilaba una plantación de marihuana asesinado en Lleida hace un año, del que aún no han encontrado el cuerpo.

Los Mossos investigan todavía el móvil del homicidio, en una causa compleja, donde no han aparecido el resto de partes del cuerpo del fallecido. La policía no descarta que el principal sospechoso se haya desprendido con anterioridad de ellas, antes de que un hombre encontrase rebuscando en la basura el torso en la maleta que destapó el crimen. Los agentes registraron durante más de 14 horas el domicilio el pasado fin de semana, y no hallaron más partes del cadáver. Tampoco constan hasta el momento denuncias formales por la desaparición de Álex, aunque varios amigos acudieron a edificio de la calle de Casanova, extrañados porque no sabían nada de él desde hacía días. Finalmente, la policía se puso en contacto con ellos al saber de su inquietud, y lograron unir todas las pistas que les llevaron hasta el principal sospechoso.

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