La oposición arremete contra el presidente canario por su silencio en torno al ‘caso Mediador’
Los socios de Gobierno evitan el asunto en el pleno del jueves y Coalición Canaria critica un “pacto de silencio“ de los partidos que apoyan al Ejecutivo. El mandatario autonómico ha rehusado hablar de la trama desde hace nueve días
El pleno del Parlamento canario se reunía en la mañana de este jueves en Santa Cruz de Tenerife para aprobar, entre otras cuestiones, un paquete de ayudas al sector ganadero. Esta votación fue la menor distancia a la que se acercaron los socios de Gobierno de Canarias (PSOE, Unidas Podemos, Nueva Canarias y Agrupación Socialista Gomera) durante el debate al caso Mediador, que investiga una supuesta trama delictiva relacionada con la extorsión que llevaban a cabo dos ex altos cargos socialistas del Gobierno de Canarias —uno de ellos diputado por la formación hasta la semana pasada— precisamente a empresarios ganaderos. El presidente del Gobierno canario, Ángel Víctor Torres, ha rehusado hablar de la trama desde hace diez días, ausencia que aprovecha el PP como arma preelectoral para enunciar un “pacto de silencio” entre los partidos que forman el Ejecutivo.
El presidente, Ángel Víctor Torres (PSOE), intervino brevemente el 15 de febrero, el día siguiente a la detención del exdirector general de Ganadería Taishet Fuentes Gutiérrez y de la dimisión —forzada por Ferraz— del diputado Juan Bernardo Fuentes. Aquel miércoles, Torres aseguró que “el partido ha hecho lo que tenía que hacer” y que consideraba que ni el PSOE ni el propio Gobierno de Canarias “transige con ningún caso de supuesta corrupción”. Ese día parece mucho más lejano de lo que marca el calendario: desde entonces, la filtración del sumario ha llevado a los medios los escabrosos detalles de la trama, la juez ha detenido y liberado con cargos al exdiputado, ha mandado a prisión al general de la Guardia Civil Francisco Espinosa y ha tomado declaración a los restantes nueve investigados, acusados de delitos de cohecho, tráfico de influencias, blanqueo de capitales, falsificación de documentos y pertenencia a organización criminal.
La organización se dedicaba presuntamente a extorsionar a empresas del sector ganadero a cambio de evitar inspecciones sanitarias o de agilizar o desbloquear expedientes de ayudas europeas. Dentro de esta trama, Marco Antonio Navarro Tacoronte representaba, según las investigaciones, la tarea de mediación entre el exdiputado y ex director general de Ganadería, Juan Bernardo Fuentes Curbelo —apodado como tito Berni—, su sobrino Taishet Fuentes y dos grupos distintos de empresarios. El primero de ellos son los peninsulares interesados en extender su negocio a la Zona Especial Canaria (ZEC). El segundo lo formarían los queseros y ganaderos insulares pendientes de recibir subvenciones, inspecciones o sanciones. La cercanía de las elecciones municipales y autonómicas del próximo 28 de mayo ha impuesto la máxima cautela en las filas socialistas, que parten según las encuestas, con un cómodo colchón como fuerza más votada.
Así, Torres guarda silencio, y no hay previsión de que lo rompa en las próximas fechas, según apuntan círculos cercanos al secretario general de los socialistas canarios. En el seno del Ejecutivo regional se barajan distintas argumentaciones para tranquilizar las aguas en torno al caso. En primer lugar, el hecho de que no ha habido quebranto de fondos públicos. En segundo, el hecho de que ningún director general tiene capacidad de modificar un informe de un servicio técnico ni jurídico. Es decir, que los implicados en la trama prometieron cosas que no podían hacer. “La Administración tiene elementos de control suficientes para que estas fechorías no puedan tener éxito”, aseguran fuentes cercanas. Por último, ningún funcionario, ni ningún ganadero o empresario alertó de irregularidad alguna.
El asunto sí lo han retomado líderes socialistas. La vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha tratado este jueves de ser contundente en los pasillos del Congreso: ”Si alguien ha cometido un delito, que lo pague”. El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ha reclamado que se investigue “con rigor y rapidez” y asegura que le gustaría que otros partidos hicieran lo mismo ante una sospecha de corrupción. Para ello ha puesto de ejemplo a la alcaldesa de Marbella y senadora ‘popular’, Ángeles Muñoz.
En Canarias, la secretaria regional de Organización, Nira Fierro, ha insistido en que comportamientos como los que están siendo publicados estos días por los medios de comunicación “no representan en absoluto los valores del PSOE”, razón por la que la organización “reaccionó de forma inmediata y contundente, como no puede ser de otra manera”, y como se ha hecho “históricamente”. Más contundente ha sido el viceconsejero de Economía y secretario insular del PSOE en Fuerteventura, Blas Acosta, candidato de la formación para el Cabildo de la isla. “Sinceramente, me siento avergonzado y cabreado por estas dos personas que parecen trogloditas”, ha afirmado en conversación telefónica. Acosta, no obstante, sostiene que el partido ha dado suficientes explicaciones y reclamó a formaciones como Coalición Canaria que revisen candidaturas como la del número 1 por Fuerteventura al Parlamento de Canarias, Mario Cabrera, actualmente imputado por prevaricación.
Podemos es uno de los partidos que sustentan el Ejecutivo regional. A esta formación pertenece la consejera de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud, Noemí Santana. “Lo que estamos viendo es esperpéntico, parece más una nueva secuela de Torrente que una serie sobre corrupción en HBO”; asegura. “Esperamos que el PSOE sea el primero al que no le tiemble el pulso y sean tajantes hasta el final, como parece que de momento lo están siendo”. La secretaria general del partido y directora general de Juventud, Laura Fuentes, ha reclamado por su parte “transparencia y ejemplaridad” al PSOE en conversación telefónica. “Van a tener que seguir dando explicaciones”, asevera. “Casos como estos, en los que se dan estos niveles de corrupción y causan semejante asco con imágenes que degradan a las mujeres y debilitan a las instituciones, manchan la imagen de la política y cuatro años de gestión”.
Oposición al ataque
La oposición, por el contrario, ha encontrado un filón para poder restar las posibilidades de que se reedite el pacto de gobierno. El diputado canario del Partido Popular, Guillermo Mariscal, ya echó mano de la trama para atacar a Pedro Sánchez en la sesión de control del miércoles. “Señor presidente”, aseguró desde la tribuna, “gente de bien, en ningún caso, por ejemplo, es el Tito Berni [apodo de Juan Bernardo Fuentes] que utilizó el Congreso de los Diputados para realizar presuntamente actividades ilícitas, eso sí que no es gente de bien”. El mismo día, el parlamentario regional Juan Manuel García Casañas anunció su intención de pedir información al Ejecutivo en comisión parlamentaria. “Es inadmisible que el presidente Torres se parapete tras la consejera responsable del sector primario en el archipiélago para eludir dar explicaciones”, aseveró en una nota.
El jueves, el portavoz del grupo Nacionalista en el Parlamento canario, José Miguel Barragán, ha reclamado en una rueda de prensa celebrada en la capital tinerfeña respuestas “claras e inmediatas” al presidente de Canarias. “¿Qué estarían diciendo los representantes de Podemos, ASG, Nueva Canarias y el propio PSOE si los implicados en esta trama hubieran sido cargos o afiliados de Coalición Canaria?”, se preguntó el portavoz. “La situación es de tal gravedad que no entendemos cómo Torres, en su doble condición de presidente de Canarias y secretario general de su formación política, se ha mantenido en silencio en los últimos diez días”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.