Montero combate las críticas del PP y considera un “orgullo” que la relacionen con Chaves y Griñán

Desde que se confirmó su candidatura a la secretaría general del PSOE de Andalucía, María Jesús Montero se ha convertido en la diana favorita del PP andaluz. “La consejera de Chaves y Griñán, los de los ERE”, han dicho o escrito el secretario general del PP, Antonio Repullo, y el portavoz del grupo parlamentario popular, Toni Martín. Montero estuvo 16 años en el Gobierno de Andalucía con tres presidentes diferentes (Manuel Chaves, José Antonio Griñán y Susana Díaz). En el PP creen que esa mochila pesa, pero la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda se la ha puesto por montera.

“Que me relacionen con Manolo Chaves, con Pepe Griñán o con otro tipo de compañeros para mí es un orgullo, porque han sido personas que han modernizado Andalucía, que han permitido que en Andalucía, donde partíamos de una situación muy atrás respecto al resto de territorios de España” se consiguiera “revertir la situación de esta tierra” durante los casi 37 años de Gobierno socialista, ha dicho en una entrevista al programa ‘Hoy por hoy’ de la Cadena SER.

Montero siempre ha tenido palabras de apoyo para los expresidentes socialistas y ex altos cargos de la Junta condenados por el caso de los ERE, mucho antes de que el Tribunal Constitucional corrigiera dos sentencias condenatorias anteriores que mantenían que la cúpula de la Junta de Andalucía —entonces en manos del PSOE— urdió un plan ilegal y fraudulento entre 2000 y 2009 para conceder ayudas sociolaborales por 680 millones a empresas en crisis.

Muy pocos socialistas se atrevían a defender estas políticas hasta que el tribunal de garantías acotó las sentencias condenatorias de la Audiencia Provincial y del Tribunal Supremo por infringir en la llamada “pieza política” del caso el derecho a la presunción de inocencia y el principio de legalidad penal. Montero ha aludido a las sentencias del Constitucional que obligan a la Audiencia de Sevilla a dictar un nuevo fallo y ha asegurado que por parte del PP ha habido un “aprovechamiento político sin límite” del caso para “a partir de cuestiones falsas” y de “utilizar los tribunales para judicializar estas cuestiones, se procesara a presidentes de la Junta de Andalucía”.

Según ella, los expresidentes andaluces “no tienen más que responder” por este caso, porque “todo fue un invento” y “un intento por parte del PP de desbancar por la vía no democrática a los gobiernos socialistas que en ese momento regían en Andalucía”.

En la izquierda andaluza la acogida a Montero, que el miércoles por la tarde registró su candidatura en la sede del PSOE andaluz, tiene varios tonos. El de Adelante Andalucía, la formación de Teresa Rodríguez, que tiene dos diputados en el grupo mixto, no ha sido de bienvenida. Su portavoz parlamentario, José Ignacio García, comparó sus políticas con las que aplica el PP porque inició las “privatizaciones” sanitarias con los conciertos con las empresas privadas, las bajadas de impuesto al topar en un millón de euros las de las herencias, y financiar mal a la comunidad autónoma.

La nueva coordinadora general de Podemos Andalucía, Raquel Martínez, ha expresado un deseo: “Ojalá que María Jesús Montero no baje a Andalucía para seguir con el legado de Susana Díaz, sino con ganas de hacer políticas mucho más valientes y de verdad progresistas. Si fuese así, bienvenido sea el que quiera unirse a esa transformación progresista en Andalucía”.

En Izquierda Unida, socio del PSOE en el Gobierno central, han evitado hablar de nombres, sino de política. “Hay que valorar muy positivamente las políticas que están emanando del Gobierno de coalición, de los ministros y ministras del Gobierno de coalición para con Andalucía”, ha dicho el coordinador de IU y diputado al Congreso por Málaga, Toni Valero.