El otoño comienza con un río de borrascas que dejará lluvia en el oeste y norte de España
El fin de semana se producirá un descenso brusco y acusado de las temperaturas en todo el país, con las primeras heladas nocturnas en puntos del interior de la temporada
Primer temporal de lluvias atlánticas a la vista nada más llegar el otoño astronómico, que comenzó el domingo a las 14.44 hora peninsular española. Según avanza este lunes Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la Península se verá afectada durante los próximos días por frentes asociados a distintas borrascas atlánticas, que llegarán una tras otra en una cinta transportadora o río atmosférico. Las precipitaciones serán copiosas en Galicia y, en menor medida, en otras zonas del norte y del oeste peninsulares. Sin embargo, aún quedará un reducto de verano en el Mediterráneo, donde los cielos estarán poco nubosos y hará calor. Así, mientras en el grueso del país las temperaturas estarán en torno a lo normal la primera mitad de la semana, serán cálidas para la época en el Mediterráneo, con máximas de 32° a 34°. El fin de semana llegará una masa de aire frío, lo que provocará un descenso térmico brusco y acusado e, incluso, heladas nocturnas en puntos del interior, las primeras de la temporada.
Durante los próximos días, la Península quedará expuesta a frentes asociados a borrascas atlánticas: las lluvias serán abundantes en Galicia, y también lloverá en otras zonas del norte y oeste; cielos poco nubosos y calor en el Mediterráneo
— AEMET (@AEMET_Esp) September 22, 2024
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Este lunes “continuará una inestabilidad en el norte peninsular y Baleares que procede del fin de semana, en el que se han producido chubascos intensos”. Así, se espera “ambiente revuelto” en ambas zonas, con chubascos que podrán ser fuertes y estar acompañados de granizo, especialmente en Cataluña y en el archipiélago. “Incluso podría haber algunas nevadas en las cumbres del Pirineo”, destaca Del Campo, que no descarta algún chubasco en otras zonas del Mediterráneo, sobre todo en el norte de la Comunidad Valenciana, pero más débiles que en días anteriores. En el mapa de avisos, hay naranja, el segundo nivel de una escala de tres, en Baleares y amarillo, el más bajo, en Cataluña. Las temperaturas “no variarán demasiado” y se superarán los 25° en el sur y en el este de la Península y en los archipiélagos.
El martes, aún seguirá “el tiempo algo revuelto en el este peninsular y en Baleares con chubascos dispersos”, mientras que ya empezarán a notarse los efectos de las borrascas atlánticas en el noroeste de la Península. “Habrá lluvias abundantes y vientos fuertes en las costas atlánticas gallegas, unas precipitaciones que se extenderán con menor intensidad al resto Galicia, a Asturias y al noroeste de Castilla y León”, describe el experto, para añadir que en el resto del país habrá intervalos nubosos pero sin lluvias. Las temperaturas diurnas serán más bajas en el oeste. De momento, solo Baleares continúa bajo aviso, pero amarillo.
El miércoles, el noroeste peninsular proseguirá bajo la influencia de las borrascas atlánticas y “las lluvias serán más abundantes que el día anterior en buena parte de Galicia”. Los registros de lluvia pueden ser importantes y las precipitaciones se extenderán “a buena parte del Cantábrico, al oeste de Castilla y León y a Extremadura”, sin descartar alguna lluvia más débil en otros puntos de los tercios norte y oeste.
Los cielos estarán más despejados en el este y los vientos soplarán con rachas fuertes en el oeste. “Son vientos del suroeste, templados, lo que hará que suban las temperaturas en casi todo el país. Incluso en puntos del Mediterráneo, a donde estos vientos llegan muy recalentados, es posible que se puedan superar los 32°”, pronostica Del Campo. En cuanto a los avisos, Galicia tiene amarillo por lluvia, viento y mala mar; Asturias, Cantabria y Castilla y León, por viento: y Baleares por mala mar.
El jueves, más de lo mismo, con lluvia en Galicia, las comunidades cantábricas y los Pirineos. “Las precipitaciones extenderán de forma más débil a amplias zonas del oeste y centro de la península, también a puntos del norte, no llegarán ni al Mediterráneo ni a Baleares”, indica el portavoz de Aemet. “Continuarán soplando los vientos del oeste y suroeste con rachas fuertes en zonas del norte del país, sobre todo en montañas y litorales, y esto hará que sigan subiendo las temperaturas en la fachada mediterránea, superándose los 32° a 34° en ciudades como Alicante o Valencia. Incluso la ciudad de Murcia podría alcanzar este día el jueves los 35°”, cifra el meteorólogo.
Una masa de aire fría y estancada
Pero a últimas horas del jueves “empezarán a notar un descenso térmico por el noroeste, que durante el viernes se extenderá a buena parte del país”. La causa es que “comenzarán a llegar vientos del noroeste y del norte, que arrastrarán una masa de aire más fría”. Esta masa se quedará estancada sobre la Península durante el fin de semana. “Aunque los cielos estén más despejados y las lluvias queden acotadas al extremo norte del país, el ambiente será frío para la época. Incluso es posible que tengamos ya las primeras heladas en localidades de montaña o de páramos del interior peninsular”, atisba Del Campo, que espera que los termómetros bajen a 2°/4° en capitales como Ávila, Segovia, Soria, Teruel o Vitoria.
“Las temperaturas el fin de semana serán entre 5° y 10° inferiores a las habituales para esta época del año en la mitad norte. Serán valores más propios de comienzos de noviembre”, resume el experto. Sin embargo, “este episodio frío o relativamente frío para la época del año será breve y en los días siguientes, ya a comienzos de la próxima semana, es probable que se recuperen y se normalicen las temperaturas”.
En Canarias, mientras tanto, tendrán su tiempo habitual: régimen de vientos alisios con intervalos nubosos en el norte del archipiélago y cielos más despejados en el sur. Las temperaturas serán suaves; entre 25° y 28° en las costas.
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