Villarejo reveló a Cospedal en 2017 la cuenta “Soleado del emérito” en Suiza
El comisario de policía denunció a la entonces secretaria general del PP las maniobras del CNI para proteger a Juan Carlos I: “El generalísimo [Félix Sanz Roldán] no se irá hasta que el emérito haga testamento, hay tanta pasta suelta...”
El comisario José Manuel Villarejo informó en septiembre de 2017 a Dolores de Cospedal, entonces secretaria general del PP, sobre la fortuna oculta de Juan Carlos I en Suiza, dos años y medio antes de que trascendieran las primeras noticias sobre esos fondos millonarios del rey emérito. La fortuna se escondía en una cuenta gestionada por Arturo Fasanna en un banco suizo. Este gestor controlaba también otras cuentas agrupadas bajo la denominación de Soleado, donde ocultaba fondos millonarios de empresarios y políticos españoles vinculados al caso Gürtel.
EL PAÍS reveló por primera vez el 3 de marzo de 2020 que un fiscal suizo, Yves Bertossa, investigaba la donación de 65 millones de euros de Juan Carlos I a quien fue su amante, Corinna Larsen. El emérito ocultó esta enorme cantidad de dinero, regalo del rey de Arabía Saudí en agosto de 2008, en la cuenta del banco suizo Mirabaud administrada por el abogado Dante Canónica, que la puso a nombre de la fundación Lucum, y por el gestor Arturo Fasanna, la misma persona que se ocupaba de otras fortunas de españoles en la cuenta Soleado. El fiscal Bertossa encontró las pruebas documentales de la fortuna oculta de Juan Carlos I en el otoño de 2018, durante los registros de los despachos de Fasanna y Canónica.
El comisario José Manuel Villarejo conoció con mucha antelación detalles de estos movimientos de dinero del rey emérito porque se lo contó Corinna Larsen, con quien se reunió al menos en tres ocasiones (abril y junio de 2015 y octubre de 2016).
Ya en marzo de 2016, Villarejo presumía en una reunión con Ignacio Peláez, abogado de distintos imputados en el caso Gürtel y fallecido un año después, de tener información sensible sobre el rey emérito.
Año y medio después de aquella charla con Peláez, el comisario llamó a Cospedal y grabó la conversación, que forma parte del material incautado por la policía al que han tenido acceso EL PAÍS y el diario digital Fuentes Informadas. El comisario habló a Cospedal sobre el caso Andorra —la policía española reveló en el verano de 2014 la fortuna oculta del expresidente catalán, Jordi Pujol— y la oportunidad perdida para asestar un duro golpe al independentismo catalán.
El comisario planeaba difundir la identidad de 4.000 catalanes que tenían dinero en el mismo banco de Andorra que utilizaba Jordi Pujol. Nunca se acreditó el dato de las 4.000 cuentas de catalanes. Villarejo le contó a Cospedal que fue el director del CNI quien frustró aquella idea para proteger los fondos suizos del rey emérito.
El comisario consideraba que el director del CNI detuvo la operación para hacer públicas esas cuentas de catalanes en Andorra porque la investigación podría acabar salpicando a Juan Carlos I, dado que aparecerían traspasos de dinero a cuentas suizas gestionadas por Fasanna, el mismo que se ocupaba de la fortuna del rey emérito.
Dos meses antes de esa conversación con Cospedal, el comisario Villarejo llamó en julio de 2017 a Ignacio López del Hierro, empresario y pareja de la entonces secretaria general del PP, para contarle su encontronazo con el director del CNI, a quien había acusado de amenazar a la examante del rey.
El comisario reiteró ese mismo mensaje a Cospedal cuando la llamó en septiembre…
El comisario recuerda a Cospedal que denunció en su día unas investigaciones en el Servicio de Prevención y Blanqueo de Capitales (Sepblac), dependiente del ministerio de Economía, sobre supuestas sociedades de Juan Carlos I en el extranjero.
El Sepblac investigó sociedades en el extranjero del rey emérito, según se supo después. La Fiscalía Anticorrupción archivó en marzo pasado unas diligencias abiertas tras una denuncia del Sepblac sobre la existencia de un trust denominado The JRM 2004 trust constituido el 8 de marzo de 2004 en Jersey por Joaquín Romero Maura con un importe de 10,2 millones de euros. El Sepblac señalaba que el propietario último de los fondos del trust podría ser Juan Carlos I. Anticorrupción investigó los hechos y confirmó que el propietario de los fondos fue, en su origen, Juan Carlos I, aunque los delitos habían prescrito y, además, cuando ocurrieron los hechos el emérito estaba protegido por la inviolabilidad.
El Gobierno del PP nunca denunció los hechos sobre el rey emérito que Villarejo trasladó a Cospedal en septiembre de 2017. Solo dos meses después, la policía detuvo al comisario por orden de la Fiscalía Anticorrupción, que le investigaba en secreto desde abril de aquel año.