Sánchez exige a PP y Junts que rectifiquen y aprueben el decreto con el escudo social completo

El pulso entre el Gobierno, el PP y Junts sobre la subida de las pensiones se recrudece. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha exigido al PP y Junts que rectifiquen y aprueben el decreto con el escudo social completo, y no troceado solo con las pensiones o el transporte público, porque hay muchas más medidas importantes de protección social que cayeron el miércoles. “Tienen que ser conscientes del dolor que han causado”, ha dicho Sánchez citando expresamente al PP, pero también con una alusión indirecta y clara a Junts, con quien el Ejecutivo está muy molesto. Algunos ministros ya trasladan con mucha crudeza ese malestar: Margarita Robles, responsable de Defensa, ha dicho hoy en TVE que Junts está “en el chantaje permanente”.

El presidente del Gobierno ha volcado toda la presión sobre el PP y Junts, que rechazaron el decreto con el escudo social y la subida de pensiones. Sánchez no ha dejado claro cómo resolverá el Gobierno el problema, pero ha apuntado que no le parece una buena solución plantear un decreto solo con la subida de pensiones, por ejemplo, porque hay muchas más medidas que también son importantes y han caído. “¿Y el transporte público, y las ayudas a la dana, y las medidas contra los desahucios?”, se ha preguntado Sánchez cuando los periodistas querían saber si hará un decreto el martes en el Consejo de Ministros con la subida de las pensiones para evitar que bajen en febrero, ya que la subida de enero ya está garantizada porque los pagos ya están en marcha. “Aunque las más llamativas sean las pensiones y el transporte púbico, hay muchas medidas sociales en ese decreto, por eso las negociamos en diciembre con todos los grupos”, ha explicado el presidente, apuntando así a Junts.

Félix Bolaños, máximo responsable del decreto, ya dijo el jueves en TVE que en diciembre, todos los grupos de la mayoría, incluido Junts, habían garantizado su apoyo a este decreto, que el Gobierno les explicó antes de aprobarlo, pero que después decidieron tumbarlo por una “cuestión política de pérdida de confianza”. Míriam Nogueras, portavoz de Junts, sí ha admitido que el Gobierno les mostró el decreto antes de aprobarlo, en diciembre, pero asegura que no hubo negociación real. “Se nos presentó el decreto uno o dos días antes del Consejo de Ministros. Pero incluye más de 80 medidas. No puedes pasar dos días antes el decreto y que no se pueda cambiar ni una coma. No se puede funcionar así”, ha asegurado Nogueras.

Sánchez ha volcado toda la presión sobre el PP y Junts. “Apelo a la responsabilidad, al sentido común, a la empatía social. No puede ser que tengamos a grupos parlamentarios que causan dolor social”, ha dicho el presidente, de nuevo sin citar expresamente a Junts pero con una carga de profundidad contra ellos. Aun así, él se concentra en atacar al PP. “Con una abstención del PP habría salido adelante el decreto. ¿Por qué vota en contra? Porque quiere causar dolor social. Yo creo que tenemos que reivindicar una política sana frente a esta antipolítica, esta oposición destructiva que desde 2018 vota sistemáticamente en contra de la redistribución de los frutos del crecimiento económico a las personas que más lo necesitan. Tienen que ser conscientes del dolor que han causado con su rechazo. Por eso les pido que reconsideren su posición y permitan la aprobación de un decreto que es en favor de la gente, no de ninguna minoría, sino de la mayoría social de nuestro país”.

La batalla del relato entre los dos grandes partidos es muy fuerte. El PP también ha intentado elevar la presión y ha anunciado recogerá firmas en la calle y en internet para reclamar a Sánchez que revalorice las pensiones tras tumbar el decreto ómnibus. La secretaria general de los populares ha anunciado que el PP lanza una “ofensiva parlamentaria y social” para instar al Gobierno a que apruebe de forma urgente tres reales decretos con la revalorización de las pensiones, las ayudas al transporte y a los afectados por la dana. Las tres medidas “cuentan con el respaldo del PP para que puedan salir adelante”, ha subrayado Gamarra, aunque el PP votó en contra del decreto ómnibus que las recogía, con el argumento de que la norma incluía además la cesión al PNV de la sede del Instituto Cervantes en París.

Mientras, desde Sumar reclamaron públicamente al PSOE que los decretos vuelvan al Congreso “cuanto antes”, y sin que sean troceados para sacar medidas sociales importantes como la protección frente a los desahucios de las personas más vulnerables. “La gente no puede esperar, el Gobierno no puede esperar. En la espera y la desesperanza solo avanzan las fuerzas reaccionarias y la extrema derecha”, señala el comunicado. El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, principal negociador de la formación, aseguró que hay que aprobar de nuevo el decreto de forma inmediata pero sin trocearlo y retirar esas cuestiones sensibles como los desahucios, como plantean el PP y Junts.

El Ejecutivo entra, pues, en una discusión interna, en la que hay distintas posiciones, para ver si resuelve este asunto el mismo martes, cuando llega el primer Consejo de Ministros ordinario ―está descartado hacer uno extraordinario, sostienen en La Moncloa― y cómo lo hace. Las palabras de Sánchez apuntan que la opción de trocearlo y solo sacar las pensiones, las ayudas al transporte y la de los afectados por la dana, como pide el PP, está casi descartada, y más bien se va a trabajar en una fórmula para recuperar todas las medidas con sus socios habituales, incluido Junts, porque la desconfianza entre el Gobierno y el PP es total.

Los demás socios, mientras tanto, presionan precisamente para que el Gobierno no trocee el decreto y deje caer las otras medidas del escudo social. El decreto rechazado constaba de más de un centenar de artículos y de un larguísimo abanico de medidas: ayudas a los afectados por la dana y el volcán de La Palma, deducciones fiscales para el ahorro energético en viviendas y vehículos, fondos para comunidades autónomas y ayuntamientos, las actualizaciones del salario mínimo y del ingreso mínimo vital, normas para el nuevo impuesto a la banca o para evitar opas de capital extranjero sobre empresas estratégicas, dinero para los menores migrantes en Ceuta… Por eso los otros socios, que sí votaron a favor, al contrario que Junts, insisten en reclamar que se mantenga el bloque y se intente sacar completo. Lo que sí podría salir del nuevo decreto es el acuerdo para el traspaso al PNV de un edificio en París que secuestró la Gestapo al Gobierno vasco cuando los nazis tomaron la capital francesa, y que fue lo que el PP alegó en un principio para votar en contra. El PNV asegura que ese traspaso ya es efectivo aunque haya decaído el decreto, por lo que no sería necesario recuperarlo, según esta interpretación. “Le hago una contraoferta al PP, quitamos el palacete y vota todo lo demás. Es que esto no funciona así, oiga”, ha dicho de forma irónica Óscar López, ministro de Transformación Digital.