Laya y Blinken peparan la primera entrevista entre Sánchez y Biden

La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, de visita en Costa Rica, mantuvo este viernes una conferencia con el secretario de Estado, Antony Blinken, como “preparación del encuentro que el jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente estadounidense Joe Biden mantendrán el lunes”, en los márgenes de la cumbre de la OTAN en Bruselas, según fuentes diplomáticas españolas. Será la primera entrevista entre ambos.

Durante la conversación, que se desarrolló en un clima de “cordialidad y sintonía”, según las mismas fuentes, ambos coincidieron en su “visión ambiciosa” sobre el futuro de la Alianza Atlántica, que se plasma en el documento OTAN 2030, que debe aprobarse en la cumbre, y abordaron la estabilidad del Mediterráneo y la situación de Oriente Próximo. Sobre este conflicto, subrayaron la necesidad de “trabajar conjuntamente” en la consolidación del alto el fuego y la búsqueda de una solución a largo plazo sobre la base de los dos estados (judío y palestino), según las mismas fuentes.

También hablaron de América Latina y coincidieron en la necesidad de apoyar una migración “ordenada, segura y regular”. La inmigración no solo es un tema de máxima preocupación para España, especialmente tras el asalto a la frontera de Ceuta del pasado 17 de mayo, sino también para la Administración Biden, que ve cómo las caravanas de inmigrantes cruzan Centroamérica con el sueño de llegar a la frontera entre México y EE UU, que Trump quería cerrar con un muro.

Por su parte, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, aseguró que en la conversación con la jefa de la diplomacia española se había reafirmado la “fuerte amistad, alianza y relación transatlántica entre España y Estados Unidos” y que Blinken había subrayado el compromiso de Washington con una inmigración encauzada “a través de canales regulares, segura, ordenada y humanitaria”.

Blinken, según su portavoz, reiteró a González Laya el apoyo de la nueva Administración a la OTAN, incluido el aumento de los fondos de la organización, y su compromiso de trabajar conjuntamente con la UE y otros socios para afrontar desafíos comunes, como la situación de Oriente Próximo, Venezuela y Nicaragua.