Felipe VI no asistirá al acto inaugural del cincuentenario de la muerte de Franco “por razones de agenda”

Felipe VI no acudirá el próximo miércoles al acto inaugural por el 50º aniversario de la muerte del Franco, que se cumple este año. El Rey había sido invitado por Presidencia del Gobierno a este evento solemne, que se celebrará al mediodía en el auditorio del Museo Reina Sofía de Madrid, pero no asistirá “por razones de agenda”, según han informado fuentes de La Moncloa. Por su parte, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, también ha declinado la invitación tras asegurar que la decisión de Pedro Sánchez de organizar actos por el aniversario de la muerte del dictador divide a la sociedad española.

La ausencia del Rey había causado malestar en medios del PSOE, en los que se interpretó como un gesto de La Zarzuela para no molestar al PP y Vox. El presidente del Gobierno y Felipe VI “tuvieron la oportunidad de tratar este y otros asuntos esta semana y han podido constatar su alineamiento al respecto”, indicaron las citadas fuentes. Felipe VI, agregaron, “se sumará [más adelante] a la iniciativa del aniversario, participando en varios actos previstos, como la visita institucional a los campos de concentración nazis de Auschwitz [Polonia] y Mauthausen [Austria]”. El primero fue liberado el 27 de enero de 1945 y el segundo, en el que estuvieron prisioneros 7.500 republicanos españoles, el 5 de mayo del mismo año, al final de la Segunda Guerra Mundial. Además, el Rey participará en el “evento que conmemorará el importante papel de la Monarquía en la Transición”, agregaron fuentes de La Moncloa, que no mencionaron a Juan Carlos I, expatriado en Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos) desde agosto de 2020.

De hecho el acto del próximo día 8, al que han sido invitados representantes de la sociedad española (empresarios, sindicalistas, académicos, ministros y diputados), servirá para presentar el programa, con más de un centenar de eventos en calles, escuelas, universidades o museos, que se desarrollará a lo largo de todo el año bajo el lema España en libertad y tendrá su culminación en torno al 20 de noviembre, cuando se cumple medio siglo de la muerte del dictador.

La Zarzuela alegó que el acto de inauguración coincidía con la ceremonia de entrega de cartas credenciales en el Palacio Real por parte de los nuevos embajadores acreditados en España. En la agenda oficial de la Casa del Rey, difundida a primera hora de esta tarde, figuran para el miércoles por la mañana las audiencias con los nuevos embajadores del Reino Unido, Canadá, Panamá, Gabón, Malta y Grecia. Según fuentes de la Casa Real, estas ceremonias se programan con mucha antelación y en esta ocasión no era posible aplazarla, ya que al día siguiente está prevista la tradicional recepción al cuerpo diplomático, a la que no pueden acudir los embajadores que no han presentado antes sus cartas credenciales al jefe del Estado.

Cuando anunció el proyecto, el pasado 10 de diciembre, con motivo del Día de las Víctimas de la Guerra Civil y la Dictadura, Sánchez aseguró que la efemérides debería servir “para homenajear a todas las personas y colectivos” que transformaron España de un país gris y aislado “en una de las democracias más plenas del mundo”. A pesar de que el jefe del Gobierno la presentó como una celebración de la recuperada democracia española, la decisión de conmemorar la muerte del dictador fue descalificada por el presidente del PP. “Pueden desenterrar a España cien veces y actuar como nostálgicos del enfrentamiento entre españoles”, dijo Feijóo en un acto público el pasado día 16. “Ellos a la España de Franco, nosotros a la España sin Sánchez. ¡Qué pereza dan!”, apostilló. En su balance del año, el 27 de diciembre, vaticinó que 2025 discurrirá para el Gobierno “entre los juzgados, Waterloo [donde reside Carles Puigdemont] y quizá algo de Franco”. A pesar de ello, el jefe de Gabinete de Pedro Sánchez, Diego Rubio, llamó a su homóloga del PP, Marta Varela, para reiterarle la invitación, que Feijóo rehusó.