Comienzan las primarias en el PSOE andaluz entre llamadas a la autonomía y al cambio

Autonomía y libertad; cambio y reencuentro; y una vuelta a las esencias de la socialdemocracia son, a grandes rasgos, las ideas fuerza de las candidaturas de Susana Díaz, Juan Espadas y Luis Ángel Hierro a las primarias del PSOE de Andalucía para la Junta, cuya campaña ha comenzado oficialmente este domingo buscando romper con la atonía que ha marcado las primeras semanas desde la convocatoria.

En esa carrera por el liderazgo de los socialistas andaluces hay dos aspirantes claros: su secretaria general, Susana Díaz; y el alcalde de Sevilla, Juan Espadas. Y ninguno ha podido sustraerse, hoy menos que nunca, a la suerte de paralelismos invertidos en los que se han convertido estas elecciones internas en su comparativa con la que en 2017 enfrentó a Díaz y a Pedro Sánchez para la Secretaría General del PSOE nacional.

En lo que muchos consideran como una segunda vuelta de esas primarias, ahora es la dirigente andaluza quien huye del apoyo del aparato y Espadas quien aparece como el elegido por Ferraz, hasta el punto de que ha optado para su mitin inaugural por la localidad sevillana de Dos Hermanas, donde el presidente del Gobierno arrancó la recuperación del poder perdido, acompañado por su alcalde Francisco Toscano y con Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, entre el público. Dos de los principales respaldos en los que Sánchez se apoyó en su particular travesía del desierto.

El regidor hispalense ha sido el último de los tres aspirantes en hacer su presentación oficial, pero también ha sido quien lo ha hecho rodeado de más público: alrededor de unos 600 asistentes en la Plaza del Arenal, frente al menos de medio centenar que han congregado en las reuniones con agrupaciones, Díaz, en su primero acto en La Algaba (Sevilla); y Hierro en Baeza (Jaén). Espadas que en un primer momento había rehusado presentarte como el candidato del aparato, no ha puesto reparos esta vez en hacer paralelismos entre su trayectoria y la de Sánchez. “Es garantía de éxito, el que viene aquí sale presidente y por eso tenía claro dónde tenía que empezar”, ha señalado el alcalde sevillano.

En línea con sus intervenciones de los últimos días, Espadas ha defendido la necesidad de un cambio en el PSOE-A para poder recuperar la Junta de Andalucía y la confianza de los 400.000 votantes que perdió el partido en las autonómicas de 2018. Para ello, es necesario, un proyecto “netamente de izquierdas” —para dar la batalla a una derecha radicalizada para enfrentarse a la extremaderecha— y colectivo y “no personalista”, en alusión velada a Díaz, a quien también se ha referido cuando ha señalado, en el arranque de su alocución, que es “importante llegar, pero también saber irse”.

Espadas también ha puesto el dedo en la llaga cuando ha señalado que la causa de la pérdida de la Junta se encontraba en el 1 de octubre de 2016, cuando se forzó la salida de Sánchez como secretario general, en una maniobra liderada por Díaz y que él mismo avaló. “Ese proceso nos fracturó y nos dividió”, ha reconocido. Su candidatura busca superar esa brecha y por eso aboga por la unidad y el reencuentro. Un reencuentro que simbolizan dirigentes del partido en Andalucía que en un primer momento apoyaron a la secretaria general y que ahora abogan por un relevo en el liderazgo para recuperar el Gobierno.

El alcalde de Sevilla ha apelado a su experiencia en ese cargo —ha recordado sus cuatro años en la oposición a Juan Ignacio Zoido, cuando consiguió la alcaldía de la capital andaluza con una mayoría absoluta— y a su apuesta por el municipalismo y las políticas medioambientales para iniciar en Andalucía “el ciclo político que acabe con el Gobierno de la derecha en España”.

“El PSOE no es un laboratorio de marketing político”

Díaz, por su parte, se ha decantado por mantener la estrategia de encuentros con militantes en jornadas que llegan a incluir hasta ocho municipios, como la del pasado sábado. Este domingo a mediodía ha optado por La Algaba, un municipio sevillano de más de 16.000 habitantes, donde el PSOE ha afianzado la mayoría absoluta por segundo mandato consecutivo. Al ritmo de Resistiré, la dirigente socialista ha vuelto a recalcar la autonomía del PSOE andaluz frente a Ferraz y ha advertido de que el partido “no es un laboratorio de marketing político”. “El 13 de junio nos estamos jugando ser el corazón que bombea socialismo al conjunto de nuestro partido o ser una sucursal, una franquicia que se gobierna desde fuera de esta tierra”. En esa senda de recados a Ferraz, también ha recordado que “el sur no se dirige desde el norte” o que “hay quien ha reflexionado los resultados de Madrid con unas primarias en Andalucía”.

Desde que se convocaron las primarias, la secretaria general de los socialistas andaluces ha buscado desmarcarse de manera abierta de la dirección federal y de Sánchez —muy tocado tras el fiasco de las autonómicas madrileñas—, reclamando a la vez libertad para votar “sin empujones”. “Yo vengo por voluntad propia, sin deberle nada a nadie, sin que nadie me haya llamado para presentarme y sin pedirle a nadie permiso para presentarme”, ha insistido Díaz en alusión a las dudas que suscitó en el movimiento crítico en Andalucía y en la dirección federal la elección de su potencial sustituto. La dirigente socialista —que ha mantenido un perfil inusualmente bajo sobre las alianzas del Gobierno de Sánchez con los nacionalistas, y que sí han sido criticadas por otros barones— ha reivindicado su lealtad, pero esta vez ya con matices. “Soy leal, pero no sumisa, porque no he perdido la rebeldía”, ha advertido. Esta misma semana, en relación con los indultos a los dirigentes del procés, ya se desmarcó alegando que es una decisión que compete exclusivamente al Ejecutivo.

Como Espadas, la secretaria general también ha hecho alusión a la alianza de las tres derechas, presentándose como primera y principal damnificada de esa coalición que, ha recordado, la apeó de la Junta, pese a haber ganado las elecciones y tampoco ha evitado críticas veladas a su propio partido. “Entre nosotros se ha dicho que se ha perdido en Andalucía. No, ganamos por siete u ocho puntos, pero nos sacaron del Gobierno por un pacto infame, el del pacto de Colón”, ha señalado.

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El arranque de campaña de SUSANA DÍAZ

Hierro, el tercero en discordia, dispuesto a no quedarse con la vitola de invitado de piedra, ha apelado en Baeza a las esencias de la socialdemocracia, en un discurso que ha abogado por una España de las autonomías que lidere Andalucía. El profesor de Economía ha defendido las políticas intervencionistas de un Estado fuerte, en referencia directa a las ayudas del Gobierno central con motivo de la pandemia. “La derecha pide ahora ayudas a un Gobierno al que quiere debilitar negando el pago de impuestos”. Hierro ha reivindicado sus posibilidades: “Seguiremos luchando y produciendo ideas, aunque algunos las confundan con vender humo” ha señalado.

En el incierto equilibrio de fuerzas entre aparato y militancia en el arranque de las primarias, las previsiones pasan por que las ejecutivas de Cádiz, Granada, Jaén y Huelva respaldarían al alcalde de Sevilla, mientras que las de Sevilla, Málaga, Almería y Córdoba apoyarían a la secretaria general, pero en los últimos días se ha constituido una plataforma de militantes en apoyo a Díaz y en Málaga cada vez hay más simpatizantes de bases que se decantan por Espadas.