Detenido el conserje de un colegio de Marbella por liderar una banda que traficaba con cocaína a pequeña escala

Igual abría las puertas del colegio o hacía fotocopias para el profesorado que distribuía cocaína en Andalucía. En una operación conjunta denominada Alcatraz, la Policía Nacional y la Guardia Civil han detenido en Marbella al conserje de un centro educativo que, más allá de sus labores diarias, dirigía una organización de narcotraficantes a pequeña escala. Fue su alto nivel de vida, conduciendo vehículos de alta gama y diferentes embarcaciones, entre ellas un yate atracado un puerto deportivo marbellí, lo que llamó la atención de los investigadores. Los agentes le han arrestado junto a otras seis personas por distribuir cocaína en pequeñas cantidades —siempre cercanas a un kilo— por diferentes puntos de Andalucía.

La investigación arrancó a mediados de 2020, cuando los policías tuvieron conocimiento de la existencia de la organización, que realizaba periódicamente envíos de cocaína a distintas ciudades andaluzas, especialmente de Granada y Almería. Tenían su sede en Marbella y, desde ahí, hacían la distribución en vehículos caleteados, es decir, preparados para esconder la droga sin llamar la atención. Varios de los integrantes tenían antecedentes por tráfico de drogas y, según la Policía Nacional, realizaban “movimientos compatibles” con el envío de estupefacientes. Cada uno tenía sus funciones dentro de la organización: unos eran los conductores, otros ejercían vigilancias y contravigilancias y los responsables supervisaban los envíos, que se realizaban en vehículos a nombre de terceras personas. En destino, la cocaína era cortada par su venta al por menor.

Quien más sorprendió a los investigadores fue el líder de la banda, que llevaba un “alto nivel de vida”. “Su trabajo como conserje en un colegio público de Marbella contrastaba con la conducción de vehículos de lujo o embarcaciones recreativas”, subrayan desde la Policía Nacional, que explican varios de estos botes, entre los que había un yate, estaban atracados en uno de los puertos deportivos de la localidad malagueña.

Finalmente, el pasado mes de marzo los agentes detuvieron a un integrante de la organización cuando trasladaba un kilo de cocaína entre Marbella y Roquetas de Mar (Almería). Y aunque el grupo de narcotraficantes intensificó sus medidas de seguridad, días después los policías realizaron otro arresto, que también viajaba con algo más de un kilo de esta sustancia escondida en un compartimento especialmente diseñado para su detección ante cualquier control policial. Finalmente, se llevó a cabo el arresto de los otros cinco integrantes, así como el registro de sus domicilios y la intervención de sus bienes. Entre ellos los del conserje del centro educativo, que poseía diversos vehículos de lujo y tres embarcaciones. En total, tenía un patrimonio superior al medio millón de euros.