El manual que circula en las caceroladas: grabar a policías y no llevar el DNI
Un texto anónimo difundido en chats de participantes en las protestas contra el Gobierno alienta desafiar a los agentes
Un manual anónimo, difundido a través de aplicaciones de mensajería instantánea, alienta a los participantes en las caceroladas callejeras contra el Gobierno a detectar la supuesta presencia de agentes de paisano entre los manifestantes para grabarlos con un teléfono móvil y distribuir su imagen en redes sociales. El documento, de cinco folios de extensión y al que ha tenido acceso EL PAÍS, pide que cuando algún manifestante crea haber localizado a agentes, los grabe con un teléfono móvil y distribuya su imagen en redes sociales “para señalarlos y reventarles el servicio”. “No son policías normales, son la policía política del servicio de información del Gobierno bolivariano de [Pedro] Sánchez”, afirma el documento. También aconseja acudir a estas concentraciones sin el DNI para desafiar a los policías a que los detengan. El manual ha creado malestar entre los agentes, que consideran que hace “un flaco favor a la seguridad ciudadana” en pleno estado de alarma, además de “perjudicar tanto el trabajo policial como la imagen de la institución”, según destacan varias fuentes policiales.
El documento incluye los hashtag (palabras clave precedidas por el símbolo de almohadilla para agrupar contenidos en las redes sociales) como #gobiernodimisión y #veteyasanchez utilizados habitualmente en las convocatorias de las caceroladas hechas a través de las redes sociales y que han reunido a cientos de personas durante los últimos días en varias ciudades españolas, las más multitudinarias en Madrid. En su primer párrafo, el manual asegura que “a partir de ahora va a ser muy común ver a personas de paisano grabando a los que están en los balcones o manifestándose”. E identifica a estos supuestos policías que recogen “datos para crear ficheros, ficheros ilegales por otro lado, [...] que están a disposición del Gobierno para señalar ‘insurgentes”. “Grabar los balcones les permite [a los policías] consultar el catastro y el padrón municipal para saber quién vive en cada domicilio”, asegura.
El documento ―que según las fuentes policiales consultadas parece haber sido redactado por “alguien que conoce procedimientos policiales en la vigilancia de manifestaciones”― alerta a los manifestantes sobre “desconocidos” que se les acerquen “para sondear tu opinión” y que, según afirman, serían policías. “Buscan fuentes de información por un lado y, por otro lado, necesitan gente creando disturbios para tener algo que dar al Gobierno y justificar su trabajo como si fuera algo útil”, añade. Y aconseja: “Grábales sin miedo para que sepan que están quemados [descubiertos]”.
Los autores anónimos del manual ―que incluye fotografías de dos personas que identifica como supuestos policías― piden a los manifestantes en las caceroladas que no colaboren bajo ningún concepto con los agentes “por muy educados que sean” y les alertan de que estos pueden utilizar la intimidación. “Si te intimidan, pídeles que te lleven detenido o que se vayan, no podrán detenerte si no se inventan un motivo”, afirman para poner como ejemplo el reciente vídeo difundido en redes sociales de una intervención policial en un piso de Palma de Mallorca que ha terminado con denuncias cruzadas entre un grupo de jóvenes y varios policías.
El texto recuerda a los manifestantes que “si respetas las normas del estado de alarma, no tienen un motivo legal para pedirte que te identifiques, puedes ir por la calle aporreando una cacerola y con una bandera de España respetando la distancia de seguridad y eso no es motivo para identificarte. No podrán detenerte y tendrán que desistir”, añade. Pese a ello, en buena parte de las concentraciones celebradas hasta ahora, el número de asistentes ha hecho imposible que se respetase la distancia social recomendada por el Ministerio de Sanidad para evitar la extensión de la pandemia.
El manual también propone no llevar la documentación encima cuando se acuda a estas manifestaciones, en línea con un documento similar que aparece en la web de la Asociación de Militares Españoles (AME), de marcado perfil franquista. El objetivo de no portar el DNI es provocar lo que denomina “traslados masivos [a comisaría] a efectos de identificación” para, de este modo, ponerlos como ejemplo “ante la opinión pública internacional como detenciones masivas del régimen bolivariano de Pedro Sánchez y [Pablo] Iglesias”. “Ese hecho destruirá la reputación del gobierno”, augura más adelante.
Una vez en comisaría, el documento recomienda solicitar el llamado habeas corpus [figura jurídica que puede invocar un arrestado para comparecer inmediatamente ante el juez y que este determine sobre la legalidad del la detención] para que la policía se vea obligada a trasladar al manifestante a un juzgado. “Ante el juez declara que estás detenido ilegalmente y pretendes ejercer acciones contra los agentes”. El texto afirma que no llevar el DNI conlleva “una multa ridícula” mientras que el delito de detención ilegal puede suponer a un agente “hasta seis años de prisión. No van a correr el riesgo”, recalca.
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