La asociación ultra Abogados Cristianos denuncia al PSOE por colocar la bandera arcoíris en las Cortes de Castilla y León

La asociación ultraconservadora Abogados Cristianos ha denunciado al PSOE de Castilla y León por colocar en las ventanas de sus despachos en las Cortes la bandera LGTBI que Vox rechazó a colocar en el edificio institucional. El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha rechazado la medida cautelarísima solicitada, en la que se reclamaba la retirada de esta simbología por ser una “bandera no oficial”. Los socialistas retiraron este jueves la enseña, tal y como habían anunciado al colocarla el martes, como homenaje al Orgullo LGTBI. El presidente del Parlamento, Carlos Pollán (Vox), amenazó con enviar a los servicios de seguridad a quitar la banderola y alertó también con enviar el caso a la justicia, si bien no lo llegó a hacer, pero sí llegó la denuncia de la entidad, que suele encabezar batallas legales por las mismas cuestiones ideológicas que Vox.

Abogados Cristianos considera que el PSOE ha mantenido un “enfrentamiento contra el Estado de derecho manifiesto” al fijar una bandera arcoíris de 50 metros en las ventanas de sus despachos en el edificio público de Valladolid. “Esta parte ha podido comprobar como la puesta ilegal de la bandera se ha hecho no solo en contra de la legislación vigente sino, además, en contra de las órdenes directas de la Presidencia de las Cortes de Castilla y León”, explican los denunciantes en un escrito presentado el 28 de junio, día del Orgullo LGTBI.

La asociación, afín a Vox y que ya ha denunciado anteriormente la presencia de estos estandartes en otros edificios públicos, pedía, con “especial urgencia”, acabar con “un daño inmediato” en forma de esa banderola multicolor. “La colocación en un lugar tan preeminente y oficial como el balcón del Ayuntamiento supone un daño irreparable contra el deber constitucional de neutralidad de las Administraciones Públicas. La bandera se puede volver a colocar en un futuro, pero el tiempo que permanece izada es irrevocable”, señalaba el escrito, que presentaba así la actitud de Abogados Cristianos con este mensaje en negrita, mayúscula y subrayado: “CADA MINUTO CUENTA DEBIDO A QUE LA BANDERA LGTBI YA SE ENCUENTRA IZADA” [sic].

Las medidas cautelarísimas solicitadas por el colectivo ultra implicaban “exigir la retirada de la bandera no oficial en el balcón de las Cortes de Castilla y León”, pero la respuesta del alto tribunal autonómico ha llegado cuando el PSOE ya había quitado la enseña arcoíris. El TSJCyL ha rechazado la adopción de la medida cautelar urgente solicitada por Abogados Cristianos, pero sí ha abierto una pieza separada para evaluar lo ocurrido. Los socialistas desoyeron también al presidente del Parlamento autonómico, Carlos Pollán (Vox), y sus amenazas con mandar al personal de seguridad de la Cámara o llevar a la justicia la presencia de esas banderas.

Este episodio también se produjo en 2022, con Pollán ya en el cargo, cuando el PSOE reaccionó así a la negativa de la extrema derecha de hacer homenaje alguno al colectivo LGTBI o de iluminar las Cortes con sus colores, como era tradición incluso con el PP al frente. Abogados Cristianos y Vox se amparan en jurisprudencia del Tribunal Supremo sobre la presencia de banderas no oficiales en espacios públicos como este. Una sentencia de 2020 por la colocación de banderas de este tipo en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife (Canarias) propició esa resolución porque para la Sala del Contencioso del Supremo “no resulta compatible con el marco constitucional y legal vigente”. Sin embargo, el PSOE y quienes se oponen a este argumento esgrimen que este contenido alude a cuestiones que afrentan la neutralidad de esos espacios y destacan que ese apoyo a colectivos desfavorecidos o no políticos, como los refugiados o el LGTBI, no van en contra de ese principio de neutralidad institucional. Aún no hay una resolución firme del Supremo sobre la bandera arcoíris.

Abogados Cristianos denunció en 2022 la presencia de dicha simbología en el Ayuntamiento y la Diputación de Valladolid o el Ayuntamiento de Zaragoza y el de Cádiz. Este año los Consistorios de Valladolid y de Burgos, donde el PSOE ha dejado paso al PP con Vox, no han colocado esas banderas en sus balcones.