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Cataluña estudia limitar la construcción de vivienda en 4.200 hectáreas de litoral

La Comisión de Territorio aprueba definitivamente el plan de la protección de la Costa Brava y lo extiende al resto de la costa

Una vivienda en Begur, en el litoral de la Costa Brava.
Una vivienda en Begur, en el litoral de la Costa Brava.

La Generalitat aprobó definitivamente el pasado jueves el ya anunciado Plan de protección de la Costa Brava que evitará la construcción de unas 15.000 viviendas y autorizó al Departamento de Territorio a iniciar la redacción de un nuevo Plan Director Urbanístico (PDU). El nuevo PDU implicará que en 26 municipios de las costas de Barcelona (exceptuando el Área Metropolitana) y Tarragona se revisarán la categoría urbanizable de 4.200 hectáreas con capacidad para albergar unas 100.000 nuevas viviendas.

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En la práctica, el nuevo Plan Director Urbanístico seguirá la filosofía del plan aprobado en la Costa Brava y podrá modificar la categoría de suelos de la costa de Tarragona y Barcelona, informó la Generalitat a través de un comunicado. Con esto, el Gobierno catalán abre la posibilidad de desclasificar suelos urbanizables que, aplicando los mismos criterios que el Plan del litoral gerundense recien aprobado, considere que son “insostenibles”.

La intención es revisar el planeamiento de 26 municipios. Se trata de Malgrat de Mar, Santa Susanna, Pineda de Mar, Calella, Sant Pol de Mar, Caldes d’Estrac, Sant Vicenç de Montalt , Mataró, el Masnou, Sitges, Sant Pere de Ribes, Vilanova y la Geltrú, Cubelles, Cunit, el Vendrell, Roda de Bará, Creixell, Torredembarra, Altafulla, Vila-seca, Salou, Cambrils, Mont-roig del Camp, el Ametlla de Mar, Amposta y Alcanar.

Paralelamente, el Govern trabajará en un nuevo plan de protección y ordenación del litoral que afectará a suelos públicos y de ecosistemas maritimo-terrestres de 89 municipios y tiene como objetivo desplegar nuevos instrumentos para hacer frente al cambio climático, explicó el Ejecutivo a través de una comunicado. Estos dos nuevos planes son parte de la tarea de “revisión del planeamiento vigente” en toda Cataluña que el Departamento de Territorio y Sostenibilidad inició en 2015, cuando ostentaba la carpeta el exconsejero Josep Rull.

El primer plan urbanístico aprobado definitivamente fue el del Alto Pirineo, en julio de 2020. En ese caso, se redujeron unas 300 hectáreas la superficie de suelo urbanizable con capacidad para albergar 8.500 viviendas nuevas.

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Victoria ecologista

El Govern asegura que con la aprobación del PDU del litoral de Girona, pendiente de su publicación en el Diari Oficial de la Generalitat (DOCG), se evitará la construcción de casi 15.000 viviendas en “espacios con valor paisajístico y ambiental”, lo que significa la mitad de los que se podían edificar hasta el momento. El Plan se ha basado en dos grandes actuaciones, además de la revisión de sostenibilidad de 201 suelos en 17 municipios de la Costa Brava, se deberá seguir una serie de directrices de integración paisajística cuando se levante viviendas aisladas, es decir, con jardín.

En estos últimos años, la protección del litoral en la Costa Brava ha sido impulsado por la ecologista Plataforma SOS Costa Brava, que en su primer año de actividad logró suspender hasta 10 de los 16 proyectos que había denunciado.

Los pescadores se organizan para pactar los precios

El Departamento de Agricultura y Pesca de la Generalitat aprobó ayer el reconocimieto de la Organización de Productos Pesqueros de Pez Azul de Cataluña (OPP), una fórmula impulsada por la UE que permite a los armadores y pescadores organizarse para optar a fondos europeos y pactar los precios mínimos de las capturas.

 

La OPP de Pez AZul anunciada por la Generalitat agrupará 14 embarcaciones de la flota de cerco de los puertos de Girona y de Vilanova i la Geltrú. “Es una flota especialmente castigada por la bajada de las capturas y el bajo precio obtenido en su venta”, explica la Generalitat en un comunicado. Las OPP no es una fórmula nueva y en otras comunidades pesqueras como las Islas Canarias o Baleares, ya está implantada desde hace años. A la larga estas “cooperativas” resultan beneficiosas para los faeneros. “Otorgan la posibilidad de salir al mercado como un lobby, por lo que los hace más competitivos a la hora de establecer los precios mínimos en lonja”, explican fuentes del Govern Balear.

 

Las OPP pueden recibir ayudas de los Fondos Europeos Marítimo y de Pesca (FEMP) para su creación y ejecución de planes de producción y comercialización de producto.







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