Génova evita exprimir el ‘caso Lobato’: “No es nuestro marco, lo importante es el fiscal general”

Acostumbrados a entrar en todos los frentes, la dirección del PP ha optado en cambio por no hacer leña del árbol caído en la crisis abierta en el PSOE de Madrid por la dimisión de su secretario general, Juan Lobato. Alberto Núñez Feijóo soslayó este miércoles en sus discursos los problemas internos del socialismo madrileño, pese al beneficio que suponen para su baronesa en Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que ha visto cómo el caso del fraude fiscal de su pareja se ha terminado llevando por delante a uno de los máximos dirigentes de la oposición. En el equipo del líder del PP restan importancia a la polémica en torno a Lobato, que registró ante notario los mensajes que se intercambió con una alto cargo de La Moncloa sobre el caso del novio de Ayuso. “Este es un asunto de ámbito orgánico del PSOE”, lo rebajan fuentes del gabinete del líder popular, que insisten en considerarlo como “secundario”. “No es nuestro marco”, subrayan fuentes de Génova. “Lo más importante son las posibles responsabilidades penales del Fiscal General del Estado”, inciden en el entorno del líder del PP, donde prefieren elevar el tiro por encima de los rivales de Ayuso. La intención es cobrarse una pieza mucho más relevante políticamente para Feijóo por su potencial daño a Pedro Sánchez, la de Álvaro García Ortiz.

La dirección del PP apuesta por tanto por no desviar el foco del fiscal general, sin tratar de aprovechar la grave crisis política que viven los socialistas madrileños, aunque esta ayude a Ayuso. La cúpula popular tampoco ha entrado a defender activamente a la presidenta madrileña en el caso del fraude fiscal que afecta a su pareja, pero sí le interesa, y mucho, su derivada judicial contra el fiscal general, al que se investiga por un supuesto delito de revelación de secretos por haber tratado de desenmascarar la información falsa difundida por el jefe de gabinete de Ayuso, Miguel Ángel Rodríguez, en relación con la negociación del novio de Ayuso con la fiscalía. Fuentes de Génova defienden la actuación de Rodríguez, aunque de forma escueta. “No hemos visto que se haya cometido ningún delito por parte de la Comunidad de Madrid, y en cambio sí se investiga al fiscal general por un delito”, replican.

La cúpula de Feijóo celebra en todo caso el movimiento en falso de Lobato. Este, junto a la declaración ante el juez del cabecilla del caso Ábalos, Víctor de Aldama, han dado oxígeno al PP, que sufría en el debate sobre la gestión de la dana. “El serial va a continuar, y por tanto el desgaste del Gobierno”, se felicitan en el equipo directo del líder del PP. Este miércoles, en el debate parlamentario sobre la tragedia en Valencia, Feijóo utilizó la corrupción como principal línea de oposición a Sánchez, mientras evitaba defender la gestión de la riada por parte de su barón, Carlos Mazón, a quien apenas mencionó en su discurso. El presidente le emplazó a pedir la dimisión de Mazón, y Feijóo, para evitar responsabilizar al presidente de la Generalitat valenciana de la catástrofe, utilizó la fórmula de culpar a la política en general, por “no haber estado a la altura”. Feijóo pidió en cambio la dimisión de Sánchez, acuñando una nueva versión del “Váyase, señor González”, con el que José María Aznar percutía contra Felipe González en los noventa. “Usted ya no gobierna, déjelo ya”, reclamó Feijóo a Sánchez, a quien había calificado poco antes como “el número uno de la trama corrupta”.

Pero pese a los últimos incendios que afectan al Gobierno, el PP sigue todavía en una etapa de incomodidad por sus propios asuntos, sobre todo por la fallida gestión de la dana, pero no solo. Los populares se quedaron solos este miércoles en el Grupo Popular Europeo votando en contra del colegio de comisarios de Ursula von der Leyen, por su negativa a respaldar a la socialista Teresa Ribera como presidenta y comisaria. Después, tuvieron que escuchar a Von der Leyen halagar a Ribera como “una europeísta auténtica y comprometida”.

El líder de los populares protagonizó, además, un rifirrafe durante el debate en el Congreso con el portavoz del PNV, Aitor Esteban, quien le reprochó sus “prisas” en querer echar a Sánchez con una moción de censura que, sin embargo, los peneuvistas no ven. “Yo no tengo prisa, no voy a llegar al Gobierno de cualquier manera”, respondió Feijóo a Esteban. Pero el choque con el portavoz del PNV volvió a poner de relieve que, de momento, por muchos casos Lobato que impacten en el Gobierno, el PP sigue sin poder articular una mayoría parlamentaria para desalojar a Sánchez de La Moncloa.