Dos días de lluvia por la borrasca ‘Pierrick’ y, de nuevo, calor

La semana comienza en lo meteorológico con dos días de influencia de la borrasca Pierrick, que dejará lluvia, nieve, viento intenso y mal estado de la mar, sobre todo en el norte peninsular pero, a partir del miércoles, reinará el anticiclón y predominará el tiempo estable y cálido para la época en la mayor parte del país, según avanza este lunes Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Así, las lluvias quedarán, a partir del miércoles, circunscritas al extremo norte de la Península e irán a menos mientras que las temperaturas bajarán este lunes y el martes y se recuperarán e iniciarán un ascenso progresivo a partir del miércoles. En la segunda parte de la semana, los valores serán de nuevo altos para la época, con más de 25° en amplias zonas e incluso 30° en algunos puntos.

Pierrick es una nueva borrasca profunda de alto impacto que fue bautizada el domingo por Météo-France, el Servicio Meteorológico Francés. Es la 16ª de esta temporada de nombramientos del grupo suroeste europeo, al que pertenece España, con lo que “iguala ya en número a toda temporada pasada, la 2022-2023, que fue la más abundante desde que empezaron a nombrarse en 2017” y aún queda hasta el 31 de agosto.

Este lunes, un frente asociado a esta borrasca deja avisos, todos de nivel amarillo, el más bajo de los tres existentes, por viento, lluvia, nieve, mala mar o rissagas en Andalucía, Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla y León, Galicia, País Vasco y Melilla. Así, el frente está dando lugar a “lluvias en el Cantábrico y en los Pirineos, que se extenderán a buena parte del resto de la mitad norte y al oeste de la Península”. La cota de nieve ha bajado hasta unos 900 o 1.000 metros y el viento está soplando con intensidad en el norte, lo que está causando mala mar en el Cantábrico y en la costa atlántica gallega, con olas de hasta cinco metros. “El viento, de componente norte y noroeste, irá limpiando de polvo en suspensión la atmósfera, así que remitirá la calima que ha afectado a España durante el fin de semana”, explica Del Campo.

Además, las temperaturas están bajando en buena parte del país, un descenso que será el martes “acusado en el este de la Península y en Baleares, con heladas de madrugada en zonas de montaña y de la meseta norte”. Será “una jornada fresca para la época, con máximas, en muchos casos, inferiores a los 15° en el interior de la mitad norte”. En cuanto a las lluvias, el frente terminará de atravesar la Península, con chubascos tormentosos que podrán ser localmente fuertes en Cataluña y Baleares que irán remitiendo. También se esperan chaparrones en el Cantábrico, los Pirineos y el alto Ebro, y nevará a 800/1.000 metros, una cota que irá subiendo hasta 1.300/1.500 metros.

En el resto del país no habrá lluvias, pero sí vientos intensos del norte y del oeste, más fuertes en la mitad oriental y en Baleares. También seguirá el temporal marítimo, que dejará olas de cuatro a cinco metros en las costas del norte de la Península y de dos a tres en el litoral catalán y de Baleares. Habrá avisos por el temporal en Andalucía, Aragón, Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla y León, Cataluña, Galicia, País Vasco y Comunidad Valenciana, todos amarillos salvo un naranja, el segundo nivel de la escala, por mala mar en Tarragona.

El miércoles “habrá un cambio de tiempo patente”: el anticiclón se centrará sobre el sur de Francia y cerrará el paso de las borrascas por España. “Únicamente la presencia de una borrasca en el Mediterráneo podría dejar algunos chubascos en Baleares”, matiza Del Campo. También podría llover débilmente en el Cantábrico oriental y los Pirineos. En el resto del país, cero agua, aunque “el viento seguirá soplando con intensidad en algunas zonas, sobre todo en el noreste de la Península y en Baleares”. Habrá aviso amarillo por viento en Andalucía, Baleares y Cataluña.

Este día habrá “alguna helada débil en puntos de la meseta norte”, pero comenzará la escalada de las temperaturas a más de 18° en el centro, este y sur de la Península y a 25° en el interior de las comunidades mediterráneas. A partir del jueves, proseguirá el ascenso térmico en buena parte del país hasta “al menos el sábado o el domingo”. Así, durante la segunda mitad de la semana “predominarán los cielos pocos nubosos y sin lluvias en casi ningún punto de España, aunque el jueves todavía podría haber chubascos en Baleares, y las temperaturas serán claramente superiores a las habituales para la época”, anuncia el portavoz, para detallar que las máximas superarán los 25° en amplias zonas, especialmente durante el fin de semana, en el que los termómetros estarán de nuevo “entre 5° y 10° por encima de lo habitual, incluso más de 10° en la mitad norte”.

Podrían superarse los 30° el sábado y el domingo en el interior del Cantábrico y en puntos del este y sur de la Península como los valles del Ebro y del Guadiana. “Quizá el jueves y el viernes la costa mediterránea quede un poco al margen del episodio cálido, con unas temperaturas más habituales por el efecto de las brisas, pero también subirán allí las temperaturas el fin de semana”, completa el pronóstico el meteorólogo.

Será el segundo episodio cálido en lo que va de mes. El pasado fin de semana ya se batieron 14 récords de temperatura máxima y mínima más alta, con noches tropicales, en las que no se baja de 20°, en Bilbao y Santander por primera vez en este mes.

En Canarias, lloverá este lunes y el martes en el norte de las islas más montañosas. A partir de miércoles y ya durante el resto de la semana, tiempo seco y cálido, con un ascenso térmico notable. “Se podrán superar los 30° o 32° en buena parte de las islas desde miércoles hasta al menos el sábado o el domingo, y además, con calima”, concluye Del Campo.