La Generalitat insiste en negociar la ampliación de El Prat aunque no lo ve “viable” a corto plazo
El replanteamiento sería posible si se respetaran las directivas medioambientales, apunta la consejera Laura Vilagrà
La consejera de la Presidencia del Govern, Laura Vilagrà, ha ofrecido este sábado la posibilidad de negociar una ampliación del Aeropuerto de Barcelona-El Prat que “respete” las directivas medioambientales europeas. Una posibilidad que la propia Generalitat matiza porque no la ve “viable” a corto plazo. Vilagrà ha hecho esas declaraciones en la ofrenda floral al monumento a Rafael Casanova con motivo de la Diada, y tras la decisión de esta semana del Gobierno de suspender la inversión de 1.700 millones de euros prevista para el Aeropuerto de Barcelona-El Prat, ante la falta de apoyo de la Generalitat.
Vilagrà ha recalcado que “hay que ser serio y consecuente con las directivas europeas” y proteger el espacio natural de La Ricarda. “Queremos un aeropuerto de primera, un hub internacional, pero también un respeto estricto con las directivas medioambientales. En este equilibrio nos encontrarán y podemos negociar lo que haga falta”, ha asegurado.
Fuentes de la Generalitat han puntualizado que no confían en que esa negociación pueda desarrollarse y culminar en los próximos 20 días, tal como ha apuntado en una entrevista la ministra de Transportes Raquel Sánchez, para incluir un hipotético acuerdo en el próximo Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA). La ministra apunta que la posibilidad existe, pero que la considera poco probable por la actitud del Govern a quien hace responsable de que se haya frustrado el plan de inversión.
Un punto de vista parecido que ha expresado Salvador Illa, presidente del grupo parlamentario del PSC que fiaba retomar las negociaciones con el Gobierno en lo tocante al aeropuerto a que el Govern tenga “una actitud clara” respecto al proyecto, a la vez que subrayaba la falta de coherencia del propio ejecutivo al no respetar el acuerdo alcanzado. Hoy por hoy, la Generalitat da por perdida la inversión de los 1.700 millones, aunque prevén que la negociación se pueda retomar de cara al futuro.
