El PSOE se recupera pese al ‘caso Pegasus’ y la pujanza del PP

El escándalo del espionaje, que llevó al Gobierno a relevar a la directora de los servicios secretos, no pasa ninguna factura al PSOE. Al contrario, los socialistas han logrado recuperar un punto de intención de voto en el último mes, según el barómetro de junio de 40dB. para EL PAÍS y la Cadena SER. El PSOE resiste a pesar de que la escalada emprendida por los populares con el nuevo liderazgo de Alberto Núñez Feijóo no se detiene y logra además frenar en seco a Vox. Con este panorama, persiste el empate técnico entre los dos grandes partidos, aunque la derecha pierde la mayoría absoluta que le otorgaba, por primera vez en este año, el barómetro de mayo. Todos los datos internos del trabajo demoscópico pueden consultarse en las webs de EL PAÍS y la SER.

La encuesta se hizo entre el 18 y el 23 de mayo, tras el cese de Paz Esteban como directora del CNI y con el combate político por el escándalo Pegasus atronando cada día. En ese clima, los socialistas mejoran un punto. Y también sus socios de Gobierno, Unidas Podemos, que en mayo habían cosechado el peor resultado de lo que va de año y ahora recuperan 1,3 puntos, hasta el 11,5%.

El trabajo de 40 dB. perfila de nuevo un empate técnico entre PSOE y PP. Los socialistas tendrían más votos que los populares (27,2% frente a 26,4%), pero menos escaños (108 frente a 113). Esa ventaja del partido de Feijóo en diputados no sería suficiente para formar Gobierno, un dato que rompe la tendencia marcada por el barómetro de mayo. Entre el PP, Vox y la derecha foralista navarra reunirían 168 asientos en el Congreso, a ocho de la mayoría absoluta, cuya consecución volvería a estar en manos de los independentistas catalanes y vascos.

La mejoría del PP en el último mes es más modesta (seis décimas), pero lo significativo es que prolonga una tendencia que lo ha llevado a ganar casi cinco puntos desde marzo, cuando se desató la crisis que acabó con el liderazgo de Pablo Casado. Y más significativo aún: el ascenso del PP coincide con un cierto declive de Vox. El partido de Santiago Abascal retrocede casi dos puntos y su posición en un nuevo Congreso no sería mucho más favorable que la actual. Recibiría un 16,2% de los votos (un punto más que en 2019) y solo sumaría otro escaño a los 52 que ya tiene. Es el peor resultado de Vox desde el comienzo del año.

El PP aún tiene una considerable pérdida de votantes hacia Vox, el 13%, pero al mismo tiempo logra recuperar un 9% de los que la última vez se decantaron por la extrema derecha y es ahora la opción para el 5,8% de los que entregaron su papeleta al PSOE. La encuesta vuelve a poner de manifiesto una fidelidad de voto varios puntos superior en la derecha que en la izquierda.

A Unidas Podemos tampoco parece que le pasan factura los conflictos internos de las últimas semanas, sobre todo el vodevil de las negociaciones para la candidatura andaluza. Su recuperación en el último mes no compensa por completo las pérdidas anteriores. De celebrarse hoy elecciones, el socio minoritario del Gobierno conseguiría el 11,5% de los votos (un punto y medio menos que en 2019) y cedería seis de los 35 escaños conquistados en las últimas elecciones. Cerca de un 9% de sus votantes se fuga a los socialistas, mientras en sentido contrario el movimiento es casi nulo. Ciudadanos persiste en su grave estado ―solo dos diputados― y Más País se estanca.

El barómetro ofrece un cuadro de cómo se sitúan a sí mismos en el campo ideológico los votantes de cada partido. Los socialistas están en una posición de izquierda próxima al centro: un 3,7 en una escala en la que 0 es la extrema izquierda y 10 la extrema derecha. Los del PP se ubican claramente a la derecha, en un 7. Los de Unidas Podemos se identifican con posiciones nítidas de izquierda (2), mientras que los de Vox se van un poco más hacia el extremo contrario (8,5).